Novio se busca

"Ayer tendría que haber matado a mi madre y a mi hermana, pero en vez de apuñalarlas me comí medio lemon pie y lloré." Así comienza la historia de Lucía, que primero se narró en un blog, luego fue un libro y ahora se podrá ver en la TV. El disparador de la trama significó para Lucía la "dolorosa sorpresa" de su vida, ya que el día que su hermana menor anunció su casamiento, escuchó que su madre le

decía algo así como: "Lucía seguramente irá sola, gorda y vestida de negro al casamiento, pero si va con un novio normal, te pago la fiesta".

Herida y bastante deprimida, Lucía decidió en ese momento que su madre perdería la apuesta como fuera, y se propuso conseguir la cantidad de citas necesarias para "conseguir un novio normal" que la acompañe a la boda de su hermana.

Una divertida producción

Quienes decidieron que valía la pena contar esta historia en la pantalla chica fueron las productoras Rosstoc (uno de sus dueños es Gastón Pauls) y Dori MediaGroup ( Lalola , entre otros), que con los libros de Marta Betoldi ( Socias ) y la dirección general de Juan Taratuto pusieron manos a la obra.

Convocaron a un elenco que en las grabaciones, según pudo constatar LA NACION, se está divirtiendo a lo grande. Lo encabezan Muriel Santa Ana ( Lalola ) como Lucía, la protagonista, acompañada por Georgina Barbarrosa, como Manucha, su madre, y María Abadi ( Montecristo ), quien será Irina, su hermana menor, a punto de contraer matrimonio.

El elenco se completa con Silvia Montanari, Hernán Jiménez, Osvaldo Santoro, Lidia Catalano, Fabián Arenillas, Boy Olmi, Nicolás Mateo, Sebastián Wainraich, Rafael Ferro, Nicolás Pauls, Silvina Luna, Alejo Ortiz, Brenda Gandini, Luz Palazón, Luis Ziembrowski y Lionel Campoy, a quienes se irán integrando en los distintos capítulos los galanes que acompañarán a Lucía en cada una de las citas (entre ellos Gastón Pauls, quien hará una participación especial en la tira).

En las detallistas escenografías en las que se desarrolla la tira, se mueven con soltura Gustavo Luppi (director de piso, hijo del actor Federico Luppi) y Daniel De Filippo (director de exteriores), además de un equipo integrado por unas cien personas.

Durante una jornada de grabación, Muriel Santa Ana dialogó con LA NACION y sintetizó su mirada sobre el personaje de Lucía: "El conflicto real es la incomodidad que tiene Lucía con el mundo, con su cuerpo y consigo misma. No es una fanática del matrimonio, tiene su trabajo y es bastante solitaria. En el camino de ganarle la apuesta a la madre comienza a convertirse en la mujer que quiere ser pero está atrapada en la mirada condenatoria de Manucha. Aunque tiene mucho de ella: es prejuiciosa, no es solidaria, es mala -se ríe-. Adora a su hermana menor, pero la critica y la cuestiona".

En una de las escenas, es un domingo cualquiera y Lucía está sola en su casa, comiendo, deprimida. Tres cámaras toman a una Santa Ana en pantuflas y pijama, sin maquillaje y algo despeinada. A la actriz no parece molestarle ese cuadro y se muestra distendida. "Sé que no cumplo con los estándares de heroína tradicional de telenovela. Si bajara diez kilos, tal vez. Aunque no me considero «la gorda». Tal vez para los parámetros de las revistas lo sea. Para la tira uso varios rellenos porque Lucía se ve gorda, no se cuida, no tiene para quién cuidarse. Aunque es una mujer atractiva y sexualmente activa. Tiene una imagen distorsionada de sí misma y su madre ayuda bastante", detalla a LA NACION.

Barbarrosa, siempre sonriente y graciosa durante el rodaje, describe a Manucha: "Discrimina, es separatista, compara a sus hijas, vive criticando, tiene un montón de miserias -suelta la carcajada-. En realidad es una pobre mujer pretenciosa y superficial que quiere lo mejor para su hija mayor. Intuye que en esta sociedad siendo rubia y flaca se puede estar mejor".

Para Manucha, la hija exitosa, casi perfecta, es Irina. Aunque la joven no se sienta para nada exitosa, según cuenta Abadi. "Es insegura, hace todo lo que quiere su madre y le resulta cómodo ese lugar. Es bastante básica, su mundo es su novio y el country. Admira a su hermana porque es independiente y sabe lo que quiere, no como ella que vive sujeta a la mirada de los otros", cuenta la actriz .

Para las tres, Ciega a citas habla de los prejuicios, de lo importante que resulta la imagen ante los demás en nuestra cultura, del doble discurso y de aquello "no dicho".

Con todo, a pesar de los dolores y los desencuentros, los personajes de la tira y las escenas que se verán desde el 20 de este mes resultarán para muchos desopilantes. Los episodios que narrarán el derrotero de esta treintañera para encontrar pareja tienen forma de breves historias con una estructura de relato casi cinematográfica, verosímil y cotidiana.

La historia que nació en el ciberespacio

La periodista Carolina Aguirre (autora de los blogs Bestiaria y La peleadora ) escribió el blog Ciega a citas en primera persona bajo el seudónimo de Lucía González y lo mantuvo online desde noviembre de 2007 hasta junio de 2008. Lucía, una periodista soltera de 30 años, descubrió que su madre había apostado que ella iría sola, gorda y vestida de negro al casamiento de su hermana menor, y desde entonces se puso como objetivo que su madre perdiera la apuesta. Llegó a tener 15.000 visitas diarias en su último capítulo, 1000 comentarios por día y 2800 fans en Facebook.

Los números

120

• Es la cantidad de capítulos que los productores tienen previsto poner al aire.

258

• Son los días que le quedan a Lucía para conseguir un "novio normal" para llevar a la boda de su hermana.

100

• Es la cantidad de personas que integran los equipos técnico y de producción de Ciega a citas.

25

• Son los actores y actrices que integrarán el elenco de la tira.

15.000

• Es la cantidad de visitas diarias que alcanzó el blog en su último capítulo.

1000

• Son los comentarios por día que llegó a tener el blog Ciega a citas.

Para agendar

Ciega a citas, coproducción de Dori Media Group y Rosstoc.

Canal 7, de martes a viernes, a las 23. Estreno: martes 20 de octubre.

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