Tras el escándalo, echaron a Ari Paluch de América 24
Rescindieron su contrato a raíz de la denuncia por acoso sexual, a la que se sumaron otras acusaciones en las últimas horas
Ari Paluch no trabajará más en América 24. Luego de una semana de fuertes repercusiones, a raíz de una denuncia por acoso sexual, fue rescindido ayer al mediodía el contrato que unía a Paluch con la señal informativa, en donde conducía el segmento de los mediodías.
La drástica decisión, según pudo saber LA NACION, se tomó luego de una reunión entre las autoridades de A24, la productora Scaramella (a cuyo cargo están varios de los programas de la señal) y el propio Paluch, empleado de esa productora.
En las últimas horas aparecieron varios testimonios con acusaciones contra Paluch en línea con la denuncia original que había formulado la microfonista Ariana Charrúa, quien había denunciado ante las autoridades de A24 que Paluch, al término de su programa del miércoles 17, le había tocado la cola.
La locutora Verónica Albanese, que trabajó hace varios años con Paluch, contó que había vivido experiencias parecidas a las de Charrúa. Dijo a LA NACION que sufrió maltratos por parte del conductor por no acceder a sus avances sexuales y lo responsabilizó de su despido cuando estaba embarazada de cinco meses. "Es un hombre detestable, que acosa, que juega mucho con ese límite, y que si uno no accede maltrata, y demás", afirmó.
También se escuchó ayer por primera vez la palabra de Federica Guibelalde, compañera durante muchos años de Paluch en el programa de radio La batidora. Desde Canadá, donde reside, Guibelalde reveló al programa de El Trece Nosotros a la mañana que no sufrió abusos, pero sí acoso. "Desde comentarios y requerimientos verbales hasta ser destinataria de algún regalo inapropiado. De confundir la realidad con roles imaginarios que representábamos al aire", describió.
"Al cabo de cinco años -continuó Guibelalde-, ya no aguanté más la situación y dejé definitivamente el programa". Mantuvo un largo silencio hasta que se decidió a hablar para "acompañar la lucha por la consolidación de los derechos de la mujer y como madre de cuatro nenas, pensando en su futuro". Le tocó vivir el episodio cuando iniciaba su carrera como locutora. "Recién recibida, tuve que vivir mi propio tormento en el ámbito laboral", manifestó.
Guibelalde argumentó que ciertas "conductas machistas" no eran objetadas en aquellos tiempos. "Muchas nos callamos -agregó- por temor a perder el trabajo. Ari no era solamente mi compañero laboral. Era la figura principal del programa y mi jefe".
Por la tarde, cuando la desvinculación de Paluch ya era un hecho, se sumó a estos testimonios el de Sofía Rigler, maquilladora de A24. "Viví una situación igual a la que le pasó a mi compañera Ariana. Me pasó dos veces lo mismo", señaló Rigler. Dijo además que el video de las cámaras de seguridad de A24 que registra el hecho denunciado por Charrúa no ofrece dudas. "A raíz de que están diciendo que el video es dudoso, yo doy fe porque conozco mucho a Ariana, es muy buena compañera. Lo que le pasó a ella no fue sin querer, porque a mí me pasó lo mismo", dijo sobre las imágenes que se viralizaron durante las últimas 24 horas en las redes sociales y los portales informativos.
Tan fuerte fue la repercusión del hecho que anteanoche presentó su renuncia al programa que venía siendo conducido por Paluch uno de sus columnistas, José Hernández, en solidaridad con Charrúa.
De nada sirvieron las justificaciones de Paluch, que desde la emisión vespertina de su programa radial le pidió disculpas a Charrúa por un hecho que, a su juicio, ocurrió sin intención. También dijo que es víctima de una campaña de "difamación" y que iba a aceptar cualquier decisión que tomaran sus empleadores.
Tras la denuncia de Charrúa, Paluch no pudo volver a la pantalla de A24 y también quedó al margen del operativo periodístico dispuesto por la señal informativa para el domingo electoral.
Con la colaboración de Silvina Ajmat