Perdidos en la tribu

Perdidos en la tribu / Productora: Eyerworks - Cuatro Cabezas / Producción general: Diego Guebel / Conducción: Mariano Peluffo / Producción ejecutiva: Sebastián Averbuj / Dirección: Manuel González (Namibia), Gustavo N. Perednik (Indonesia), Carlos Pauluk (Etiopia) / Canal: Telefe / Horario: lunes, a las 22.15
Nuestra opinión: muy bueno

Luego del boom de Gran Hermano en los 90, que impuso al género del reality show en todo el mundo, en 2000 la cadena CBS en los Estados Unidos lanzó un nuevo tipo de programa dentro del mismo género con la primera emisión de Survivors , en la que dos grupos de personas eran abandonadas en una isla en la cual debían aprender a sobrevivir con los elementos naturales que tenían a su alcance. El mismo año llegó a nuestro país la versión de este programa, con el nombre de Expedición Robinson, y con la conducción de Julián Weich. La diferencia con Gran Hermano en este tipo de programas es que el desafío más importante por superar por los participantes no es el aislamiento y la convivencia, sino la adaptación a vivir en condiciones de abrigo y alimentación muy diferentes a las que estamos acostumbrados a tener en el confort de las sociedades industrializadas.

A esta categoría de realities pertenece Perdidos en la tribu , propuesta en la que tres familias son enviadas a diferentes latitudes del planeta a convivir con pueblos que se manejan con costumbres muy diferentes a las suyas. En el caso de la versión local del programa que empezó a emitir Telefé, la familia Moreno fue enviada a Etiopía, a convivir con el pueblo hamer; a la familia Villoslada le tocó en suerte ir a Namibia, a convivir con el pueblo de los himba, y a los Funes se los envió a Indonesia, a tratar de adaptarse a la vida que lleva allí el pueblo mentawai.

En este reality, los desafíos pasan por aguantar el aislamiento que se manifiesta de una manera muy particular: la familia se halla muy lejos de su hábitat natural y rodeada de seres humanos con los cuales le resulta muy difícil comunicarse. El otro desafío es la convivencia, que aporta los problemas que puede haber entre los mismos miembros de la familia (en general, padre y madre de los parientes que participan están divorciados), a lo que se suma el desafío de tener que compartir el día tras día con gente que practica costumbres y formas de vida muy extrañas a las suyas. Y el tercer factor es el de tener que adaptarse a condiciones de abrigo y alimentación muy ajenas a las que están acostumbrados.

Una historia bien contada

La propuesta de este ciclo descansa sus posibilidades de éxito en la fórmula que posee los elementos capaces de generar intriga, suspenso, emoción, risa, empatía o antipatía hacia los protagonistas en los diferentes sucesos que les tocan vivir. Pero el funcionamiento de la fórmula por sí misma no alcanza si no hay un trabajo de realización que posibilite, en primer lugar, rescatar esos momentos en sonido e imágenes y un tratamiento posterior de ese material para contar una historia entendible, atrapante y divertida. El trabajo de producción, en este caso, lo consigue de manera muy eficiente. La estructura de cada capítulo arma un relato cuya intriga va in crescendo y genera momentos de suspenso, humor, emoción, y va develando de a poco las características de los distintos personajes que protagonizan estas historias. El trabajo de edición aporta lo suyo al utilizar recursos apropiados para contar adecuadamente la historia sólo con los elementos imprescindibles. Lo único que desluce la propuesta es que se nota demasiado que los pueblos visitados no son para nada ajenos a las costumbres occidentales y actúan un poco para el show.

24,4

Puntos de rating
Hizo en el debut. Quedó en el segundo puesto entre los programas más vistos del día.

Conforme a los criterios de

Conocé más