Tiene 30 años y gana 27.800 dólares al mes, por dos horas al día: esta es su fórmula del éxito
Domonique Brown, una diseñadora gráfica de California, convirtió su amor por el arte en un emprendimiento que le genera más ingresos que su empleo a tiempo completo
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LA NACION
En un mundo donde la búsqueda del trabajo ideal se convierte en una odisea para muchos, hay quienes logran dar con la fórmula perfecta. Este es el caso de Domonique Brown, una artista que consiguió lo que para muchos parece imposible: generar ingresos sustanciales con un trabajo secundario y vocacional al que le dedica solo dos horas por día.
Brown, oriunda de California, siempre tuvo una conexión especial con el arte. Desde sus primeros años, el dibujo y la pintura fueron más que simples pasatiempos. Eran una forma de expresión y una ventana a un mundo de posibilidades. Sin embargo, como sucede con tantos otros, el camino de la vida la llevó por senderos más convencionales.
Actualmente, Brown se desempeña como diseñadora gráfica a tiempo completo, en las que dedica nueve horas diarias de cinco días semanales a su trabajo principal. Esta posición le proporciona una base sólida, con un salario anual de US$90.000. Según Ziprecruiter, el salario promedio de un diseñador gráfico en California es de US$26,91 por hora, con variaciones significativas dependiendo de la experiencia, la ubicación y las habilidades específicas.
El nacimiento de DomoINK
En abril de 2020, en medio de la incertidumbre global, Brown decidió lanzar DomoINK, un negocio de arte centrado en la representación de la comunidad afroamericana. Lo que comenzó como un proyecto modesto en la mesa de su cocina, pronto se convirtió en un fenómeno.
En una entrevista con CNBC, bajo la iniciativa de “Make It Six-Figure Side Hustle”, que cuenta historias de personas con trabajos secundarios lucrativos, la mujer explicó que utiliza tanto técnicas tradicionales como digitales. De esta manera, creó una línea de productos que iba desde tarjetas de felicitación hasta decoración para el hogar, todos en celebración de la belleza y la diversidad de la cultura afroamericana.
El éxito no tardó en llegar. En cuestión de meses, sus ventas publicadas en Etsy le permitieron cubrir la hipoteca de su nueva casa. Pero esto era solo el comienzo. La verdadera explosión llegó cuando grandes marcas como Target, Walmart, Airbnb y Disney se interesaron en su trabajo. La colaboración con Target, en particular, marcó un hito importante que llevó sus diseños a tiendas en todo EE.UU.
De acuerdo con CNBC, en el último año, DomoINK generó ingresos brutos de US$333.600, lo que se traduce en un impresionante promedio mensual de US$27.800. Lo más sorprendente es que Brown logra mantener este “imperio” con apenas dos horas diarias a la gestión de relaciones con clientes, creación de contenido y desarrollo de nuevos diseños.
El secreto para trabajar poco y ganar mucho
Brown atribuye gran parte de su triunfo a una combinación de factores. En primer lugar, destaca la importancia de la educación y la experiencia técnica acumulada a lo largo de los años. Sin embargo, más allá de las habilidades técnicas, la mujer de 30 años enfatizó la importancia de la confianza en uno mismo y la perseverancia. “Mucho tiene que ver con creer en uno mismo y no escuchar a quienes dicen que no puedes”, afirmó al medio citado.
La versatilidad también ha sido clave en su éxito. Brown comenzó con retratos, pero rápidamente aprendió a diseñar patrones para adaptarse a las demandas del mercado de textiles y decoración del hogar. Esta capacidad de evolucionar y mantenerse al día con las tendencias ha sido crucial para mantener la relevancia de su marca.
La familia, su inspiración
Su inspiración no solo proviene de su talento innato, sino también de su entorno familiar. Creció viendo a sus padres combinar trabajos regulares con proyectos artísticos adicionales, y su abuela, una talentosa costurera, le mostró que la edad no es barrera para la creatividad y el emprendimiento. “Mi abuela era costurera y, a sus 80 años, todavía diseñaba y creaba vestidos de novia sin patrones”, agregó.
No obstante, el camino al éxito no ha estado exento de desafíos. En los inicios de DomoINK, la artista se encontró con un trabajo cansado, debido a que aceptaba cada proyecto que se le presentaba por temor a que la oportunidad fuera efímera. Esta sobrecarga eventualmente afectó la calidad de su trabajo y su bienestar personal.
Al aprender sobre esta experiencia, Brown ha desarrollado estrategias para mantener un equilibrio saludable entre su trabajo principal, su negocio secundario y su vida personal. “Mi marca se trata de representación, por lo que siempre intento diseñar para la próxima persona o con una estrategia de marketing. Pero de vez en cuando, simplemente creo algo que sé que es solo para mí, que expresa cómo me siento en el momento, independientemente de cómo se venda”, indicó al medio citado.
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