Tarot: una por una, estas son las 78 cartas

Un repaso detallado por todos los tipos de cartas que tiene esta técnica adivinatoria y la importancia de cada una de ellas a la hora de desarrollarse en la disciplina

14 de octubre de 202212:08

LA NACION

Una por una, un repaso por todas las cartas del TarotPixabay

El tarot es una técnica adivinatoria utilizada por las personas para tomar decisiones, recibir una guía o predecir acontecimientos. Es utilizado desde hace siglos y posee diferentes formatos. Requiere la interpretación del tarotista, quien luego del estudio de sus cartas, podrá guiarse en ellas para comunicar un mensaje al consultante. La observación, atención al detalle y la intuición, son herramientas que pueden contribuir con esta práctica.

Un mazo de tarot completo está compuesto por 78 cartas. A continuación, el significado de cada una de ellas y cómo influyen en una lectura.

Los arcanos mayores

Están compuestos por 22 cartas, utilizadas en todas las tiradas del tarot. Muchas lecturas sólo incluyen a los arcanos mayores, para obtener una respuesta rápida y efectiva. Su significado puede variar, dependiendo si aparece de forma normal o invertida.

Su aparición al momento de barajar es importante, ya que simbolizan un aspecto de la vida en particular, representados por las siguientes figuras:

El Mago (I): al ser la primera carta del tarot, representa los orígenes. Simboliza la capacidad de crear, la imaginación, inteligencia, creatividad y confianza en sí mismo.
La Sacerdotisa (II): comprende la intuición y los misterios del mundo. Puede representar la introspección, lo que no se ve y la inactividad.
La Emperatriz (III): es vista como la carta de la belleza y la abundancia. Asimismo, su aparición puede comprender la fertilidad o nuevos inicios.
El Emperador (IV): representa el liderazgo, los bienes materiales y el poder. Está relacionado con el posicionamiento social y la estabilidad financiera.
El Papa (V): es vista como la carta de la sabiduría, relacionado con lo escondido y el razonamiento.
El Enamorado (VI): simboliza las relaciones, el amor y las decisiones. Es una carta que señala emociones fuertes.
El Carro (VII): establece la lucha, la perseverancia y los viajes. Es la señal del esfuerzo y los triunfos.
La Justicia (VIII): es la mayor expresión de equidad en el tarot. Establece el karma y la reflexión sobre las consecuencias de las acciones.
El Ermitaño (IX): demuestra la soledad e introspección. Es el pensamiento, como también el miedo.
La Rueda de la Fortuna (X): es el símbolo de los cambios y el destino. Lo que debe ser, lo inevitable y las nuevas oportunidades en la vida.
La Fuerza (XI): son las capacidades y herramientas que una persona cuenta para lograr lo que desea o solucionar problemas.
El Colgado (XII): es el desinterés y la independencia, muchas veces visto como egocentrismo.

La Muerte (XIII): también denominado Arcano sin nombre, sugiere los finales, los procesos, transiciones y los cambios. Está relacionado con la transmutación y capacidad de reinventarse.
La Templanza (XIV): establece el control y la determinación a la hora de accionar. Puede representar el poder y la fuerza en ciertas situaciones.
El Diablo (XV): establece la revelación y la experimentación, la búsqueda de diferenciarse y el gran potencial.
La Torre (XVI): presenta un nuevo punto de vista, la contemplación desde lo alto. Señala libertad y capacidad de ver absolutamente todo lo que sucede.
La Estrella (XVII): señala el espíritu de juventud, la suerte y las emociones. Está relacionada con la espiritualidad y la fe, la confianza y la esperanza.
La Luna (XVIII): es una carta que brinda reflexión, señala inseguridades y dudas. Asimismo, puede traer al presente asuntos del pasado.
El Sol (XIX): comprende el éxito y el optimismo, el renacer desde la alegría. Es vista como una carta de mucha energía y con gran potencial.
El Juicio (XX): simboliza las cuentas pendientes y la necesidad de reflexionar sobre el pasado para poder avanzar.
El Mundo (XXI): establece el mundo terrenal y las acciones concretas. Invita a dejar de lado la imaginación y llevar a cabo acciones en la vida real.
El Loco (XXII): es una carta aventurera, que marca nuevos inicios. Representa la espontaneidad, el juego, la libertad e imaginación.

Los arcanos menores

Este grupo se encuentra conformado por 56 cartas, divididas en cuatro palos. Si bien muchas tiradas de tarot no los incluyen, conocer su significado es clave para poder crear lecturas más precisas y completas.

Una por una, estas son las cartas del TarotPixabay

Cada palo comprende un significado en particular:

Oro: es el mundo material y económico.
Copas: son las emociones y los sentimientos.
Bastos: la fuerza, la confianza y la autoafirmación.
Espada: refiere a los pensamientos y la capacidad de comunicarse.

En el tarot, cada uno de los palos comprende una serie de números, que poseen las siguientes interpretaciones:

As: comprende los inicios, cambios y nuevas oportunidades.
Dos: significa el balance, la comunicación, negociación y la relación entre dos polos.
Tres: representa a la imaginación, la fertilidad, la intuición y la alegría.
Cuatro: establece la funcionalidad, el mundo material y la estabilidad.
Cinco: está relacionado con la familia y las raíces, el sentido de colectividad y vivir en sociedad.
Seis: simboliza al trabajo, el esfuerzo y la vocación, junto con la fuerza de voluntad y decisión.
Siete: relacionada con la conciencia, independencia y rebeldía.

Ocho: marca el orden, las responsabilidades y la justicia.
Nueve: muestra los ideales, la sabiduría y valores de una persona.
Sota: es el niño interior y la inmadurez.
Caballero: simboliza la lucha y la fuerza.
Reina: establece la sensibilidad, la protección, las emociones y la introspección.
Rey: representa la madurez, la voluntad, la necesidad de tomar decisiones y accionar.

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