Pago 300 dólares por ponerse pestañas postizas y se hizo viral por lo que dejó de propina

Una mujer acudió a ponerse pestañas postizas en un local de Los Ángeles, California, e hizo algo sin precedentes: dejó una propina muy generosa que sorprendió a la “lashista”. Todo comenzó porque una joven, quien se dedica a crear contenido para TikTok sobre su trabajo como estilista de pestañas y uñas, compartió un video de su más reciente labor. En esa grabación, aparecía una de sus clientas con el servicio ya terminado y, al finalizar, mostraba el precio que había pagado por él.

Kimmkosmetics fue la tiktoker que compartió el video con la descripción: “Lo que hice en un día lento como técnica de pestañas. ¿Pagarías tanto?”. En el clip, aparecen varias mujeres que posaron para la cámara para mostrar sus pestañas recién restauradas. La emprendedora aprovechó para mencionar qué tipo de técnica había aplicado y cuánto costaba cada una de ellas.

Fue ahí donde apareció la mujer que dejó la generosa propina. En las imágenes, se ve a la joven posar para la cámara con las frondosas extensiones de pestañas que le acababan de poner: Kim detalló que ese set costaba 300 dólares y que la clienta decidió dejar una propina de 150. Es decir, que en total pagó 450 dólares por el servicio.

Y es que para muchas personas las pestañas de Kim son icónicas, ya que cubren totalmente el párpado y son de un tamaño muy llamativo. Quizá esa fue la razón por la que la mujer quedó extremadamente satisfecha, al grado de dejar la mitad del precio del set como propina. Además, son múltiples tiktokeras las que se dijeron dispuestas a pagar el mismo precio por un servicio igual.

Eso no les gustó a muchos, ya que las extensiones no fueron de su agrado: “Se puede decir por la mirada en sus ojos que esto es tan doloroso y pesado”, dijo una usuaria. Además, señalaron a Kim de hacer un mal trabajo y de maltratar los ojos de su clienta, dado que en el video que publicó se veía que la mujer los tenía
rojos. Reprocharon también el precio de este procedimiento de belleza, con comentarios como: “Probablemente puedas conseguirlas más baratas en una tienda de Halloween”.

Como era de esperarse, esta publicación causó un debate entre las personas, tanto por el precio como por cómo lucían en el rostro de quienes las utilizaban. Por un lado, estaban quienes defendían a la emprendedora por salir adelante con su negocio y elogiaban las aplicaciones que hacía: “No porque ustedes no lo pagarían quiere decir que otros tampoco”. Pero, por otro, estaban quienes criticaban tanto el estilo de las pestañas como el servicio que Kim daba: “El dinero no compra la clase”, escribió en ese sentido una persona.

Ante los miles de comentarios, Kimmkosmetics decidió romper el silencio y defender totalmente su trabajo. Lanzó un comentario para responder a las críticas, sobre todo las que decían que las extensiones estaban feas: “Todos los que siguen comentando sobre las pestañas diciendo que son demasiado pesadas y se ven feas, no las usan. Entonces, ¿por qué les importa comentar?”, cuestionó una mujer.

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