La sorpresiva visita de la ballena más grande del mundo a la costa de Massachusetts: “Es algo inédito”

Los pobladores del Cabo Ann, Massachusetts, pudieron disfrutar de un avistamiento excepcional. Por primera vez en dos décadas pudo observarse en el estado una ballena azul, el animal más grande del planeta. El lunes pasado, su aparición se pudo seguir desde el barco de Cape Ann Whale Watch, lo que permitió tener una magnitud de su tamaño: la longitud del ejemplar era casi similar a la extensión de 35 metros de la embarcación.

El avistamiento fue informado por la compañía en una publicación de Facebook. Otro avistamiento de una ballena azul se había reportado la semana pasada, aunque en ese caso por otro barco, y no se sabe si se trata del mismo ejemplar.

Christina McMahon-Foley, directora educativa y naturalista principal de Cape Ann Whale Watch, sugirió que el aumento del krill en la zona podría haber atraído a la ballena a las aguas de Massachusetts. El krill, un pequeño crustáceo, es la principal fuente de alimento de las ballenas azules, informa la Administración Nacional Oceánica y Atmosférica.

Las razones de la visita de la ballena azul a Massachusetts

“Creo que en este momento el krill está encontrando su puesta a punto aquí”, declaró la directiva. Aunque McMahon-Foley no estaba a bordo del barco cuando se produjo el avistamiento, indicó que las imágenes de la ballena no parecían coincidir con el ejemplar que habían encontrado anteriormente.

La semana pasada, McMahon-Foley y su equipo estuvieron media hora observando una ballena que se sumergía durante cuatro minutos en cada baño.

El avistamiento inusual provocó una reflejo entusiasta en McMahon-Foley. “Para alguien como yo, que lleva 30 años trabajando en este campo, es una experiencia única que no puedo hacer que otras personas comprendan”, expresó. “Estoy allí todos los días, de abril a octubre, y las ballenas azules no suelen visitar estas aguas. Ver al animal más grande que jamás haya existido en nuestro planeta fue como un regalo”, manifestó y agregó: “Fue simplemente espectacular”.

Según McMahon-Foley, los observadores de ballenas locales coinciden en que el último avistamiento de una ballena azul en la zona ocurrió hace más de dos décadas. En ese momento, la naturalista solo había visto una pequeña parte del lomo de la ballena.

En este caso, lo describió como “increíble” el poder observar una porción mucho mayor del cuerpo de la ballena. Si bien una cosa es entender el tamaño del animal en teoría, otra muy distinta es verlo en persona, agregó.

“Es complicado para mí ayudar al público en general a comprender lo impresionante que es la ballena”, dijo. “Tiene el tamaño de 30 elefantes, ¿cómo no puede impresionar a alguien?”, finalizó en una entrevista con Mass Live.

El avistamiento de esta semana no solo es un acontecimiento significativo para los entusiastas de la vida marina, sino que también destaca la importancia de la conservación y el monitoreo de las especies marinas. Las ballenas azules, aunque son las criaturas más grandes del planeta, siguen siendo vulnerables y su presencia en nuevas áreas podría indicar cambios en el ecosistema marino.

Para los naturalistas y amantes de la naturaleza, este avistamiento de la ballena azul es un recordatorio del valor de preservar los océanos y sus habitantes.

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