Planificaba un campamento con Google Maps y de casualidad encontró una rara estructura que desconcierta a la ciencia

Lo que comenzó como una simple búsqueda de una dirección en Google Maps se convirtió en un hallazgo sin precedentes para Joël Lapointe, un residente de Quebec, Canadá. Mientras planeaba un viaje de campamento, este hombre notó una estructura circular inusual en el mapa que, sin saberlo, lo llevaría a descubrir lo que podría ser un cráter de impacto causado por un meteorito.

Lapointe exploraba la región de Côte-Nord en Quebec cuando, por casualidad, encontró un área de aproximadamente 15 kilómetros de diámetro cerca del Lago Marsal, que llamó su atención debido a su forma perfectamente redonda. Intrigado por esta anomalía geográfica, decidió investigar más a fondo.

Al observar la topografía y notar una serie de pequeñas montañas que rodeaban el lago, el hombre sintió que podía estar frente a algo fuera de lo común. Por este motivo, decidió contactar a expertos para obtener más información, lo que lo llevó a conectarse con el geofísico francés Pierre Rochette, quien quedó igual de sorprendido por lo que le presentó.

Posible cráter de impacto de meteorito

Rochette, quien trabaja en el Centro de Investigación en Geociencias de Aix-en-Provence, Francia, confirmó que la formación observada era “muy sugerente de un impacto”, informó CBC. El científico comenzó a investigar junto con su equipo la posibilidad de que el lugar fuera el resultado de un antiguo destino de meteorito.

En este sentido, ya recolectaron muestras de la zona y, aunque el análisis inicial es prometedor, todavía no hay conclusiones definitivas. De acuerdo al medio mencionado, las piezas obtenidas contienen minerales como circón, que pueden transformarse bajo el efecto de un impacto. Estos resultados iniciales sugieren que el sitio podría haberse formado por un hecho que ocurrió hace millones de años.

¿Qué es un cráter de impacto?

Los cráteres de impacto se forman cuando un meteorito choca contra la superficie de la Tierra a gran velocidad, y genera ondas que pueden derretir y recristalizar rocas, según la NASA. Este tipo de formaciones no solo cuentan una historia sobre el pasado del planeta, sino que también pueden proporcionar información valiosa sobre los objetos que viajaron a través del sistema solar y llegaron hasta la Tierra.

Tara Hayden, investigadora en la Universidad de Western en Canadá, explicó a CBC que los meteoritos pueden provenir de antiguos planetas o de materiales primitivos del sistema solar, lo que hace que los cráteres de impacto sean un vínculo entre la Tierra y el espacio exterior.

Canadá, hogar de cráteres históricos

Canadá ya alberga 31 cráteres de impacto confirmados, lo que lo convierte en uno de los países con más formaciones de este tipo. Esto se debe a la antigüedad de sus rocas, especialmente en regiones como Quebec, donde se encuentra el hallazgo de Lapointe. Gordon Osinski, profesor de Ciencias de la Tierra en la Universidad de Western, destacó que el descubrimiento es lo suficientemente intrigante como para justificar una futura expedición.

Aunque aún no se ha confirmado que se trate de un cráter de impacto, los científicos están dispuestos a invertir tiempo y recursos en investigar el área. El equipo de investigadores espera obtener financiamiento para organizar una expedición al sitio en 2025. Este tipo de investigaciones no se realizan con frecuencia, lo que aumenta la emoción entre la comunidad científica por la posibilidad de un nuevo cráter en la ciudad canadiense.

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