Un joven autor y director de pisada contundente
Ariel Gurevich se afirma en la escena y estrena Las descamisadas, una gesta
"Los procesos creativos nacen de azares y son oportunidades expresivas", dice el guionista, dramaturgo y director Ariel Gurevich cuando habla de sus trabajos ligados al teatro. Su primera obra, Seré tu madre tranquila (2014), comenzó a tomar forma a partir de unos textos poéticos. Su segunda producción, Las descamisadas, una gesta, que hoy estrenará en ElKafka, fue una propuesta de las actrices Julia Houllé, Cecilia Ursi y Claudia Schijman, quienes integran el elenco junto a Hernán Lettini. Ellas le pidieron ayuda para dar forma dramatúrgica a un proyecto que estaban improvisando. La idea era hablar sobre el mundo de una abuela que vive en un pueblo y trata de recordar la primera vez que la mujer votó en la Argentina. En el imaginario de las intérpretes también estaba el universo que diseñó Manuel Puig en Boquitas pintadas.
"Acepté el desafío de ayudarlas -cuenta Gurevich-. Me mostraron un ensayo, me interesó lo que habían logrado. Surgió la propuesta de que las dirigiera. Probé trabajar dramaturgia de dirección, pero no funcionó. En ese momento estaba tomando clases con Ricardo Monti y le conté lo que me pasaba. Él me dijo: «Pará de ensayar y ponete a escribir». Asumí la dramaturgia con algunas cosas que habían aparecido en los ensayos y otras no. Puse en relieve el día de la primera votación, el 11 de noviembre de 1951. Me servía como tema, como una estrategia de lo teatral hablar de esa jornada y no de otra. Apareció la idea de jugar con tres mujeres que se refugian en un bar de hombres encontrando así una tensión entre lo femenino y lo masculino."
Aunque la idea primigenia esté repleta de alusiones a Eva Perón y el peronismo, a Ariel Gurevich no le interesó desarrollar esos planos. Las tres mujeres, explica, son como una especie de molde y entre ellas existe la lucha de clases. También menciona a "Las muchachas", un conjunto de mujeres a las que Eva envió al interior para realizar un censo y que luego conformaron la denominada rama femenina del Partido Peronista. "Las protagonistas hacen referencia a ellas, pero sin nombrarlas directamente -explica el autor y director-. Las ven como a personas que invadieron un pueblo que era tranquilo, fueron de casa en casa. La obra imagina qué relación tuvieron con ese grupo."
El proceso de Las descamisadas, una gesta fue extenso. En el medio, Gurevich escribió, junto al dramaturgo y cineasta Santiago Loza, Doce casas. Historias de mujeres devotas, que se emitió en 2014 por la TV Pública. Una experiencia que fue muy definitoria para el creador, por la repercusión que tuvo y por el nivel de los actores que participaron del ciclo. "La escritura estuvo muy preservada luego en la realización (dirigieron Loza y Eduardo Crespo) -confiesa-. No es algo que se hubiera podido dar en otro canal, por la textura que tenía la escritura. Además fue un placer escribir melodramáticamente, no atado a un coloquial realista que aparece mucho en la televisión. Fue una experiencia fantástica."
Apasionado por el teatro desde muy joven, amante de los actores, a Ariel Gurevich le costó mucho decidirse a escribir dramaturgia y dirigir. Poco a poco descubrió que puede. Seré tu madre tranquila estuvo dos temporadas en el Centro Cultural Rojas, participó del FIBA, de Teatro x la identidad, en el Festival Novísima Dramaturgia; en agosto tiene previstas funciones en el teatro Solís de Montevideo y espera volver a hacer temporada en los próximos meses.
"El teatro me encanta -asegura-. Insistir con los materiales, creer en el grupo. No quiero trabajar especulativamente: vamos a hacer esto, en tal lugar, durante tanto tiempo. Quiero que lo que hago sea una necesidad expresiva."