Reseña: A través del bosque, de Laura Alcoba
La tragedia ocurrió el 14 de diciembre de 1984: una madre ahoga en la bañera a sus dos hijos pequeños, mientras su esposo trabaja a pocos metros y su hija mayor está en la escuela frente a la conserjería donde viven en París. Son exiliados argentinos en Francia. La escritora argentina Laura Alcoba reconstruye con un cuidado minucioso el evento en su nueva novela, A través del bosque, y de modo inesperado devela un misterio oculto en el horror: su hallazgo es tan oscuro como luminoso.
Hay que aclarar que no es una crónica policial, ni se acerca a eso. La intención de Alcoba es entender de un modo profundamente humano qué fue lo que sucedió; no los hechos, lo que rodea a los hechos. En el primer capítulo, Claudio, el padre de los niños, narra todo lo que recuerda sobre el viernes fatídico, paso a paso se expone la secuencia que terminó con la muerte de sus hijos menores.
El resto de la novela es una búsqueda. ¿De qué? De una explicación para lo que no tiene explicación. Solo que Alcoba no lo dice, se limita a escuchar una y otra vez a todos los que estuvieron cerca de lo ocurrido. Así, entrevista en el café Le Bûcheron a la hija sobreviviente. Flavia ya cumplió 40 años, es una mujer alegre, cálida y se va a volver la clave de la historia. En la misma mesa en que charla con ella, también va a sentarse Griselda, la madre. Alcoba desteje los recuerdos de ambas mujeres con una precisión delicada y llena de resonancias.
Se nota que la escritora no llegó a la noticia través de los diarios, y esto es crucial. Su papá fue amigo personal de la pareja, incluso vivió en la conserjería apenas viajó a París, un lugar que la autora visitó pero no recuerda. Era apenas una adolescente cuando su padre le contó lo que había ocurrido. Tuvieron que pasar años para que la capa de olvido se corriera y ella desenterrara de su memoria la información mínima, apenas un dato, pero suficiente para querer entrar también en los recuerdos de otros con la sensibilidad de una artista que procura mostrar una parte del mundo que nadie más puede.
La memoria es el tema que la Alcoba explora desde su primera novela, La casa de las abejas, en la que narra desde una voz infantil los primeros años de la dictadura en una casa donde funcionaba un diario clandestino. A esa novela le siguió El azul de las abejas, con la correspondencia de su padre ya exiliado en París, y la trilogía cierra con La danza de la araña, sobre el exilio en Francia, ese país propio y ajeno al mismo tiempo.
Con esa clave, A través del bosque se vuelve una suerte de alegoría de la escritura de Alcoba. La historia avanza en frases precisas, pero no procura hallar al monstruo oculto en la oscuridad de la tragedia; por el contrario, bordea las sombras y se abre camino hasta dar con el claro, abierto y lleno de luz, en el que es posible respirar de nuevo.
A través del bosque
Laura Alcoba
Alfaguara
187 páginas
$ 6299