Una mano, 7 dedos y una vida
La prestigiosa compañía canadiense estrena hoy La vie, en el Polo Circo
Tres años atrás, para la apertura de una de las ediciones del Festival Polo Circo, los canadienses de Los 7 Dedos de la Mano presentaron Loft , un fantástico trabajo en los que mezclaban, con una enorme personalidad, distintos lenguajes artísticos. El año pasado, volvieron con Psy , trabajo que presentaron en una de las carpas de Polo Circo y que tuvo una función especial en un escenario montado en el Obelisco.
Y a ese dicho de que no hay dos sin tres se lo tomaron a pecho. Por eso, hoy, en una de las carpas de Combate de los Pozos y Garay, y casi como yapa de la cuarta edición del Festival Polo Circo que concluyó el domingo, esta prestigiosa compañía estrenará La vie, una propuesta que en otros países se la presentó como de teatro-cabaret.
La vie es un espectáculo de circo que reúne este arte con el teatro y el baile. "O sea, todas las cosas que nos gustan hacer, porque podemos hacer lo que queremos", ha dicho Sébastien Soldevila, uno de los siete dedos de esta magnífica mano que dirige a la no menos magnífica compañía. La obra tiene lugar en un purgatorio imaginario. El humor negro como la interacción con el público parece ser que son dos constantes del espectáculo. En este contexto, un tanto diabólico, las almas pecaminosas saltan, caen, hacen malabares, vuelan y cantan. Cabe acotar que, en función de los otros dos espectáculos que ya presentaron en Buenos Aires, cualquier rutina circense que ellos se propongan tiene una factura técnica impecable. Y, como sucede con la mayoría de las propuestas de arte circense contemporáneo, en ellos siempre hay un plus, una intención dramatúrgica, una mirada plástica del hecho escénico que forma parte de su marca registrada. Por eso, sus creaciones se presentan en los más importantes encuentros escénicos del mundo.
En esta oportunidad, habrá ocho intérpretes y un DJ. Hasta pasado mañana, las funciones serán, a las 20. El sábado y el domingo, se harán a las 16 y a las 20. Allí, una mano con siete dedos promete convertir a la misma muerte en todo un espectáculo para toda la familia.