La hora del recreo, a puro ímpetu
Emilia Attias aún no se luce al frente de Re.creo en vos, rutinaria estudiantina para las tardes de El Trece
Re.creo en vos , programa de entretenimientos para adolescentes. Conducción: Emilia Attias. Locución: Leto Dugatkin. Producción ejecutiva: Martín Rodríguez Denegri. Dirección: Gustavo Peduto. Producción general: Mariano Chihade. Una producción de Mandarina. Por El Trece, de lunes a viernes, a las 18.30.
Nuestra opinión: regular
Todavía queda por verse si las afinidades entre esta flamante producción y Casi ángeles van o no más allá de la crónica autorreferencialidad que la TV de aire ya convirtió desde hace un tiempo en epidemia.
Pero en un punto ligado a esta potencial querella a estas alturas no hay lugar para las dudas: después de ver Re.creo en vos , queda claro que a Cris Morena la asiste toda la razón cuando dice que ve allí "desprotegida" a Emilia Attias. En su caso, ponerse al frente de este proyecto -afín a tantas otras estudiantinas televisivas recientes y armado sólo para edificar desde allí un rápido combo de videos, grabaciones y merchandising- resulta a primera vista una involución.
La desenvuelta protagonista de Casi ángeles fue transformada a la fuerza en conductora, un título demasiado holgado si tenemos en cuenta que se limita a anunciar el tránsito entre las diferentes secciones, a superponer su voz con la de un omnipresente locutor (recurso que funciona muchísimo mejor en 3, 2, 1... ¡a ganar! ) y a repetir la muletilla "¡Me encantó!", todo con un permanente tono eufórico que jamás sabe de pausas. Planteadas así las cosas, hasta aquí el mejor atributo de Attias es su capacidad de resistencia física para sostener por algo más de una hora diaria semejante ímpetu.
Queda ajena a ella la posibilidad de cambiar climas, manejar expectativas, romper rutinas establecidas o darle alguna impronta propia al programa. Cualquier otra persona podría ocupar ese lugar sin que el mecanismo sea afectado en lo más mínimo.
Por eso, como si estuviese todo el tiempo en una cinta transportadora, Attias no hace más que poner en movimiento el dispositivo de un programa que funciona todo el tiempo en piloto automático, al ritmo de los ya clásicos y coloridos juegos para adolescentes con porrazos y mojaduras incluidas, y separadores con forma de videoclips en los que un grupo de chicas y muchachos muestran tanto desenfado para bailar y cantar (después del consabido backstage ) como incapacidad cada vez que les toca hacer algún comentario.
El premio mayor -difícil de alcanzar, por lo visto hasta aquí- es un automóvil. Mientras los competidores tratan de llegar a ese objetivo, los chicos y chicas del elenco estable se meten en otra competencia (el armado y mantenimiento de una especie de bar), lo que habla de metas dispersas y bastante confusión. Tanta como la que muestran los propios participantes: en un momento, cuatro de ellos no supieron responder qué se festejaba el 9 de Julio.
3,2
puntos
- Desde el comienzo no tuvo un rating favorable y anteayer quedó lejos de Casi ángeles