¿Qué significa el símbolo de Aries?
En la rueda zodiacal, este signo esta representado por el carnero, el cual le confiere su carácter fuerte a las personas que se rigen por él
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Durante el 21 de marzo y el 19 de abril se da la temporada Aries, que es la que da inicio a la rueda zodiacal. El hecho de ser el primero en la lista, además de pertenecer al elemento Fuego, le brinda a este signo algunas de sus cualidades típicas, como su iniciativa, liderazgo, extroversión y egoísmo.
Las personas de Aries suelen tener un carácter fuerte que logra llamar la atención de todos. Para muchos, son modelos a seguir gracias a su forma de enfrentar los problemas y su valentía a la hora de probar nuevas cosas.
Está regido por Marte, el planeta de la acción, y esto le atribuye su entusiasmo y su poder de innovación. Tal es así que suelen ser personas muy activas que no pueden tolerar la rutina y necesitan desafiarse constantemente a sí mismos para superarse en cualquier disciplina.
Como todo signo zodiacal, se encuentra representado por un símbolo en particular. A continuación, el significado del carnero, su historia y cómo define a las personas de Aries.
El carnero en la Astrología
El carnero es un mamífero ovino que se caracteriza por los cuernos que tiene en la cabeza, los cuales tienen una forma circular descendiente que gira sobre sí misma hacia el rostro de este animal. Esta característica hace referencia a la personalidad de las personas de Aries, quienes se priorizan a sí mismos y, por momentos, pueden ser un tanto egoístas.
Asimismo, simboliza el nacimiento y los orígenes. Como primer signo del Zodíaco, Aries es quien toma la iniciativa y abre los caminos. Esto se debe tanto a sus cuernos, los cuales crecen a medida que se hacen mayores, como al tipo de vida que lleva: el carnero debe caminar un largo recorrido hasta llegar a encontrar su identidad.
Es así, que este animal marca la fuerza de voluntad de los nacidos bajo este signo de Fuego, su individualidad e independencia a la hora de lograr lo que desean.
Aries y la mitología griega
La historia sobre la constelación de Aries, que luego dio origen a su signo, proviene de Atamante, rey de Coronea. Junto a su primera esposa, Néfele, tuvo un hijo llamado Frixo y una hija, Hele. Al separarse, volvió a formar una relación con Ino, con quien se casó y tuvo a Learco y Melicertes. Sin embargo, su segunda esposa estaba extremadamente celosa de su vínculo anterior y sus primogénitos.
Ino decidió, entonces, crear un plan para destruir a los hijos de su esposo: arruinar la cosecha de maíz. Por eso mismo, Atamante debió enviar un mensajero al Oráculo de Delfos para conseguir respuestas de los dioses, quienes le pidieron que sacrifiquen a Frixo. Al tomar conocimiento de esta solicitud, Néfele tuvo que buscar un guardián para proteger a sus hijos y optó por un carnero que viajaba por los cielos con los niños para escapar del peligro.
Sin embargo, Hele muere accidentalmente al caer al agua en el Estrecho de los Dardanelos. A pesar de esta tragedia, Frixo y el carnero llegaron a las costas del Mar Negro, donde Frixo se casó con Calcíope, hija del Rey Aetes.
En agradecimiento por su labor, el príncipe lo sacrifica en honor a Zeus y regala su lana dorada al monarca, quien la puso al resguardo de un dragón. Al contemplar esto, el Dios del Olimpo decidió inmortalizar al animal y lo ubicó entre las estrellas de la constelación de Aries.
Los orígenes de Aries en la Mesopotamia
De acuerdo a los registros, este signo astrológico data del 500 a. C., en el período del imperio caldeo, en la Antigua Babilonia. Sin embargo, fue en el 2200 a. C. cuando se descubrió el Punto Vernal, que luego se denominó como el Punto Aries. Este refiere al lugar elíptico exacto donde el Sol pasa del hemisferio sur al hemisferio norte, y da entonces lugar al equinoccio de marzo, conocido por ser el hecho que marca la llegada del otoño en nuestro país. Es por ello que, cuando se da este suceso, comienza la temporada Aries.
Para ese entonces, el Zodíaco se encontraba conformado por 8 signos. Al descubrir el Punto Vernal, se añadió a esta lista Aries, Cáncer, Libra y Capricornio, que pertenecen al grupo de signos cardinales y completan los doce lugares de la rueda zodiacal.
Aries en el Antiguo Egipto
Otra de las teorías que asocian a este signo zodiacal con el carnero pertenece al año 50 a.C. en Egipto. El Zodíaco de Dendera es una obra en relieve esculpido, que se realizó en el techo de una cámara en honor a Osiris y está ubicada en el templo de Hathor de Dendera.
Este diagrama circular contiene una gema de jaspe verde oscuro en la cual se encuentra grabada la palabra braxas junto a la figura de un carnero saltando hacia la izquierda, cuya cabeza se orienta hacia la derecha con una estrella de ocho puntas.
El símbolo moderno de Aries
Actualmente, como sucede con todos los signos del Zodíaco, Aries cuenta con otro elemento que lo representa. Este es una figura minimalista y no literal, la cual intenta señalar algunas de las cualidades principales del carnero a partir de la combinación de líneas o figuras geométricas.
Su creación se dio para identificar fácilmente a este signo de Fuego, especialmente en horóscopos o situaciones donde no se pueda ilustrar su figura tradicional con detalle.
De esta manera, Aries es ilustrado con dos líneas que se unen formando un tipo de “v”, cuyos vértices son curvos y descienden levemente. Esta imagen hace alusión a la cabeza del carnero, especialmente sus cuernos, los cuales están orientados hacia sí mismos, cualidad que caracteriza a los arianos.