Nuevo revés para Joe Biden: lo que pasará con las boyas flotantes del río Grande en Eagle Pass, Texas

Los desacuerdos entre la Administración Biden y el gobierno de Texas continúan. Ahora el tema que favorece al gobernador Greg Abbott es el de las boyas flotantes que se instalaron en Río Grande, en la frontera de México con Estados Unidos. La barrera, que desde el principio ha causado controversia entre los grupos defensores de derechos civiles, fue colocada en julio de 2023 para disuadir a los migrantes de intentar cruzar. En medio de la disputa, un juez determinó que se queda, al menos por ahora.

En un comunicado del fiscal general de Texas, Ken Paxton, se defiende que se “implementó el sistema de boyas para reducir la cantidad de extranjeros no autorizados que intentan ingresar a EE.UU. por un cruce de río peligroso e ilegal, en lugar de por un puerto de entrada designado”. En el mismo documento, se dio a conocer que el estado logró una nueva audiencia para defender la permanencia de la barrera.

Las boyas fronterizas de Texas se quedan

En diciembre de 2023, un panel del Tribunal de Apelaciones del Quinto Circuito emitió una decisión dividida acerca de la orden de un juez de distrito que exigía que Texas trasladara las boyas al lado estadounidense de la orilla del río. Entonces, Paxton presentó inmediatamente un pedido para que se volviera a escuchar el caso ante el tribunal en pleno y se permitiera que la barrera flotante permaneciera en su lugar.

Este miércoles, el Quinto Circuito concedió esa audiencia. The Associated Press explica que el tribunal anuló el fallo del panel por 2-1, después de que una mayoría de sus 17 jueces activos votaran a favor de volver a escuchar el caso. Por lo tanto, la orden de mover las boyas seguirá suspendida, lo que significa que se quedan, al menos por ahora y hasta que exista una nueva determinación. El argumento ante el pleno está programado para mayo de 2024.

La barrera, que está unida y anclada en concreto, se instaló en julio a lo largo de la frontera internacional con México, entre la ciudad fronteriza de Eagle Pass, en Texas, y Piedras Negras, en el estado de Coahuila. Desde ese momento, el Departamento de Justicia de EE.UU. pidió a un tribunal federal que ordenará al gobierno estatal a retirarlas, bajo el argumento de que la barrera planteaba preocupaciones humanitarias y ambientales, indicó AP en ese mismo mes.

La barrera flotante, una disputa entre Biden y Abbott

Las enormes boyas de color naranja son un punto de disputas legales sobre el control fronterizo entre el presidente Joe Biden y el gobernador Greg Abbott. En septiembre, el juez de distrito David Ezra no ordenó a Texas que desmantelara las boyas, pero las calificó de amenaza a la seguridad. Sin embargo, su orden judicial preliminar sí pidió al estado sacar la barrera del agua y colocarla en la orilla del río antes del 15 de septiembre.

Al día siguiente, un tribunal federal de apelaciones permitió que la barrera flotante de Texas permaneciera en su lugar “por el momento”. Para diciembre se dio a conocer la decisión del Tribunal de Apelaciones del Quinto Circuito de Estados Unidos, que exigió que Texas detuviera cualquier trabajo en la barrera de aproximadamente 300 metros y la trasladará a la orilla del río. Ahora, la medida sigue en disputa y las boyas seguirán en su sitio.

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