¿Volvió ISIS? Qué se sabe del grupo jihadista y cuál es su conexión con el ataque de Nueva Orleans
El agresor que embistió a una multitud durante los festejos de Año Nuevo llevaba una bandera de Estado Islámico, que pese a que perdió territorio sigue inspirando atentados
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WASHINGTON.- Un exmilitar de 42 años de Texas identificado como Shamsud-Din Jabbar embistió con su camioneta a una multitud que celebraba Año Nuevo en la mítica calle Bourbon de Nueva Orleans el miércoles por la madrugada y mató a por lo menos 15 personas. El FBI informó que recuperó una bandera negra del grupo extremista Estado Islámico (EI, también conocido como ISIS por sus siglas en inglés) de la camioneta que usó para la masacre y se enfoca en averiguar cuáles eran los vínculos del conductor y el grupo extremista.
Se espera que la investigación examine, en parte, cualquier apoyo o inspiración que Jabbar pudo haber recibido de ese violento grupo con base en Medio Oriente, o de cualquiera de al menos 19 grupos afiliados en todo el mundo.
El presidente Joe Biden dijo el miércoles por la noche que el FBI le había informado que “unas horas antes del ataque, [Jabbar] publicó videos en redes sociales indicando que estaba inspirado” por el grupo Estado Islámico.
Expulsado de su autoproclamado califato en Siria e Irak por una coalición liderada por militares de Estados Unidos hace más de cinco años, el grupo Estado Islámico se ha centrado más en apoderarse de territorios en Medio Oriente que en realizar ataques masivos al estilo de Al-Qaeda en Occidente.
Pero en su territorio natal, el grupo Estado Islámico ha aprovechado cualquier oportunidad para decapitar a estadounidenses y otros extranjeros que caen en su alcance. Y ha tenido éxito, aunque disminuido en los últimos años, en inspirar a personas de todo el mundo atraídas por su ideología para llevar a cabo atroces ataques contra civiles inocentes.
¿Qué es el grupo Estado Islámico?
El grupo Estado Islámico también es conocido como EI y ISIS, o el Estado Islámico en Irak y Siria.
Es un grupo sunita extremista que tiene sus orígenes en Al-Qaeda en Irak, que casi empujó al país a una guerra civil antes de ser derrotado por las milicias locales y las tropas estadounidenses. En 2013, los combatientes del grupo cambiaron su nombre a Estado Islámico. Bajo el liderazgo de Abu Bakr al-Baghdadi, explotaron la inestabilidad de la guerra civil de Siria para apoderarse de territorio. En 2014, el grupo tomó Mosul, la segunda ciudad más grande de Irak, y se declaró un califato, un estado gobernado por principios islámicos a lo largo de un extenso territorio de Siria e Irak.
Dentro del territorio bajo su control, mató y abusó de miembros de otras religiones y se dirigió a los musulmanes sunitas que se desviaban de su estricta interpretación del Islam. También orquestó e inspiró una serie de ataques terroristas en toda Europa.
Para 2019, una intervención militar liderada por Estados Unidos había expulsado al grupo Estado Islámico del último centímetro de su territorio.
En octubre de ese año, el presidente Donald Trump anunció el asesinato de Al-Baghdadi y dijo en un discurso que era “el fundador y líder de ISIS, la organización terrorista más despiadada y violenta del mundo”. “Aniquilamos su califato al 100 por ciento en marzo de este año”, agregó entonces.
Actualmente, el grupo central Estado Islámico es una organización dispersa y muy debilitada que trabaja para recuperar fuerza de combate y territorio en Siria e Irak. Hoy, los expertos dicen que el grupo es el más débil que ha estado nunca en Irak, pero muestra signos de resurgimiento en Siria. ISIS ha difundiendo propagando su ideología radical a través de células clandestinas y filiales regionales en todo el mundo.
El derrocamiento del régimen de Al-Assad en Siria el mes pasado dio paso a los temores de que el grupo pueda recuperar un punto de apoyo en la región. En julio, el Pentágono advirtió que los ataques del Estado Islámico en Irak y Siria estaban en camino de alcanzar el doble de los del año pasado. La caída del régimen también provocó un conflicto entre las fuerzas kurdas apoyadas por Estados Unidos y los rebeldes apoyados por Turquía, lo que ha suscitado preocupaciones de que el ISIS pueda explotar nuevamente la inestabilidad.
¿Y esa bandera de ISIS?
El símbolo característico del grupo es una austera bandera negra con letras árabes blancas que expresan un principio central de la fe islámica. Innumerables musulmanes en todo el mundo ven la violencia coercitiva del grupo como una perversión de su religión.
“Al llevar una bandera de ISIS con él durante el ataque, el sospechoso quería demostrar que era un verdadero creyente, alineado con la causa de ISIS, y tal vez con la esperanza de provocar que otros siguieran su ejemplo”, dijo Colin Clarke, analista de contraterrorismo en el Grupo Soufan, una firma de consultoría de seguridad con sede en Nueva York.
¿Cuál es la influencia del grupo Estado Islámico hoy?
Algunos expertos argumentan que el grupo Estado Islámico es poderoso hoy en parte como una marca, inspirando tanto a grupos combatientes como a individuos en ataques en los que el grupo en sí puede no tener un papel real. El credo despiadado del grupo Estado Islámico y sus éxitos militares han ayudado a impulsar grupos afiliados en África, Asia y Europa. Es una alianza muy descentralizada.
Aunque ya no controlan grandes franjas de territorio, Estado Islámico y sus afiliados han llevado a cabo una serie de ataques mortales durante el último año.
En enero de 2024, la filial afgana del grupo, conocida como Estado Islámico-Khorasan o ISIS-K, llevó a cabo dos atentados con bombas en Irán durante una procesión en memoria de Qassim Soleimani, un alto general iraní que murió en un ataque con aviones no tripulados estadounidenses cuatro años antes. Más de 80 personas murieron y decenas resultaron heridas.
Unos meses después, los funcionarios estadounidenses culparon a ISIS-K de un ataque mortal en una sala de conciertos cerca de Moscú que mató al menos a 137 personas.
En julio, ISIS se atribuyó la responsabilidad de un tiroteo en Omán que mató a seis personas e hirió a unas 30 más cerca de una mezquita. Los ataques en Irán y Omán apuntaban específicamente a los musulmanes chiítas, a quienes ISIS, vinculado a los sunitas, considera apóstatas.
ISIS-K, la filial afgana del grupo terrorista, fue el responsable de los principales ataques terroristas a gran escala del grupo. También está luchando contra el gobierno talibán de Afganistán, al que ISIS-K considera insuficientemente estricto. Un funcionario estadounidense dijo en marzo de 2024 que los talibanes habían logrado algunos avances contra ISIS-K, pero que tenían dificultades para prevenir ataques y desmantelar células urbanas.
Los funcionarios estadounidenses también han estado monitoreando el crecimiento del grupo en la políticamente inestable región africana del Sahel. En marzo de 2024, Estado Islámico se atribuyó un ataque al ejército de Níger que, según se informa, mató a 30 soldados.
Se estima que el 60 por ciento de la propaganda del Estado Islámico proviene del África subsahariana, en particular de grupos afiliados en Nigeria, la República Democrática del Congo y Mozambique, dijo un funcionario estadounidense en marzo.
¿Cuál es el historial del grupo para inspirar ataques en Estados Unidos?
Los funcionarios antiterroristas dividen los ataques de Estado Islámico en tres amplias categorías:
Dirigidos: Se sabe que al menos cinco ataques exitosos en la década de 2010 fueron dirigidos directamente por Estado Islámico, llevados a cabo por agentes que se entrenaron con el grupo en Irak y Siria. Estos casos se encuentran entre los más letales, incluidos los ataques coordinados en París en noviembre de 2015, que mataron a 130 personas, y los atentados con bombas en el aeropuerto y el metro de Bruselas en marzo de 2016, que se cobraron 32 vidas. Sin embargo, estos siguen siendo la minoría.
Habilitados: Los ataques son concebidos y dirigidos por agentes del Estado Islámico cuya única conexión con el atacante es a través de Internet. En París, en 2015, Amedy Coulibaly estaba en contacto con agentes de ISIS en Siria antes de asaltar un supermercado kosher, tomar rehenes y matar a cuatro de ellos. Y en Texas, en 2015, dos hombres que inicialmente se creyó que eran “lobos solitarios” abrieron fuego en un centro comunitario. El FBI dijo más tarde que los atacantes estaban en comunicación con el Estado Islámico a través de mensajes de texto cifrados.
Inspirados: Son los ataques de los llamados “lobos solitarios”, que se radicalizan a través de la propaganda online y llevan a cabo ataques por su cuenta.
En 2016, en Niza, Francia, más de 80 personas murieron y cientos resultaron heridas cuando un hombre condujo un camión de 19 toneladas a través de una multitud que miraba los fuegos artificiales del Día de la Bastilla. ISIS se atribuyó la responsabilidad, aunque los investigadores dijeron que el conductor se había radicalizado, sin pruebas que lo vincularan directamente con el grupo terrorista. En Londres, en 2017, un británico de 52 años atropelló a peatones con un vehículo utilitario deportivo alquilado en el puente de Westminster, matando a dos e hiriendo al menos a 40. Un día después, ISIS lo describió como un discípulo y un héroe por el asalto llevado a cabo a la sombra del Big Ben, pero no surgió ninguna prueba de un vínculo directo.
La masacre de Nueva Orleans refleja el ataque inspirado por el grupo Estado Islámico más mortífero en suelo estadounidense en varios años.
Otros ataques en la última década incluyen una matanza en 2014 en San Bernardino, California, que dejó 14 muertos, y una masacre en 2016 en un club nocturno gay en Orlando, Florida, por un hombre armado que mató a 49 personas, juró su lealtad en una llamada al 911 a Al-Baghdadi y condenó los “caminos sucios de Occidente”.
Esos ataques coincidieron con la llegada de miles de occidentales, algunos de ellos estadounidenses, que viajaron a Siria con la esperanza de unirse al llamado califato.
Tras esos asesinatos, la amenaza de seguidores radicalizados del grupo parecía haber disminuido en Estados Unidos. Los ataques del Departamento de Defensa han eliminado a otros miembros del grupo Estado Islámico y el FBI ha tenido un éxito significativo en interrumpir complots antes de que se materialicen.
Pero durante el último año, funcionarios del FBI advirtieron sobre una amenaza significativamente elevada de terrorismo internacional tras la masacre de Hamas en Israel en octubre de 2023 y los subsiguientes ataques israelíes en Gaza.
El grupo de inteligencia SITE informó de que partidarios de ISIS celebraron el miércoles en grupos de chat en línea. “Si es un hermano, es una leyenda. Allahu Akbar”, o “Dios es grande”, reportó que uno de ellos dijo en el chat.
Agencia AP y The New York Times
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