Araba el campo, golpeó una piedra para sacarla del camino y halló un artefacto de la Segunda Guerra Mundial

Un agricultor de la región de Trenčín, al oeste de Eslovaquia, araba el campo como todos los días, cuando un objeto se interpuso en su camino. Al tratar de quitarlo, descubrió que no era lo que creía. Enseguida, los especialistas llegaron con su detector de metales para tratar de descifrar la historia detrás de este hallazgo y para encontrar otros tesoros escondidos.

En octubre de este año, un agricultor local cavó para sacar la supuesta piedra y comenzó a surgir una estructura circular de hormigón, indicó la Oficina de Monumentos Eslovaca en un comunicado reciente. En realidad, se trataba de una especie de nido o escondite de ametralladora alemán, que pertenecía a la Segunda Guerra Mundial.

Según compartieron las autoridades, el objeto ya estaba muy dañado cuando lo encontraron. Al parecer, la parte superior fue retirada porque estorbaba al arar y el resto permaneció por debajo del nivel del suelo, y quedó en el olvido por mucho tiempo, hasta ahora. Ante la posibilidad de que hubiera más tesoros por esta zona, los especialistas acudieron al llamado con sus detectores de metales para saber si encontraban más vestigios históricos debajo de la tierra.

Sin embargo, pese a la expectativa, los resultados fueron negativos, lo que quiere decir que esta especie de escondite de ametralladora no se utilizó activamente en la defensa contra el avance de los ejércitos soviéticos y rumanos. Finalmente, trasladaron la estructura al Museo de la región, sin precisar más detalles sobre cuál será su destino.

Qué era realmente la piedra que encontró el granjero

Los artefactos de este tipo se conocen con los nombres Kugelstand y Kugelbunker, según describe la Oficina de Monumentos Eslovaca. Se trata de una bola o esfera, que tiene una entrada saliente en forma de cilindro o embudo. La institución señala que también se fabricaron en ese país a finales de 1944, poco antes del final de la guerra, fundiendo hormigón en moldes reutilizables de madera en los que se insertaba un refuerzo de varillas de hierro. Aunque tenían diferentes variantes, su función principal era la de ser refugios y puntos de tiro para la infantería, más a menudo para las ametralladoras.

Objetos de la Segunda Guerra Mundial en los parques de Eslovaquia

Lo curioso en esta región es que este tipo de objetos podrían estar en otras partes. Estiman que un millar de Kugelstand fueron desplegados en Eslovaquia, por lo que son el objeto de tiro alemán más numeroso en ese país. La mayoría estaban en Bratislava. Luego de la guerra, gran parte fueron destruidos, pero algunos permanecieron en sus lugares y fueron utilizados secundariamente como maceteros, así como estructuras en los parques infantiles.

La Oficina insta a quienes logren distinguir un objeto de guerra durante cualquier actividad los contacten lo antes posible. Todos estos están protegidos por la Ley de Monumentos, como parte del patrimonio arqueológico. Además, debido a la ubicación de Eslovaquia, también señalan que si se encuentran ítems bélicos en su emplazamiento original, existe el riesgo de que haya explosivos sin detonar en sus proximidades.

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