Un triunfo merecido
Graduados fue el gran ganador de la noche; Sebastián Ortega, artífice de la tira, analiza cómo combinar éxito y reconocimiento crítico
No fue la sorpresa de la noche, aunque cuando Jorge Lanata empezó a agrupar estatuillas al costado de su butaca en la platea del Colón, aparecieron algunas dudas en el público presente sobre la posibilidad real de que Graduados, el gran favorito , se llevara -como finalmente lo hizo- el Martín Fierro de Oro. "Vi la transmisión en la intimidad de mi hogar con mi familia y recibí la noticia con una alegría enorme", confiesa Sebastián Ortega, uno de los creadores de ese programa, que anteayer prefirió eludir las apariciones públicas.
Al menos hasta pasada la medianoche cuando, ya con el premio mayor que otorga la Asociación de Periodistas de la Radiofonía y la Televisión Argentinas (Aptra) en sus manos, asistió a una fiesta que organizó su productora, Underground, en el hotel Panamericano, justo enfrente del Teatro Colón, donde se realizó la ceremonia. "Un premio así te pone contento, porque la gente ve el producto terminado, pero no sabe las horas de trabajo que hay detrás para sacar al aire un programa de este tipo", agrega el productor.
La historia de Graduados , el programa que acaba de alzarse con el Martín Fierro de Oro, indica que comenzó como una apuesta importante de Telefé y de las productoras que lo realizaban (Underground y Endemol), que lo consideraron capaz de hacerle frente desde la ficción al ciclo que por entonces era imbatible en las mediciones de rating: el ShowMatch de Marcelo Tinelli. La apuesta dio frutos y el envío le dio pelea de igual a igual, finalmente destronándolo de su sitial de líder absoluto de audiencia.
Tanque televisivo
"Me di cuenta que el programa era un éxito cuando en la vereda de enfrente iban variando sus propuestas y -sin que suene arrogante-
Graduados
se las llevó puestas a todas. A la quinta o sexta vez que pasó esto empezamos a ver que, aunque ningún programa es a prueba de balas, nuestro ciclo era lo que ustedes los periodistas llaman un «tanque» de verdad. Después estaba la calle: era sorprendente lo que generaba entre la gente. Tengo la experiencia de
Los Roldán
, que hacía 40 puntos de rating, pero esto era impresionante. Te hablaban de los personajes, de las situaciones que se mostraban y esto es algo que aún hoy sigue pasando. Me pasa hasta cuando viajo afuera: viene algún argentino y me pregunta si vamos a hacer alguna segunda parte y te hablan maravillas del programa, de lo que significó, que logró reunir a toda la familia frente a la pantalla. Son satisfacciones que te da este trabajo. Anteayer fue una oportunidad de juntarnos los que lo hicimos y celebrar él éxito con mucha alegría y muy agradecidos por el reconocimiento que nos dio Aptra.
- ¿A qué le atribuís el éxito que consiguió la tira?
-Para mí no hay un solo factor. Es una sumatoria de factores que se dan. Por un lado hubo gente que se encariñó con algunos de los personajes. El de Loli [Nancy Dupláa], que era una mujer casada, supuestamente feliz, pero con un enorme vacío; el de Andy [Daniel Hendler] un eterno adolescente; el de Patricia [Isabel Macedo], con el que muchos se pueden haber identificado por haber sufrido maltrato por parte de sus compañeros, no solamente por la gordura, sino por muchas otras cosa por las que te pueden discriminar en la adolescencia. La crueldad de los chicos existe, aunque uno no se la imagina. La posibilidad de plantear eso con un personaje muy colorido fue muy interesante. Después, lo de Willy [Juan Gil Navarro], que sale del placard a los cuarenta años y se termina casando. Además la trama era muy divertida, con el ADN y ese hijo que aparece y que es más maduro que su propio padre. Otro factor importantísimo fue la música.
-La propuesta, con tantos ingredientes locales, ¿complica la venta del programa al exterior?
-De ninguna manera. De hecho, el formato es uno de los más vendidos de Telefé en Europa y en otros lugares del mundo. En México hubo una disputa muy importante entre Televisa y TV Azteca por el formato. La amistad y la música son dos ingredientes muy importantes, que van de la mano y son universales. Después está el trabajo de los países que compran el ciclo para adaptarlo a sus costumbres y localismos, sin que pierda la magia.
-Para el año que viene hay un proyecto que, sin ser una continuación de Graduados , tiene muchos puntos en común con él, ¿no?
-Sí. Estamos trabajando en un proyecto muy interesante con Nancy Dupláa, Paola Barrientos, Mex Urtizberea y otros actores del elenco de Graduados , que si bien es una historia diferente a la de aquel programa, comparte un universo común, en el que la amistad y la música son centrales. Nuestro plan es empezar a grabar en octubre o noviembre, así que estamos trabajando muy fuertemente para ajustar los libros. Es una propuesta a la que le tenemos mucha confianza. Más aún al ver el resultado que tuvo Graduados .