Es extranjero, entró de manera ilegal a EE.UU. para refugiarse, pero un delito de su pasado salió a la luz
Un joven tenía un historial criminal en El Salvador, por lo que las autoridades activaron el procedimiento para regresarlo a su país de origen; el proceso duró poco más de un mes
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Un hombre de 30 años entró ilegalmente a Santa Teresa, Nuevo México, para refugiarse en Estados Unidos. Ahí, los agentes de la Patrulla Fronteriza de ese país lo encontraron y detuvieron. Al día siguiente, recibió dos noticias que acabarían su ruta de migrante: un aviso y una orden de eliminación acelerada porque descubrieron un importante detalle en sus antecedentes.
Harson Bladimir Molina-Linares ingresó sin permiso el 25 de octubre del año pasado y cruzó por esta vía donde, al igual que otras ciudades fronterizas, se reporta un alto flujo de migrantes, sobre todo en la Autopista 9 de Nuevo México, según han dado a conocer los agentes en otros reportes.
En el caso del joven, originario de El Salvador, los oficiales comprobaron sus antecedentes y descubrieron que era buscado en su país de origen por un caso de extorsión agravada. Por lo tanto, le dieron una orden final de expulsión y lo trasladaron en avión en un vuelo chárter el pasado 15 de diciembre.
Desde la detención, su proceso duró varios días en EE.UU. y culminó con el fin de su ruta migratoria. Tras el arresto por parte de los agentes de la Patrulla Fronteriza, quedó bajo la custodia del Servicio de Inmigración y Control de Aduanas de Estados Unidos (ICE, por sus siglas en inglés) el 15 de noviembre y estuvo detenido en el Centro de Procesamiento del Condado de Otero, hasta su expulsión en diciembre. Por lo general, las estancias en este centro son cortas y se proporciona sustento a los detenidos hasta que continúe su procedimiento de traslado o remoción.
Finalmente, los oficiales estadounidenses entregaron la custodia de Molina Linares a las autoridades locales en el Aeropuerto Internacional Óscar Arnulfo Romero en San Salvador.
“La cooperación de la oficina de Operación de Deportación (ERO) de El Paso con las autoridades extranjeras ha demostrado ser beneficiosa una y otra vez, no solo para asegurar que las personas peligrosas que intentan esquivar la justicia sean eliminadas de nuestro país, sino también para hacer las comunidades más seguras”, manifestó sobre este caso la directora de la oficina de campo de ERO, Mary De Anda-Ybarra, que además lanzó un mensaje contundente: “Estados Unidos no es un refugio seguro para fugitivos internacionales que buscan evitar la ley en su país de origen”.
Santa Teresa, un lugar en medio del desierto que es el elegido por muchos para el cruce ilegal a EE.UU.
Este no es el único caso reciente que las autoridades han dado a conocer. A fines de enero, los agentes de la patrulla fronteriza encontraron a 24 migrantes en dos vehículos. Las personas estaban hacinadas dentro de cajas en el interior de las camionetas. En ese caso, también tomaron las medidas pertinentes para procesarlos para su expulsión bajo el Título 8. En tanto, que los contrabandistas fueron arrestados y enfrentan cargos.
ERO es la principal autoridad federal de aplicación de la ley de inmigración nacional, a través del arresto y expulsión de extranjeros que amenacen la seguridad y leyes de EE.UU. En ese sentido, se encargan de la gestión de personas detenidas y la repatriación de los que recibieron órdenes de expulsión, como en el caso de Molina Linares.
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