La trágica historia detrás del segundo nombre de Kendall Jenner: un asesinato y el dolor más grande de su mamá

La vida de las Kardashian ha estado rodeada de escándalos y es común que las revelaciones sobre su pasado cobren protagonismo en los medios de comunicación, pero esta vez la historia que explica la elección del segundo nombre de Kendall Jenner por parte de su madre, Kris Jenner, es más sensible que las otras. La supermodelo contó por qué su segundo nombre es Nicole y destapó una etapa complicada para la familia, cuando una amiga muy cercana fue asesinada en circunstancias poco claras.

“Mi segundo nombre es Nicole Brown Simpson porque era la mejor amiga de mi madre. Y me siento honrada de tener este nombre”, explicó en la cuenta de Snapchat de su hermana Kylie hace algunos años, pero es una historia que siempre ha causado curiosidad porque incluso su madre lo recuerda como un periodo triste y complicado de su vida por la batalla legal que sucedió en paralelo al duelo.

Kendall se refiere a Nicole Brown, la exesposa del jugador de fútbol americano O. J. Simpson, quien se convirtió en la mejor amiga de Kris Jenner por el vínculo entre su entonces esposo Robert Kardashian y el exdeportista, conocidos en la universidad y amigos y socios más adelante. Las familias eran tan cercanas que los hijos de Kris y Robert lo llamaban “tío O.J.”.

En 1994, una noticia acaparó los titulares de la prensa, cuando el asesinato de Nicole Simpson y Ronald Goldman se convirtió en uno de los casos criminales más mediáticos de la historia. Ambos fueron hallados con diversas heridas por arma punzocortante entre charcos de sangre afuera de la casa que ella habitaba y las evidencias recopiladas por la policía apuntaron a O.J. Simpson como probable responsable, sumado a las denuncias de violencia doméstica durante siete años de matrimonio, y fue juzgado por dos cargos de asesinato.

El caso, hoy conocido como “el juicio del siglo, dividió a la familia Kardashian, aunque Kris y Robert ya llevaban varios años separados, de acuerdo con declaraciones que Kim Kardashian hizo a la revista Quién: “Mi familia siempre fue muy unida, excepto cuando mi padre representaba a O.J., y mi mamá era la mejor amiga de Nicole. Un día, mi papá nos llevó a mí y a Kourtney al juicio; mi mamá estaba sentada con la familia de Nicole, nos miró como diciendo: ‘¿Qué están haciendo aquí, chicas? ¿Y por qué están sentadas de ese lado?’. Fue la primera vez que mi familia se dividió”.

Tras un juicio que se extendió durante 11 meses y con Rob Kardashian en el banquillo del exfutbolista, Simpson fue absuelto en 1995 por un jurado de Los Ángeles y, dos años más tarde, declarado culpable en una demanda civil. Dicha resolución lo obligó a pagar 33,5 millones de dólares por daños a la familia de Ron Goldman, el hombre de 26 años, quien se desempeñaba como mesero, y que en la noche del asesinato visitó a Nicole Brown para devolver unos lentes que había olvidado en el restaurante en el que trabajaba.

Kris Jenner ha hablado sobre estos hechos en pocas ocasiones y siempre para reiterar el dolor por la pérdida repentina de Nicole Brown: “Ella era un alma tan hermosa y tenía mucho amor para dar”. Además de lamentar cómo vivió todo el proceso, al decir: “Me aferré al lado legal de las cosas en lugar de lidiar con el lado emocional porque simplemente extrañaba a mi amiga”.

Apenas un mes después de la absolución de O.J. Simpson, nació Kendall, de la relación entre Kris y Caitlyn Jenner, y su madre decidió llamarla Nicole para honrar la vida de su amiga, aunque la modelo no llegó a conocerla.

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