Es venezolano, organiza shows en Miami y revela por qué Florida es más caro que otros estados: “Tiene un costo significativo”

Días atrás, Miami fue el gran escenario del deporte continental. La ciudad preferida de los latinoamericanos fue una de las sedes anfitrionas de la Copa América de fútbol. Los fanáticos, argentinos y colombianos principalmente, colmaron sus calles y quedaron maravillados con la espectacularidad de sus estadios.

El Hard Rock Stadium es el más emblemático de la ciudad, con una capacidad para más de 65.000 espectadores. Es la sede de los Miami Dolphins de la NFL y de los Miami Hurricanes en el fútbol americano universitario. Además, albergó el Super Bowl en varias oportunidades. Sin embargo, no es el único estadio que ostenta Miami.

El LoanDepot Park, el Kaseya Center, el DRV PNK Stadium -frecuentado últimamente por muchas celebridades para ver a Lionel Messi- y el FIU Stadium también forman parte de la oferta. Todos gozan de una estética arquitectónica privilegiada y tienen algo en común: además de albergar espectáculos deportivos, son sede de muchos shows musicales.

Cuánto paga un artista para hacer un show en Miami

Organizar un concierto en Miami no es una tarea fácil ni barata, dice Alejandro Zingales, en diálogo con LA NACIÓN. El venezolano produce eventos musicales y trabajó con artistas como Alexis y Fido, Rusherking, Jowell y Randy, Pedro Arroyo, David Pabón, El Gran Combo de Puerto Rico, Tony Vega, Pupy Santiago y Willie González.

El especialista explica que, entre los aspectos más costosos detrás de un recital, se incluyen el alquiler del lugar, la seguridad, la producción técnica y el marketing. “El alquiler del lugar puede variar desde US$10.000 para lugares pequeños hasta más de US$100.000 para estadios grandes. La seguridad puede costar entre US$5000 y US$50.000 y la producción técnica, que incluye sonido, iluminación y efectos especiales, puede sumar entre US$20.000 y US$150.000″, detalla.

“Además, el marketing y la promoción del evento pueden superar los US$30.000, especialmente para artistas de renombre. En total, organizar un show para 40.000 personas puede costar entre US$500.000 y US$1.000.000, dependiendo de la escala y los requisitos específicos del evento”, continúa Zingales.

El backstage de la organización

Más allá de los costos y la inversión que hacen los artistas que llegan a Miami, la organización que requiere también es un desafío. Mucho más cuando se trata de artistas internacionales. “Las productoras de eventos se encargan de gestionar toda la logística relacionada con la producción. Todas las áreas relacionadas con la técnica del show -sonido, luces, tarima, efectos especiales- se subcontratan”, explica Zingales. “Luego está todo lo que es la logística de los artistas: pasajes aéreos, viáticos, comidas, hoteles, traslados, búsquedas en aeropuertos, organización de un tour por la ciudad en los días libres, entre otros aspectos claves”, enumera el experto.

Otros dos pilares son la gestión de las entradas y los músicos. “Se trabaja con las ticketeras para la venta de los boletos, tanto online como presencial”, introduce Zingales, “y también se maneja toda la parte de los músicos”. Por ejemplo, si se requieren orquestas musicales, se subcontratan. Paralelamente, “se organizan los ensayos”, completa.

El compliance (políticas y procedimientos necesarios para garantizar que la organización desarrolle sus actividades y negocios conforme a la normativa vigente y a las políticas y procedimientos internos) detrás del evento también es importante. “Esto tiene que ver con toda la gestión legal y burocrática: impuestos, permisos de la policía y bomberos, seguridad; todo lo que se requiere bajo los términos de la ley para garantizar un evento seguro y libre de riesgos. Vinculado a esto, también está todo lo que es la seguridad del evento”, subraya.

El productor también reflexionó sobre la seguridad en los eventos, especialmente después de lo ocurrido en la final de la Copa América. “Lo que pasó con la seguridad fue un claro recordatorio de la importancia de la planificación y la ejecución adecuada en eventos de gran escala. Es crucial que todas las partes involucradas colaboren para asegurar la integridad de la gente”, comentó.

La rentabilidad de los shows

Zingales revela que una entrada promedio a un show en Miami puede costar entre US$50 y US$200, según el artista y la ubicación del asiento. Aunque estos precios pueden parecer elevados, apenas cubren los enormes costos de producción y logística.

“El valor de una entrada se define por varios factores: la popularidad del artista, los costos de producción, la capacidad del lugar y la demanda del público. Se hace un análisis exhaustivo para equilibrar la accesibilidad para los fans con la necesidad de cubrir los costos y asegurar un margen de beneficio para los organizadores”, explica el productor.

Según Zingales, organizar un show en Miami tiende a ser más caro que en muchas otras ciudades o estados por los altos costos de alquiler de lugares y servicios, así como la intensa competencia por atraer a grandes nombres y audiencias. “Sin embargo, la ciudad ofrece ventajas como una gran infraestructura y un público diverso y entusiasta”, agrega.

Al ser consultado sobre cómo se justifica el valor de las entradas de un show, fue claro: “Le diría a la gente que, detrás de cada concierto, hay un enorme esfuerzo y una gran inversión de recursos para crear una experiencia inolvidable. Cada aspecto del evento tiene un costo significativo: la contratación del lugar, la producción técnica, la seguridad y la promoción del evento”.

“La gente no debe quejarse del precio de una entrada, ya que no es solo para cubrir estos costos, sino también para asegurar que los artistas y todos los profesionales involucrados puedan seguir produciendo eventos de alta calidad”, asegura.

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