Nueva York tiene una nueva ley que protege a los propietarios de viviendas: en qué consiste

El estado de Nueva York ha dado un paso significativo en la protección de sus ciudadanos contra el robo de escrituras con la implementación de una nueva ley promovida por la Fiscal General Letitia James. Esta legislación, que fue promulgada por la gobernadora Kathy Hochul y entró en vigor el pasado jueves 18 de julio, ofrece herramientas adicionales para combatir esta problemática que afecta desproporcionadamente a ciertos grupos de propietarios de viviendas.

El robo de escrituras ocurre cuando una persona utiliza el fraude o la falsificación para apropiarse indebidamente del título de propiedad de otra persona, sin el conocimiento o consentimiento del propietario legítimo. Este delito ha sido particularmente difícil de abordar debido a su naturaleza compleja y el tiempo que a menudo pasa antes de que las víctimas se den cuenta de que han sido estafadas.

Las claves de la nueva ley de Nueva York para propietarios

• Detención de desalojos: la nueva ley permite a los propietarios de viviendas permanecer en sus hogares y detener los procedimientos de desalojo cuando hay evidencia razonable de que ha ocurrido un robo de escrituras. Esto brinda a las víctimas una oportunidad crucial para mantener su residencia mientras se investiga el caso.
• Herramientas para los fiscales: la legislación faculta a los fiscales para presentar “banderas rojas” legales sobre propiedades donde se sospecha que ha ocurrido un robo de escrituras. Esto significa que se pueden tomar medidas preventivas para proteger a los propietarios antes de que se produzcan más daños.
• Tratamiento penal del robo de escrituras: una de las innovaciones más significativas de la ley es la reclasificación del robo de escrituras como un delito de hurto. Anteriormente, estos casos se manejaban en tribunales civiles, lo que limitaba las opciones de las víctimas para buscar justicia. Ahora, al tratarse como un delito penal, las autoridades pueden perseguir a los culpables con mayor rigor.

• Estatuto de limitaciones extendido: la ley modifica el estatuto de limitaciones para procesar los crímenes de robo de escrituras. Las acciones legales deben iniciarse dentro de los cinco años posteriores al robo o dentro de los dos años posteriores a que el propietario descubra que su escritura ha sido robada.
• Jurisdicción criminal para la Oficina del Fiscal General: La nueva ley otorga a la Oficina del Fiscal General la jurisdicción criminal para procesar delitos de robo de escrituras sin necesidad de una remisión, lo que fortalece la capacidad del estado para actuar rápidamente contra estos delitos.

La reacciones por la puesta en marcha de esta normativa

La Fiscal General Letitia James, junto con el senador estatal Zellnor Myrie y el asambleísta Landon Dais, quienes jugaron un papel crucial en la promulgación de esta ley, han destacado la importancia de estas nuevas herramientas para proteger a los propietarios de viviendas en Nueva York. En un artículo de opinión publicada en amNewYork, enfatizaron que la ley representa un cambio significativo. “Demasiados de nuestros vecinos han sido víctimas del robo de escrituras, es decir, les robaron sus hogares. Pero a partir de hoy, finalmente tenemos más herramientas para combatir este crimen”, remarcaron.

Aunque la nueva ley es un paso importante, los senadores que la impulsaron subrayan que no es una solución completa al problema del robo de escrituras. En tal sentido, destacan la importancia de educar a las comunidades sobre los riesgos asociados con este tipo de fraude y de empoderar a los propietarios con las herramientas necesarias para proteger sus hogares.

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