Pagan casi US$30.000 por este centavo de dólar de 1983 que tenía un peculiar error
Una inusual moneda alcanzó una cifra récord en una reciente puja debido a un raro defecto de transición en su producción
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¿Qué tiene de especial un centavo de dólar de 1983 que pueda hacerlo valer casi US$30.000? Una extraña moneda de Lincoln de ese año, producida en un molde de bronce, se vendió recientemente por esa impresionante suma. El Servicio de Calificación Profesional de Monedas (PCGS) la certificó como MS-65 Red y Great Collections la subastó el 28 de julio. Allí alcanzó los US$29250 tras 49 ofertas.
La moneda en cuestión es un “error de transición” producida en un planchet de bronce sobrante de 1982 o antes. Según la descripción de GreatCollections, se trata del mejor ejemplar conocido, una afirmación que los expertos en numismática consideran acertada.
Tal como explica Numismatic news, los centavos de Lincoln fabricados entre 1963 y mediados de 1982 se componen de una aleación sólida de latón, con un 95% de cobre y un 5% de zinc. Aunque técnicamente incorrecto, los coleccionistas suelen referirse a estos centavos como de bronce. “Tanto los planchets de bronce como los de latón pesan 3,11 gramos”, detalla este medio especializado.
Desde mediados de 1982, los centavos de Lincoln se producen en planchets con núcleo de zinc recubiertos de cobre, pesando 2,5 gramos. El centavo de 1983 debería haber seguido esta composición, pero, de alguna manera, se produjo en un planchet de bronce de 3,11 gramos, un error conocido como de transición.
Los centavos de la fortuna
Este ejemplar subastado se suma a la lista de centavos de bronce de 1983 descubiertos, varios de los cuales se documentaron en publicaciones especializadas como Numismatic News. La primera moneda de este tipo la identificó Billy Crawford y se añadió a la segunda edición del libro “Strike It Rich With Pocket Change” en 2009.
Entre otros descubrimientos recientes se incluyen un centavo de 1982-D de fecha pequeña y centavos de 1983-D producidos en planchets de bronce, que también alcanzaron altos valores en subastas. El de 1982-D se vendió por US$18800, mientras que el de 1983-D alcanzó los US$17625 en Stack’s Bowers.
La identificación de estos errores de transición fue por la disponibilidad de balanzas de precisión a precios accesibles. Los coleccionistas y aficionados se animan a pesar sus centavos de 1983, ya que aquellos que pesen 3,1 gramos podrían ser un hallazgo valioso. Lo mismo aplica para los centavos de 1982-D de fecha pequeña y los de 1983-D, así como las pruebas de San Francisco de ambos años.
Además, los centavos del Bicentenario de Lincoln de 2009, acuñados tanto en planchets de zinc recubiertos de cobre como en bronce sólido, son otra área donde podrían encontrarse errores de transición. Los coleccionistas deben revisar cuidadosamente estos centavos, ya que podrían haber sido producidos incorrectamente en moldes del metal equivocado.
La subasta de este centavo de 1983 en planchet de bronce demuestra lo importante que es revisar minuciosamente las monedas de colección, ya que los errores de transición no son tan raros como podría pensarse. Donde hay un error, usualmente hay más, y los coleccionistas dedicados tienen la oportunidad de encontrar estas joyas ocultas en su propia colección.
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