Un ratón con chapa de actor
Anticipo: El jueves se estrena "Un ratoncito duro de cazar", producida por la empresa de Spielberg.
NUEVA YORK.- La despreocupada frase "es sólo un ratón" se caerá, estrepitosamente, por las escaleras de la antigua y derruida mansión que acaban de heredar los desventurados hermanos Smuntz en la película "Un ratoncito duro de cazar" ("Mousehunt"), que se estrenará este jueves en Buenos Aires. Porque, enseguida, Ernie y Lars aprenderán a no subestimar al rival. Y si bien los ratones "no tienen sentido del humor" _como opina uno de ellos_, pronto estos dos hermanos se verán entrampados en la burla del pequeño y hábil roedor, el único que invade la casa. Y ya no se sabrá quién cazará a quién, o quién invade a quién.
El título en español de este nuevo producto de la empresa de Steven Spielberg, Dreamworks, puede sonar infantil _si bien no deja de ser un producto dirigido a los más chicos_, pero con su humor cínico y varios gags que recuerdan escenas de "Los tres chiflados", "Laurel y Hardy", "Indiana Jones", "Godzilla", "El rey León", "Tom y Jerry", "Bernardo y Bianca" y, por supuesto de Speedy González, logra captar o "cazar", también, a los grandes. "Un ratoncito duro de cazar" es, además, la ópera prima del director Gore Verbinski, conocido realizador de comerciales, como el de Nike, con Michael Jordan.
De Mickey, ni la sonrisa
Las primeras estrellas de esta película son tres. El americano Nathan Lane es un rostro muy familiar en las producciones de Broadway. De todos modos, su paso por el cine no es para olvidar y ya se destacó, entre otras, junto a Robin Williams en la película "La jaula de los pájaros", de Mike Nichols, por la que fue nominado al Globo de Oro. También le dio su voz a Timón, ese raro animalito de "El rey León", el dibujo animado más exitoso de Disney.
El comediante inglés Lee Evans es favorito de los críticos en su Inglaterra natal, pero su debut en cine fue en Hollywood junto a Jerry Lewis en la comedia "Funny Bones". Y hace muy poco se lo vio en la película de Luc Besson, "El quinto elemento".
El tercer personaje en cuestión es, sin dudas, el ratón, que está más cercano a Jerry en su actitud y muy lejos del dulce Mickey (ver recuadro).
A ellos se une el actor Christopher Walken (ganador de un Oscar por "El francotirador", entre otras), que se luce en el papel de ángel exterminador _esta vez en tono de comedia_ vestido como para la guerra, con arneses, lentes infrarrojos y grabador para registrar la pesquisa paso a paso.
Después de la premiére de "Un ratoncito duro de cazar", en Nueva York, los protagonistas conversaron con La Nación . Nathan Lane, con su voz altisonante contestó sobre las semejanzas en la película con el humor del querible Oliver Hardy, "el Gordo": "Sí, la película combina mucho un viejo cartoon de la Warner y el tipo de humor físico de ÔLaurel & Hardy´. Técnicamente, fue muy difícil este rodaje porque eran tomas muy cortas, más que en una película normal. Y a veces, cuando nosotros hacíamos una escena bien, el ratón la hacía mal, y viceversa. En las escenas de animación computada, muchas veces sólo veíamos un punto rojo proyectado en el piso y detrás de eso teníamos que correr como si estuviéramos viendo al ratón". _¿Es más difícil hacer reír a los chicos o a los adultos?
_Probablemente, a los chicos. Es difícil saber cuándo se van a reír o qué será lo que encuentren divertido. Por otra parte, la película es muy inteligente. El ratón es sólo un ratón, no lo presentan como bonito o adorable.
_¿Después de "La jaula de los pájaros", recibió muchos guiones para interpretar drag queens (travestidos)?
_Not really (no realmente, dice en tono afeminado). Esa película fue muy exitosa, pero después de eso volví al teatro porque ya estaba embarcado en hacer el revival en Broadway de "A Funny Thing Happened on the Way to the Forum", por la que en 1996 gané el premio Tony.
_¿Cómo lo trata Hollywood?
_Creo que Hollywood no sabe exactamente qué hacer conmigo. Todavía están pensando en quién soy y qué hago. Ellos dicen: "Este tipo aparece y siempre hace cosas distintas". Todavía no me pudieron encasillar.
La otra América
"Un mundo sin cuerdas es un caos", acuñó Mr. Smuntz antes de morir. A sus pobres herederos les legó, además de una mansión hipotecada, una fábrica de hilos con un tendal de deudas y obreros en huelga, y un pedacito de hilo, el primero que hizo al llegar a América. Así es como los hermanos Smuntz intentan a toda costa remodelar esa mansión para, obviamente, hacer dinero con ella. Pero el tercer pasajero estará siempre allí, al acecho. Y los hermanos empiezan a montar en cólera salvaje hasta destruirlo. Entonces deciden comprar "un gatito con historial de demencia". Y llega Catzilla (en alusión al dinosaurio Godzilla, la ingenua imagen del terror que quisieron imponer los japoneses y que siempre resulta ridiculizado por los americanos).
"Yo no soy ni famoso ni un gran actor _dijo tímido Lee Evans_. Al principio estaba un poco asustado por trabajar con Walken, y lo mismo me pasó con Gary Oldman cuando hicimos ÔEl quinto elemento´.
_Pero usted es famoso en Inglaterra...
_Mi mamá me conoce. Yo empecé haciendo shows en pequeños teatros, y enseguida actué en una novela que duró cuatro años. Cuando creces en otro país ves a América como un buen lugar para hacer grandes películas. Yo vine para expandirme y crecer, pero no tengo un proyecto ambicioso. Hasta el año último viví en un departamentito en Los Angeles.
Sobre el caos que significó rodar la película, Lee Evans contó que muchas veces decía: "ºOh Dios, si piso un ratón de estos que fue entrenado durante tanto tiempo para correr, saltar y hacer tantas cosas! Y al estar constantemente rodeado de ratones, muchas veces me imaginaba qué se dirían entre ellos, por ejemplo, cuando elegían a uno para hacer algo determinado: "¿Por qué, bastardo? ¿Por qué tú y no yo?" Pero así es Hollywood, sabes. Más allá del chiste, a veces te toca y otras no.
Roedores con estrella
NUEVA YORK.- Los pocos ratones que trabajaron para el cine o la TV lo hicieron sólo caminando desde un punto A hasta un punto B. Los 65 ratones estrellas de "Un ratoncito duro de cazar" recibieron un entrenamiento especial para correr, saltar de un pocillo de cerezas, meterse en una cama, volver a la cueva, sortear una cantidad de tramperas, subir, bajar, etcétera. Quien los "puso en forma" es Boone Narre, conocido entrenador de Hollywood por las películas "Indiana Jones" y "La última cruzada", "Twister", "Buddy", "Batman eternamente", o programas de TV como "La niñera", "Mad about you" y "Texas Rangers", entre otros. Como nunca antes había hecho una película sobre un ratón, "hablé con investigadores de la UCLA, y hasta busqué al enemigo, los exterminadores, que los conocen bien. Luego compré 20 ratones. Pero a Gore Verbinski no le gustaron: no tenían que tener aspecto amenazador, los prefería de mirada dulce, pero no asustados. Recorrí toda California y me sumergí en Internet, donde di con un tipo que tenía 8000 ratones. Le mandé fotos y videos de los que necesitaba, pero de los 8000 sólo había cuatro interesantes. Entonces decidimos criar nuestros ratones", dijo Narre a La Nación .
El 95 por ciento de la película se hizo con ratones reales. El resto se complementó con un animatronic y con algunas imágenes generadas por computadora. Para Narre, la escena más difícil de lograr fue en la que el ratón pasa por entre medio de cientos de tramperas, sin pisar ninguna. "La hicimos con un ratón verdadero. Los entrenamos durante un mes y esa escena nos llevó cuatro días de filmación con cuatro ratones diferentes".
Mientras cierra la casita prefabricada y se guarda al ratón en un bolsillo, Boone Narre declara que su esperanza "es que después de la película todos quieran tener un ratón de mascota, en vez de llamar al exterminador o colocar tramperas. Con suerte, se convertirá en la mascota del ´98."