El Canal 7 que tenemos hoy
La directora sostiene que por fin se consiguió una televisión pública de calidad
A diez meses de tomar a su cargo la dirección de Canal 7, más serena y asentada en su función que en aquellos días de fines de mayo del último año, cuando asumió, Rosario Lufrano reflexiona sobre lo que se hizo en este tiempo.
“Lo primero que hay que marcar es que diez meses para un canal es un tiempo inexistente. Sin embargo, en ese lapso, en primer lugar conseguimos traer al plano de lo concreto el concepto de televisión pública. Esto aporta a una revalorización de lo público en nuestro país que fue muy maltratado. Creo que es momento en la Argentina de hacer justicia y darle a lo público el lugar que se merece”, empieza diciendo.
“La importancia de los medios públicos radica en que permite que todos los ciudadanos del país puedan tener acceso libre y gratuito a lo que emiten”, argumenta más adelante, y cuenta que una de las tareas importantes que se pusieron en marcha durante este tiempo es la instalación de repetidoras que permitan la llegada de la señal por aire a todo el territorio de la república. “El 5 de febrero ya se inauguró la primera en Mar del Plata. La idea es llegar realmente a todos lados por aire, porque hay gente que no se puede pagar un cable y nuestra obligación es darle la posibilidad de que pueda recibir nuestra señal sin inconvenientes. El plan tiene prevista la puesta en marcha de otras 17 repetidoras nuevas durante este año”, señala.
Contenidos necesarios
Al mismo tiempo, Lufrano reconoce que con llegar a todas partes no alcanza. “Junto con eso, viene la cuestión de los contenidos con los que se va a llegar. En este sentido, hacemos primar el objetivo de hacer una televisión que informe, eduque y entretenga, pero con un criterio diferente del de un canal comercial. Nuestra misión es hablarles a todos los habitantes de la Argentina. Por ello apuntamos a una programación sobre la base de criterios federales, que también refleje lo que pasa en la región continental en la que está el país.” Como ejemplo de los criterios federales que posee la programación, nombra a Estudio país, el programa que conduce Juan Alberto Badía de lunes a viernes, de 14 a 16. “Es una experiencia inédita en nuestra televisión. Todos los días, durante dos horas, tenemos en el estudio a un comunicador por cada provincia, en contacto con su lugar de origen, que cuenta qué pasa allí, cómo viven, cuáles son las costumbres de ese sitio”, dice entusiasmada. En cuanto a reflejar contenidos regionales del continente al que pertenece el país, cuenta los convenios que tiene el canal con la señal Telesur y con el Canal 5, emisora pública del Uruguay.
Además de esto, la directora de Canal 7 recuerda que en los últimos meses se renovó casi por completo el equipamiento tecnológico con el que cuenta la emisora. “Es muy notoria la luminosidad que tiene hoy la pantalla del canal, cosa que no era posible con las cámaras alemanas de 1978 con que se contaba antes y que nos hacían aparecer a todos unos cuantos años más viejos de lo que somos”, dice bromeando. “Esa llegada de la herramienta vino muy bien, pero a esa herramienta la estamos usando para generar contenidos con el lineamiento de que sean prestigiosos y de calidad. Hace unos días nos llegaron las conclusiones del estudio con el que la Universidad Austral mide el índice de la calidad televisiva, y ubica a Canal 7 en segundo lugar después de Canal 13. Para nosotros, ése es un aliciente y nos indica que estamos en el buen camino”, opina luego.
A la entrevista con Lufrano se sumó Martín Bonavetti, miembro del equipo que acompaña a la directora en el cargo de gerente artístico del canal. A la pregunta de LA NACION sobre su visión de lo que se logró en los diez meses de gestión, Bonavetti coincide con Lufrano: “El mayor logro es que después de mucho tiempo en este canal se están pensando contenidos que respondan a un concepto de televisión pública y apuntando a un parámetro de calidad. Consolidar eso lleva un tiempo, pero lo estamos haciendo con un ritmo bastante bueno”. En cuanto a la pregunta acerca de si existen elementos en el funcionamiento del canal que impiden que las cosas vayan más rápido, el gerente artístico sostiene: “El canal tiene sus particularidades en cuanto a funcionamiento. Venimos de mucho tiempo en que se usaba muy poco de su capacidad operativa y eso requiere que cuando la querés poner en marcha a pleno haya que desentumecer algunos músculos. Ahora estamos usando el 85 por ciento de esa capacidad operativa. Vamos a un buen ritmo. No vamos lento”.
Finalmente, estando en un año electoral, Lufrano adelanta que eso no va a modificar sustancialmente lo que se viene haciendo. “Las campañas van a verse expresadas en la pantalla del canal a través de los noticieros. Estamos pensando, además, algún programa en el que puedan aparecer las distintas propuestas. Algo similar a lo que se hizo en las últimas elecciones, en la que se convocó a todos y vinieron los que quisieron venir”, detalla Lufrano, quien dice que no falta mucho para cambiar el logo, la medida que prometió que sería la que tomaría sólo cuando lo importante estuviera modificado.
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