Un accidente dejó al desnudo las fallas en Fuerza Bruta
Tras la caída del actor Boris Bakst, la compañía y su productora firmaron un compromiso con la Asociación de Actores
Hace casi cuatro semanas, en pleno show de Fuerza Bruta en el Centro Cultural Recoleta, hubo una falla técnica en uno de los motores que producía un péndulo aéreo y Boris Bakst, actor de la compañía que estaba a cinco metros de altura, cayó en un sector al que el público no tiene acceso. Se fracturó el fémur y la muñeca. Al día siguiente, la organización del evento, junto a Fuerza Bruta, publicó un comunicado explicando lo ocurrido y llevando tranquilidad al público al contar que el actor se encontraba en buen estado, pero que iba a ser intervenido quirúrgicamente y, luego de una rehabilitación, volvería a trabajar normalmente.
Boris Bakst es uno de los artistas que integran Fuerza Bruta, la compañía teatral argentina que se caracteriza por su estilo experimental, la innovación estética y los grandes despliegues escénicos. Es justamente por ese motivo que los actores que son parte del show corren muchos riesgos, ya que tienen escenas con arneses colgados del techo, en el aire, en el agua y en superficies no muy seguras. "Está claro que es un show mucho más exigente que una obra de texto, no están trabajando en cualquier lado", dice Fernando Moya, fundador de Ozono, productora de Fuerza Bruta.
Según el comunicado que divulgó la compañía, el malacate de izado (utilizado en grúas e instalaciones de izado industrial) cuenta con un sistema de seguridad para detener el recorrido de la cuerda durante el ascenso. Pero en esta ocasión se produjeron fallas de dos sistemas de seguridad: un primer sistema de cable elástico que no permite el rozamiento de la cuerda con ningún elemento; y, el segundo, por el mal funcionamiento del tope mecánico que no permite que se "estrese" la soga al llegar al tope. Al fallar ambos, la soga no logró resistir el peso del actor y por eso cayó.
"En 10 años nunca nos pasó algo así. Evacuamos la sala apenas ocurrió el accidente y llevamos a Boris a la clínica Los Arcos para que se le realicen los tratamientos correspondientes", cuenta Moya. El actor ya pasó por tres intervenciones quirúrgicas: dos de fémur y una de muñeca, de las cuales ya se encuentra fuera de peligro y estable. En cuanto a su contrato con la compañía, Moya explicó a LA NACION que lo mantendrán vigente hasta que finalice con su rehabilitación posquirúrgica, y a partir de ahí quedará en manos de Bakst la decisión de continuar o no trabajando en el espectáculo. A su vez, explica que fue una situación muy rara la que se vivió porque fue tal el golpe emocional que tuvieron los actores que suspendieron las funciones por casi 15 días para que fueran tratados por psicólogos y profesionales. Incluso se rumoreaba que habría muchas bajas luego del accidente por parte de los integrantes del elenco, pero Moya desmiente esa versión. "El núcleo fuerte sigue trabajando. Nosotros no los presionamos para volver; cuando estuvieron listos y en condiciones, nos avisaron", dijo Moya.
Hace unos días, la Asociación Argentina de Actores tomó cartas en el asunto luego de las conclusiones elaboradas por el perito ingeniero Jorge Geretto, convocado para realizar el relevamiento técnico de lo ocurrido para salir en defensa de los actores. Exactamente el 26 de agosto, AAA firmó junto a Ozono Producciones SRL y Fuerza Bruta SA un acta de compromiso por condiciones seguras de trabajo donde las empresas asumen su obligación de efectuar un control periódico de todos los elementos que se utilizan en los shows, verificando el estado y funcionamiento, a lo que se le agregará un libro de actas donde los responsables de la tarea de control deberán volcar y firmar el resultado de dicha verificación. En tanto, se incluirá, al menos en las primeras funciones luego del accidente, un inspector de Actores para que junto a los de Fuerza Bruta realicen un control mucho más riguroso. "El acta fue algo que desarrollamos en conjunto entre las dos partes. Nosotros respondimos con nuestras responsabilidades técnicas y pusimos a su disposición todo el contenido para que lo analicen", explicó Moya. Hacer simulacros periódicamente, brindar a los actores condiciones ambientales y de seguridad en cada show junto a atención médica y psicológica necesaria son algunos de los otros puntos incluidos en el acta. También se pidió que brinden apoyo psicológico a los actores que estuvieron presentes durante la caída de su compañero.
Debido a lo ocurrido esa noche, los shows pactados fueron reprogramados, hecho que produjo una serie de quejas por parte del público a través de las redes sociales. "Nosotros pedimos las disculpas correspondientes y esperamos que la gente nos entienda. No estamos acostumbrados a esto, nunca nos había pasado", finalizó Moya.
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