Luis Majul: "Soy periodista, no tengo más remedio"

Lleva 35 años de trayectoria en el periodismo gráfico, 30 en la radio y 19 en la TV. Luis Majul es un periodista todoterreno, que sigue transitando los tres medios y, por esa razón, enérgico, nervioso y de muy buen humor ingresa a la sala de reuniones de su espacio audiovisual Margen del mundo, un ámbito admirable donde periódicamente se llevan a cabo todo tipo de lanzamientos y presentaciones relacionadas con la cultura y el periodismo. Y allí comienza a desgranar sus expectativas para La cornisa, (desde hoy por América TV), y Majul 910, el ciclo que conduce, de 9 a 12, por La Red (AM 910).

"Tengo los nervios propios del inicio de la nueva temporada de La cornisa en América, ahora en el nuevo horario de 20.30 a 22", dice en el comienzo. Es la 19° edición de un ciclo consolidado como líder en periodismo político. "El año pasado fue el mejor en cuanto a audiencia y desde el punto de vista del impacto periodístico. En al menos 30 de los 40 programas del año dimos información que al día siguiente fue tapa de diarios. El programa alcanzó un promedio de 12.4 puntos. Igualmente estamos haciendo una profunda autocrítica. Estuve conversando con gente a la que valoro mucho, como Liliana Parodi y siento que puedo ser un muy buen productor general, pero me falta mejorar mucho en el estilo de conducción. Estoy trabajando en no dejar de ser convincente y enérgico; y mejorar en ser más empático.

-¿Quizá menos dramático o tensionado?

-A veces transmito demasiada tensión. Pretendo que, en todo caso, lo que le genere incomodidad al televidente sea la información, y no la manera de transmitirla. En la radio, Mariela Ianigro, que además de ser locutora, hace coaching, me empezó a dar una mano. Los dientes apretados tienen una explicación. La mandíbula es muy dura, concentra la mayor rigidez. Y cambiamos además, la escenografía, la estética, la manera de presentar.

-¿Quiénes te acompañan este año?

-Van a estar Hugo Macchiavelli y Javier Mozo, como siempre, presentando los informes. Además pasarán muchos periodistas jóvenes. La mayoría de gráfica. Estoy convencido de que uno puede aprender a hacer televisión y a conducir, pero el background que te da la gráfica no lo aprendés en ningún lado. Los periodistas que quiero incorporar vienen de ese medio y varias son mujeres. Pero no porque me acabo de subir al "Ni una menos", sino porque en gráfica hay más y mejores mujeres periodistas que varones.

-¿Cuáles son las primicias y las sorpresas?

-El primer programa de La cornisa es soñado. Va a tener una entrevista al Presidente, que es la que todo el mundo quiere hacer. Así como el 23 de enero de este año volvimos a la radio con un audio del que habló todo el mundo, en el primer envío vamos a tener una escucha con impacto mediático y judicial, superior a la de enero. Vamos a tener un editorial con denuncias al gobierno anterior y al actual, puntualizando los casos de corrupción que se están investigando actualmente. Los errores de un lado y del otro. Somos periodistas independientes. Critiqué a Kirchner, Menem y Alfonsín. Y lo mismo va a pasar con este Gobierno. ¿Sabés por qué? Soy periodista. No tengo más remedio.

-¿Cómo observas el país hoy?

-Me preocupa mucho lo que está pasando. Creo que la economía no está bien, aunque haya signos de recuperación. Hay muchos sectores de la oposición responsables, también, de esta situación. Algunos de ellos quisieran que el gobierno de Macri terminara mañana mismo. Y los argentinos están muy movilizados políticamente. Siento que están esperando un programa político, de información, opinión y denuncia. Además es un año eleccionario. Está bueno que los canales de aire le abran el juego a la política. No quiero decir esto en detrimento de los otros canales, pero me parece que América es el canal más moderno, con mejor funcionamiento. Es un canal en vivo, que está muy vinculado con lo que está pasando en la calle

-¿Y en La Red?

-Me siento cada vez más cómodo y más feliz en la segunda mañana. Me estoy acercando al programa ideal que quiero hacer y transmitir.

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