Cortes de luz y caos por la nieve: la “pesadilla espantosa” tras las tormentas en California, Texas y Louisiana
Algunas familias permanecen atrapadas mientras la nieve alcanza grandes alturas; el sábado habrá nuevas afectaciones
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Este viernes 3 de marzo, el sistema de tormentas que llevó granizo y tornados al sur de Estados Unidos todavía es una amenaza mientras avanza hacia el noreste. Hay advertencias de lluvias torrenciales, más tornados y fuertes nevadas para el sábado. Mientras tanto, aproximadamente 120.000 personas se quedaron sin electricidad en Texas. En tanto que otras permanecen atrapadas en sus casas en los diferentes condados de California.
El jueves, en Texas, Louisiana y Alabama las tormentas dañaron las viviendas y provocaron interrupciones en los vuelos. Se registraron seis tornados en total, cinco en Texas y uno en Louisiana. De acuerdo con los reportes de CNN, decenas de casas se vieron afectadas en la ciudad de Shreveport. Asimismo, en Texas y Oklahoma se registraron 18 casos de granizo, con piedras del tamaño aproximado de una pelota de golf.
En el condado de Collin, Texas, los vientos fueron lo suficientemente fuertes como para derribar cuatro semirremolques de 18 ruedas. También causaron el cierre de la autopista.
En California quedaron sepultados debajo de la nieve
El norte de California espera una ronda de nieve más a partir del sábado. Algunas comunidades todavía no se recuperan, dado que se bloquearon las carreteras, mientras que hubo personas que quedaron atrapadas en sus casas y se registraron daños en los negocios.
La portavoz de la oficina del sheriff del condado de Placer, Angela Musallam, confirmó que una mujer de 80 años, identificada como Lois Barton, murió en un incidente relacionado con el tiempo. Al respecto, el miércoles por la noche el gobernador de California, Gavin Newsom, emitió una declaración de emergencia en 13 condados, que incluían el de San Bernardino, donde se tuvieron que ejecutar maniobras de rescate. Allí hubo incendios estructurales, aparentemente relacionados con la tormenta.
En la comunidad de San Bernardino de Crestline, los residentes fueron inmovilizados por la intensa nevada. La única forma de desplazarse ahora es palear por las salidas de emergencia. Se estima que podrían pasar una o dos semanas hasta que se despeje el área por completo.
A este punto llegaron los helicópteros de la Guardia de California en busca de una zona para establecer los suministros. Los residentes podrían enfrentarse a la escasez de alimentos, comunicó la BBC.
En declaraciones para CBS News, Mariam Magana y su familia aseguraron que llevaban casi una semana atrapados en su Airbnb de Crestline, donde sus raciones de comida cada vez son menores. “Nuestras vacaciones de tres días se volvieron una pesadilla espantosa”, compartió Magana. Sus autos están enterrados bajo dos metros de nieve y, aunque han pedido ayuda, todavía no ha llegado.
Los meteorólogos advirtieron de un tiempo más severo en el sur de las Llanuras y en zonas de Arkansas y Mississippi. Asimismo, el popular Parque Nacional de Yosemite fue cerrado indefinidamente tras las nevadas récord de la semana pasada.
El Servicio Meteorológico Nacional (NWS) pronostica que el sábado volverán las lluvias y las fuertes nevadas de montaña al norte de California. “También es posible que se produzcan inundaciones repentinas desde el norte de Texas y el este de Oklahoma hasta Arkansas y el valle medio del Mississippi”, señaló el NWS en su última previsión.
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