Vuelve la primera obra teatral escrita por Alfonsina Storni
El amo del mundo está dirigida por Francisco Lumerman y protagonizada por Paula Ransenberg y Lautaro Delgado Tymruk; fue aggiornada, ya que se estrenó en 1927
- 9 minutos de lectura'
Si se repasa con cuidado la lista de dramaturgos argentinos del siglo XX es difícil encontrar un nombre femenino. Sí, los hay, por supuesto, pero son contados: una especie de isla en medio de un mar de nombres varoniles. Recién en la década del 90, con el surgimiento del nuevo teatro que vendría luego de la última y oscura dictadura cívico militar aparecerán nombres de mujeres con tanta o más asiduidad. El viernes, en el teatro Regio, perteneciente al Complejo Teatral de Buenos Aires, se estrenará El amo del mundo, de Francisco Lumerman, basada en la obra homónima de Alfonsina Storni, una de las pocas piezas teatrales que escribió la adelantada a su tiempo, poetisa, escritora, maestra y figura fundamental del siglo XX.
El amo del mundo debía estrenarse en junio del año pasado, los ensayos comenzarían en abril pero todo, claro, quedó suspendido. Cuando este año los protocolos lo permitieron, el elenco y el director se encontraron nuevamente para ensayar todos los días de la semana durante los últimos dos meses para tener lista esta obra que se podrá ver desde este viernes 22 hasta el 19 de diciembre. ¿Azares del destino? El estreno será el mismo día pero 83 años después que Alfonsina Storni con todo el esfuerzo físico imaginable, estirase el brazo y pusiese en el buzón su poema de despedida “Voy a dormir”, que mandó al diario LA NACION para que sea publicado con la última fuerza que le queda.
“Voy a dormir, nodriza mía, acuéstame.
Ponme una lámpara a la cabecera,
una constelación, la que te guste,
todas son buenas; bájala un poquito.”
Esto decía parte de su última poesía con la que se despedía del mundo. Tres días después, el 25 de octubre de 1938, sus restos aparecerían en las costas marplatenses.
“Me convocó Eva Halac, curadora del Teatro Regio, y empezamos a charlar sobre materiales posibles para llevar a escena –rememora el director, dramaturgo, actor y docente Francisco Lumerman–. En una de esas charlas, Eva me mencionó esta obra que yo no conocía y ya me llamó la atención. Leí el texto y me pasó algo muy concreto: no podía creer que esta mujer hubiera escrito esta obra hace cien años si hay debates que están ahí que aún hoy no están saldados. Por otro lado, me inquietó no conocer la obra. Si soy curioso, inquieto, lector, estudiante de dramaturgia en la EMAD, ¿cómo podía ser que no hubiera llegado de alguna manera a mis manos?”.
Esta obra, la única pieza teatral que Alfonsina Storni estrenó, subió a escena en el Teatro Nacional Cervantes el 20 de marzo de 1927, con la presencia del Presidente Marcelo Torcuato de Alvear y su esposa Regina Pacini. Su estreno que había despertado mucho interés y entusiasmo entre el público seguidor de la poetisa y la crítica, no fue bien recibida y a los tres días bajó de cartel. “La crítica defenestró a la obra y a ella como autora. Algo de eso me convocó enseguida. Pero a la vez no me parecía ser la persona indicada para dirigir la obra tal cual estaba escrita. Sentía que la tenía que intervenir para poder acercarla y mostrar dónde resuena hoy ese texto. A través de mi intervención quería rescatar esos momentos que todavía hoy siguen latiendo”, repasa Lumerman que tenía esta obra escrita y lista para empezar a ensayar cuando la pandemia congeló todo. El elenco integrado por Paula Ransenberg, Lautaro Delgado Tymruk, Fiamma Carranza Macchi, Rosario Varela, Adriana Ferrer, David Subí y Franco Quercia quedó atento a las nuevas noticias.
Lo que se propuso Lumerman fue crear una especie de cajitas que se van abriendo para mostrar el material de Storni, una excelente muestra del teatro en el teatro. “La obra que escribí trata sobre una compañía teatral de la que forman parte Gabriel (Lautaro Delgado), es el director, y Mara (Paula Ransenberg), es actriz. Ambos, además son marido y mujer y esta noche estrenarán una versión de El amo del mundo, de Alfonsina Storni. La pareja será la protagonista de la obra en la cual también tienen una relación amorosa. Se encuentran en el ensayo general, montando la obra, en las afueras de la ciudad de Córdoba. A medida que avanza la obra se van conociendo tanto escenas de la pieza de Storni como facetas del vínculo de ellos dos y del resto de la compañía. En determinado momento, las dos situaciones empiezan a tener mucho en común y se pierde, se esfuma un poco, el límite entre la ficción y la realidad y esto empieza a interferir en la resolución de la obra de Storni”, cuenta Lumerman que además tiene en cartel El río en mí, una pieza de su autoría que se puede los domingos, a las 17, en su propia sala Moscú Teatro, con Malena Figó, Claudio Da Passano, Elena Petraglia y Mercedes Docampo.
El amo del mundo, de Alfonsina Storni es una pieza de 1927 que trata de la historia de Márgara y Claudio, que están comprometidos. Ella es una mujer de clase alta; y para la época ambos son grandes para ser aún solteros. El conflicto central de la pieza de Alfonsina Storni se desata cuando Márgara necesita confesar algo para poder casarse con Claudio. Será prudente no avanzar más en la historia, no adelantar más de la trama. Sólo se puede agregar que lo que ella quiere confesar a los ojos de 2021 ya no significa lo mismo que para su época. Todavía faltaban unos cuantos años para el voto femenino, más de 40 años para que pueda siquiera pensar en tener una cuenta bancaria a su nombre, una mujer soltera era, para aquellos años, definitivamente un error. Para quienes conocen bien la biografía de la poeta, los parecidos entre Márgara y Alfonsina estallarán de inmediato.
Sus protagonistas
“Parece que lo único que nos quedó de Alfonsina es su final. A partir de la convocatoria de Francisco empecé a leer muchísimo sobre ella, de su biografía, un libro que se llama Libro quemado”, cuenta Paula Ransenberg que encarna a Márgara, a Mara e incluso algunos sentirán que por momentos a la propia Alfonsina. “Este libro recopila sus columnas escritas entre 1919 y 1921 y publicadas en diarios y revistas como Mundo Argentino, La Nota, Caras y Caretas, y LA NACION. Escribía sus artículos bajo un seudónimo masculino, Tao Lao, y son increíbles, de una terrible lucidez. Temas variados con humor que son conmovedores. Sabiendo que ella tenía un hijo siendo madre soltera, tan adelantada”, explica Ransenberg. “En este trabajo que hizo Francisco sumando a estos personajes del presente y mostrando el vínculo entre ellos dos, él siendo director y ella siendo actriz, se actualizan temas que ya estaba trabajando Storni; se potencian”, suma la actriz que también forma parte del elenco de Otoño invierno, la pieza del sueco Lars Norén, que dirige Daniel Veronese en Timbre 4.
Curiosamente, la primera versión de esta obra, Storni la tituló Dos mujeres. Y la actriz que hizo de Márgara en aquel fatídico estreno fue la que le propuso el cambio de nombre y Storni accedió. Elocuente historia que habla ya por sí sola de los estragos que hizo el patriarcado en ella. De pensar una historia de emancipación femenina, que dialoga fuertemente con la Nora del Ibsen de Casa de muñecas a entregar el título al hombre hay un salto inmenso. “Los temas que trabaja Alfonsina son de una actualidad muy fuerte, son temas que se siguen debatiendo, incluso –repasa Lautaro Delgado Tymruk–. De todos modos, esta pieza fue escrita cuando se consideraba un escándalo que una mujer fuese madre soltera o que una pareja se separase. Esta obra fue concebida cuando se pensaba que la mujer tenía el cerebro más chico que el hombre. Toda la actualización que hace Francisco la revitaliza, la extrema, la potencia. La lucha feminista, el patriarcado, son temas actuales que hay que seguir trabajando y operando simbólicamente sobre ellos porque todavía falta mucho”, agrega Delgado cuenta Delgado que este año a pesar de contraer Covid y estar una larga temporada sintiéndose mal, trabajó muchísimo televisivamente porque formó parte del elenco de Días de gallo, El Tigre Verón y filmó Tierra incógnita, para Disney que se verá el próximo año, se trata de una serie para el público adolescente con tintes de terror y misterio. “Yo hice esta obra, El amo del mundo, cuando tenía diez años, hice del niño Carlitos, el protegido de la protagonista. Después de las funciones, con la plata que me daban del bordereaux invitaba a mis padres a comer una pizza”.
De eso se trata la búsqueda de Lumerman que pisó este teatro emblemático como parte del elenco de El adulador, de Goldoni, hace unos años. “Me sirvió mucho tener la temperatura de esta sala para hacer una obra popular, accesible. Parte de mi trabajo fue acercar a Alfonsina para quienes no la leyeron o no conocen su obra”, repasa Lumerman. Pero hay más en su búsqueda. “Lo que tenía claro es que quería escapar del acuerdo biempensante en el cual hacer la obra de Alfonsina podía ser un gesto reivindicatorio y al final terminase reproduciendo al patriarcado. Sentía que si no la intervenía, no la ponía a dialogar con el presente todos íbamos a estar de acuerdo, sí, en qué buena poeta era y nos íbamos a ir a casa contentos. Mi desafío era atravesar el material con las tensiones actuales porque no están resueltas”, repasa Lumerman. Y los tres están de acuerdo: una de las grandezas de este nuevo material es plantear preguntas, polémicas. “Hay una microfísica del poder que se ve en la obra. El poder microscópico, chiquito, que está presente en el gesto, en el tono. Definitivamente no somos libres. La cultura opera sobre el comportamiento, siempre”, concluye Delgado.
Para agendar:
El amo del mundo, de jueves a domingos, a las 20 en el Teatro Regio, Córdoba 6056.
Otras noticias de Teatro
- 1
Shakira reveló el sorprendente rol que desempeñó Chris Martin tras su separación de Gerard Piqué: “Él estuvo ahí”
- 2
El mal momento que lo tocó vivir a China Suárez a pocos días de Navidad
- 3
Claudia Villafañe: su mejor rol, por qué no volvería a participar de un reality y el llamado que le hizo Diego Maradona horas antes de morir
- 4
John Goodman, el actor de Los Picapiedra, luce irreconocible tras su gran cambio físico