La vuelta de Susana: los ausentes, las perlitas y todo lo que no se vio de su regreso a la pantalla

LA NACION presenció el primer programa de la temporada de la diva, luego de casi cinco años de ausencia de la pantalla de Telefe; crónica de una noche donde todo un canal estuvo al servicio de su máxima estrella

No fue un día más en el amplio edificio que ocupa Telefe en la localidad de Martínez. Desde temprano, gran parte de su personal estuvo abocado al regreso del programa de Susana Giménez, el gran estreno de la temporada 2024, luego de casi cinco años de ausencia del clásico programa de la diva en la pantalla chica.

Si bien algunos segmentos habían sido grabados con anterioridad -como el sketch de apertura con numerosas figuras invitadas y la entrevista a los campeones mundialistas Rodrigo de Paul y Leandro Paredes- lo cierto es que anoche se produjo la reentré de la diva con toda la pompa que su estelaridad amerita desde el estudio 1 -el más amplio del canal- y con una puesta en escena enmarcada por pantallas de última generación y un set de luces digno de un concierto de música.

Staff

120 personas conformaron el equipo que trabajó para la salida al aire del programa, contando la planta de producción, el área técnica, plantel artístico y los colaboradores personales de la conductora. Si bien la escenografía está montada desde hace varios días, ayer se hicieron las últimas pruebas de iluminación y de “tiro” de las siete cámaras para la salida en vivo con una tribuna colmada de público y una platea vip con invitados especiales y periodistas. Para acceder al estudio 1, hubo que atravesar un hall principal y un extenso pasillo enmarcados con pantallas led que reproducían el logo “SG”. La “Susanamanía” se respiraba casi desde la vereda. Había que hacerle honor al esperado regreso.

Al que madruga...

Alrededor de las cuatro de la tarde, Susana llegó al canal en su propio vehículo, al mando de Marcelo, su histórico chófer, quien permaneció en el set durante todo el programa. Curiosidades del destino, quien maneja el automóvil de Mirtha Legrand lleva el mismo nombre.

Susana se instaló en un camarín exclusivo que supera los doscientos metros cuadrados y que cuenta con salida directa al estudio. La diva no tuvo que desandar demasiado trecho para ubicarse detrás de la escenografía antes de la apertura inicial. En el cómodo reducto -un verdadero departamento de varios ambientes con entrada custodiada y varios sectores exclusivos para la diva a los que no accede casi nadie- Susana transcurrió toda la tarde preparándose para salir al aire a las 22 y repasando la rutina que su equipo de producción le acercaba.

El gran ausente fue el peluquero Miguel Romano, distanciado de su clienta dilecta desde hace algunos años. El peinado de la conductora fue comentario y trending topic en las redes sociales, ya que no fueron pocos los que lo consideraron algo “despeinada”. Más allá de eso, la conductora lució espléndida.

Mesa chica

Muy pegados a Susana se pudieron ver al productor Federico Levrino -productor general que acompaña a la diva desde hace años y es, en el ámbito televisivo, su colaborador más estrecho y de confianza- y a los responsables del canal de streaming Olga, Bernarda y Luis Cella, quienes regresaron a Telefe para volver a formar parte de la producción del ciclo.

También ellos tuvieron injerencia en el armado del stream que acompañó, desde las 21, los pormenores del programa con “reacciones” en directo. Darío Turovelsky, máxima autoridad del canal, llegó temprano y siguió de cerca el desarrollo de los preparativos y el aire en vivo del ciclo. Como suele suceder en el programa de la diva, todo se desarrolló con armonía en un buen clima de trabajo.

Su familia

Gran parte de la familia directa de Susana se dio cita en el estreno. Infaltable y con estricto bajo perfil, Mercedes Sarrabayrouse, hija de la conductora, acompañó a su madre en el camarín y, mientras salía al aire el saludo de Lionel Messi, se ubicó en la platea como una más.

También fueron de la partida los nietos de Susana, Lucía y Manuel Celasco, quien, este año, se sumó al plantel de producción comercial del programa. Manuel permaneció en el estudio, mientras que Mercedes y Lucía vieron la mayor parte de la emisión desde el camarín de la anfitriona.

Mercedes preguntó a un responsable de la seguridad si podía dirigirse al espacio vedado para la mayoría por detrás de la escenografía y partió del set desandando el camino por detrás de las pantallas led de última generación que son la vedette del montaje. Cuando terminó el programa, la heredera de la diva regresó al set y, en medio de la desconcentración, saludó cálidamente a Lorna Gemetto, la fiel fanática de Susana, quien llegó al canal muy temprano y fue ubicada en la platea preferencial.

Carolina Giménez, hermana de Susana, también estuvo desde temprano instalada en el set. En cambio, no fue de la partida Patricio, el otro hermano de la conductora, radicado en Uruguay y que suele tener una activa presencia en las redes sociales, siendo otro de los grandes ausentes de la noche.

La vuelta de un histórico

Luego de un período de ausencia -incluso luego de haber criticado públicamente a Susana-, el coreógrafo Marcelo Iripino volvió a trabajar con la diva. Cerca de las 20, el hombre de las coreografías multitudinarias, convocó al set al staff de bailarines y bailarinas para repasar el cuadro de apertura basado en algunos de los clásicos “hits” del repertorio de Giménez.

Unos 40 bailarines escoltaron la aparición de la estrella, coronados por el conocido tema “Detrás de todo solo hay una mujer”, que Susana dio a conocer en el primer programa de 1998, luego de la escandalosa separación de Huberto Roviralta.

“Chicos, vamos a hacerlo más despacio porque están transpirando el vestuario”, le aconsejó Iripino a su staff de danza. Faltaban casi dos horas para salir al aire y el cuadro, repetido cuatro veces, salía perfecto y atractivo. Una banda de percusión con efectos de agua fue el toque de color de ese momento inicial que resultó muy grato de ver.

Un nuevo “Susano”

Esta temporada no será de la partida “Marcelito”, un histórico secretario de la diva -el del famoso “¿Marcelito, estás ahí?” que interpelaba Susana- pero sí “Danielito”, quien estuvo anoche acompañado por Licha Navarro, la adquisición importada de Gran hermano. Ambos estuvieron en el set desde muy temprano ensayando la apertura y los movimientos de la diva.

En esa instancia preliminar, el lugar de la estrella era ocupado por Rodolfo Fast, un todoterreno de Telefe, encargado de cuestiones artísticas del canal. Cuando la tribuna, mayormente conformada por fans de María Becerra, una de las figuras invitadas de la noche, le solicitó a Licha que se acercara, el joven “hermanito” prefirió, por sugerencia de Federico Levrino, permanecer concentrado en su trabajo y no acercarse al público que le pedía a gritos tomarse fotografías.

Sala de prensa

Un espacio especialmente acondicionado ofició de lugar de recepción de algunos periodistas invitados, convidados con pizzas y empanadas. Darío Turovelsky ingresó para saludar a los presentes y alentarlos a mirar El stream de Susana en YouTube, a cargo de Nacho Elizalde, Sofía Gonet “La Reini” y Pablo Agustín, que salió desde un estudio montado ad hoc pegado al set principal. María Becerra, luego de la entrevista con Susana, fue parte de este espacio.

Euforia

Marcelo Iripino, Rodolfo Fast y un asistente del ciclo fueron los encargados de “agitar” y coordinar los movimientos de una tribuna que no necesitó de demasiados estímulos para darle calidez al estreno. La mayoría de los integrantes formaban parte del club de fans de María Becerra, pero que también se mostraron muy afectuosos con la dueña de casa, respondiendo a las “coreografías” improvisadas con los brazos y lucieron unas pulseras luminosas que fueron repartidas por la producción.

“Susana te amo”, “María quiero ser tu mascota” fueron algunas de las frases que les gritaban los fanáticos exaltados a la conductora y a su invitada estelar, quien participó del living y la entrevista de la diva y un set musical compuesto por tres temas que todos ovacionaron.

Tanto Susana como “La nena de Argentina” fueron muy afectuosas con el centenar de jóvenes convocados. “Necesito que coordinemos el movimiento de los brazos de derecha a izquierda”, pidió un asistente y todos rápidamente respondieron a sus órdenes. También Marcelo Iripino “agitó” a los presentes con su habitual carisma.

En dos ruedas

Mientras salía al aire la entrevista grabada con anterioridad a los jugadores mundialistas, Mora Bianchi atravesaba el escenario acompañada por un cámara probando su ingreso para saludar a Susana. La actriz es la protagonista de Margarita, la serie que esta noche se estrena en el prime time de Telefe.

En familia

Poco antes del vivo, María Becerra se acercó al set y preguntó por su familia. Rápidamente, una decena de personas levantaron sus manos. Allí estaban los afectos más cercanos de la cantante, incluida la “tía Gladys”, fanática de Giménez. Cuando, ya al aire, Becerra le contó a la diva sobre esta admiración de su familiar, la conductora no dudó en hacerla pasar al living. Luego, la “tía Gladys” fue parte de la transmisión en stream.

Genio y figura

En la platea se escuchó un “lo hizo a propósito” cuando la conductora le dijo a María Becerra que había cantado con Coldplay. La equivocación fue tomada con humor por la cantante, a pesar que quien había realizado esa actuación fue su colega Tini Stoessel. Desde ya, se trató de un error involuntario que no es otra cosa que uno de los habituales despistes de la diva.

Rating por las nubes

El anhelado regreso superó las expectativas de la audiencia esperada. Con picos cercanos a los 19 puntos y un promedio por encima de los 15 puntos, el ciclo polarizó los números del rating dejando muy atrás al resto de las señales abiertas.

Celebración

Cuando Susana se despidió de sus televidentes fue abordada por el periodista Roberto Funes Ugarte, quien le realizó una breve entrevista para uno de los ciclos del canal. En ese momento, el personal de seguridad buscaba una rápida desconcentración del público e impedía que los fanáticos se acercaran a la diva. Luego de la charla con “Robertito”, Susana partió rápidamente a su camarín para cambiarse el vestido sumamente vistoso de Paco Rabanne que eligió para el debut y dirigirse a otro set para compartir un encuentro con sus colaboradores y técnicos y celebrar el regreso.

Madrugada en Martínez

Cerca de la una de la mañana, los fanáticos de María Becerra corrían de una puerta a otra del canal intentando interceptar el vehículo en el que la cantante abandonaría las instalaciones de Telefe. “Ahí sale”, gritó una seguidora y una decena de jóvenes corrieron a los gritos interrumpiendo el silencio que ya reinaba en esa zona residencial de Martínez.

Para ese momento, las rejas del canal ya estaban cerradas. Concluía una jornada extensa donde toda una compañía estuvo al servicio del estreno de su máxima figura. La diva que, lo primero que dijo al salir al aire fue “vieron que flaquita estoy” y disparó algunas bromas sobre su edad. A los 80, Susana revalidó sus títulos a su modo, con su estilo, con una infraestructura que hoy solo ella cuenta en la televisión abierta.

Restan tres meses de temporada y una gran incógnita sobrevuela e inquieta a los directivos de Telefe. ¿Se tratará de la despedida de la diva de la televisión? La decisión está en sus manos. El rating, al menos anoche, confirmó que hay Susana para rato.

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