Tuvo escatológicas actitudes en un vuelo de Ryanair y evitó la cárcel, pero su vida tuvo un giro inesperado
La joven tenía 20 años cuando empezó a cometer una serie de delitos; en un principio resultó inofensiva para las autoridades, pero sus actitudes la llevaron más lejos
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Keisha Harty se convirtió en un referente de que la vida está repleta de sucesos repentinos. Su historia comenzó el día que evitó la cárcel durante un vuelo. Viajaba con la aerolínea Ryanair desde el aeropuerto John Lennon de Liverpool tras haber tomado algunas copas. En ese momento, los asistentes de vuelo no vislumbraban los destrozos que se avecinaban, ni que aquella mujer en estado de ebriedad causaría un caos dentro del avión. Años más tarde, se convirtió en una reincidente.
En 2017, Harty se enteró de que su abuelo estaba a punto de morir, así que lo único en lo que pensó fue en tomar una botella entera de vodka. Aún con los efectos del alcohol, decidió viajar para ver al familiar por última vez. Sin embargo, durante el vuelo causó algunos disturbios. Primero le gritó a la tripulación de cabina y cayó sobre otros pasajeros porque no podía mantenerse en pie.
La joven de en ese entonces 20 años fue arrestada una vez que el avión aterrizó. En cuanto vio a los policías, se arrancó violentamente sus extensiones de cabello en señal de desesperación. También orinó en la patrulla de los oficiales, por lo que la ingresaron a la corte de inmediato. Más tarde la liberaron, pero las autoridades le dijeron que solo lo habían hecho porque el incidente había comenzado cuando el avión ya estaba en el aire, según información de Liverpool ECHO.
En aquella ocasión, el altercado no pasó a mayores, ya que la justicia tuvo compasión de ella porque no ocurrió nada más allá de las agresiones verbales. No obstante, todo estaba a punto de cambiar.
El giro en la vida de Keisha Harty
Nuevos reportes indican que Keisha, de ahora 26 años, enfrenta un nuevo juicio por haber agredido a una mujer con una copa de vino y después huir hacia Irlanda. Esto ocurrió en 2019, cuando Harty y su amigo Tracey Morgan acudieron a la casa de su vecina Anna Rudolf. Pretendían pasar la noche de Año Nuevo juntos, en compañía también de otras personas identificadas como Nicola Hilton y Robert Murray.
Parecía ser una fiesta casual de amigos, pero de un momento a otro Harty comenzó a pelear con Hilton. Le gritó, la insultó y luego volcó la mesa para tomarla del cabello y agredirla a golpes. De acuerdo con los reportes, los otros asistentes las separaron, pero Keisha tomó una copa de vino que se había roto durante la pelea y “se abalanzó hacia ella”. Le causó una herida en el rostro que requirió un injerto de piel y 21 puntos de sutura.
Según informó Liverpool ECHO, la joven huyó después de su acto vandálico y evadió los dos juicios que tenía en su contra. Ya en Irlanda se involucró en otros actos ilegales que la pusieron nuevamente en prisión. Robó una tienda en abril de 2022 y fue así que las autoridades de Reino Unido lograron localizarla para obligarla a cumplir sus sentencias anteriores.
En octubre de este año, Harty fue extraditada a Inglaterra para aplicarle todo el peso de la ley. Hoy enfrenta una pena de cinco años y medio de prisión y debe cumplir al menos dos tercios del tiempo para ser elegible a la libertad bajo fianza.
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