El nacimiento de una nación, en el Oeste

"Deadwood, pueblo corrupto", drama creado por David Milch. Con Timothy Olyphant, Ian McShane, Brad Dourif, Keith Carradine. Los martes, a las 22. Por Fox.

Un joven sheriff (Timothy Olyphant), que ha perdido las ilusiones en el Oeste norteamericano, decide comenzar una nueva vida como dueño de un almacén de ramos generales junto a su socio. El único error de cálculo de Seth Bullock es instalarlo en Deadwood, un pueblo construido ilegalmente en tierras que, según la letra de la ley, no pertenecen a los Estados Unidos, sino a los sioux, a quienes sus pobladores (dedicados a todas las ramas imaginables del delito) han mantenido alejados desde el momento en que se desató una fiebre del oro en las cercanías.

La llegada del incorruptible Bullock coincide con el arribo del legendario pistolero Wild Bill Hickok y, rápidamente, la verdadera autoridad del pueblo, Al Swearengen (el magnífico Ian McShane) dueño del único bar, burdel y casino de Deadwood, quien maneja con mano de hierro todos los negocios -por lo general, ilegales- comienza a darse cuenta de que los tiempos están cambiando.

Esta serie se centra no sólo en la creación de un pueblo -y, por extensión, la del nuevo Estados Unidos luego de la Guerra de Secesión-, sino también en las complejas relaciones entre el poder y la ley, en una sociedad que está descubriendo su propia identidad y ambiciones. El notable ciclo de David Milch es una de las obras más impiadosas y ferozmente personales de esta temporada, así como una línea de puntos que une un pasado pragmático con un futuro delineado por sus decisiones.

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