90 días o menos, el insólito programa de Darío Barassi y Dalia Gutmann que superó su propia profecía

Cualquier productor que piense en la posibilidad de realizar un programa de entretenimientos en la TV de hoy, seguramente barajaría el nombre de Darío Barassi como uno de sus posibles conductores. Y es que el actor, impuso un estilo en 100 Argentinos Dicen que le dio buenos resultados en materia de audiencia y lo ubicó entre los más queridos por el público.

Pero en la carrera del conductor hay un “talón de Aquiles” que pocos recuerdan. Allá por el año 2014, Canal 9 puso en el aire un programa que iba a ser la transición entre el final de Implacables, conducido por Susana Roccasalvo y Carlos Monti, y la llegada de lo que sería el estreno de Combate.

90 días o menos nació, como su nombre lo indica, con los días contados. El 3 de febrero de 2014, Darío Barassi y Dalia Gutmann se pusieron al frente de este ciclo de verano acompañados por Daniel Gómez Rinaldi y Marcelo “Teto” Medina.

Lejos del estilo más formal de Monti y Roccasalvo, los conductores bromearon desde el comienzo con el título del envío. “Bienvenidos a 90 días o menos, el programa con el futuro más promisorio de la TV. No, provisorio de la tele...”, se corrigió en broma el locutor del ciclo para luego continuar: “Con la conducción de esta chica... Ay... la mujer de Sebastián Wainraich y el otro, el gordito de AM”. Sí, así de frontal y graciosa fue la presentación programa, que jugaba desde el vamos tanto con la condición de antihéroes de sus conductores como con el efímero futuro del programa.

En la apertura hicieron un sketch en el que parodiaron la propuesta de Canal 9 y, al mejor estilo stand up, Barassi advirtió a los televidentes que arrancaban “un fracaso con fecha provisoria”. Y agregó: “No se encariñen, y es más, si lo estás viendo y querés cambiar, dejalo”.La estructura era la típica de un programa estival con la cobertura de la temporada de verano, más algunos informes de color. Lo distintivo del ciclo, claro, era tener dos humoristas -y dos muy especiales- al frente de la conducción. Gutmann bromeó en el debut con el motivo de por qué los eligieron. “No pueden creer, esto es real, es la vida. Necesitaban dos personas sin laburo, a mí me rajaron la semana pasada de uno. Querían gente sin trayectoria, sin nada que perder, así que es un orgullo, gordo, que estemos acá”.

“No sabemos si vamos a estar al aire mañana. A remarlo, a bancarlo”, agregó Barassi, mientras mostraba un gran contador con los días, horas y minutos que le quedaban al programa.

El envío también proponía juegos como adivinar qué llevaba Dalia en su cartera, o un móvil de exteriores con público presente para que los integrantes del piso adivinen qué tatuaje se hicieron. Sin un rumbo definido, con invitados en el piso y secciones varias, el ciclo hizo lo que pudo en una televisión que ya en ese momento no daba demasiado margen a la improvisación.

A pesar de tener una fecha límite, el programa no llegó ni a cumplir ese tiempo en el aire. Sólo tuvo 48 emisiones y el promedio que logró fue de 1.6 puntos. La marca más alta, fue el 13 de febrero cuando alcanzó un rating de 2.6 puntos y la más baja fue el 7 de abril cuando marcó magros 0.7 puntos.

“No quedan 12 días, queda solo uno. Basta de caretearla chicos, ¿es un chiste, cuál es la alegría?, Poneme música de despedida. Ni siquiera llegamos a los 90 días, eso habla muy mal de nosotros”. De esta manera Barassi se despedió del programa el 21 de abril con una experiencia que para ellos fue enriquecedora más allá de los resultados.

Otro año marcado por un Mundial

En 2014 el ganador fue Tele con un promedio de 8,9 puntos de rating, mientras que el segundo lugar fue para El Trece, con 7,6 puntos. Tercero se ubicó América con 4,4 y en cuarto puesto quedó Canal 9 con 4,2. La Televisión Pública, obtuvo un promedio de 3.2, la mejor marca de los últimos 11 años, gracias a la transmisión del Mundial de Fútbol en Brasil.

El interés mundialista potenció el encendido de la TV de aire que alcanzó los 30.9, el más alto desde noviembre de 2012. La final entre Argentina y Alemania del domingo 13 de julio de 2014 tuvo un rating de 52,77 puntos, según cifras de Kantar Ibope Media. Estos números trajeron un poco de alivio para un año que arrancó en enero con el promedio más bajo en materia encendido de los últimos 11 años.

También explotó la fiebre por Avenida Brasil, novela que terminó siendo clave en la por entonces peleada disputa por el rating anual. Probablemente, el éxito de este culebrón fue además el puntapié inicial para la llegada de las latas extranjeras. La historia de una niña que quedaba huérfana y su madrastra Carminha la abandona en un basural, provocó en la Argentina el mismo fenómeno que en los otros 90 países donde se emitió. El capítulo final de la telenovela obtuvo un rating promedio de 27,1 puntos, con una transmisión con los protagonistas en el Luna Park.

Un año después llegó a la pantalla de El Trece Las mil y una noches, que se convertiría en la punta de lanza de las novelas turcas en la Argentina, inaugurando un fenómeno de audiencia que aun hoy sigue vigente, y con mucha fuerza, en nuestro país.

En cuanto a Darío Barassi, su revancha la tiene en estos días con su vuelta a la pantalla de El Trece. Su labor al frente de 100 Argentinos Dicen lo convirtió en una de las figuras más frescas y queridas de los últimos tiempos en la TV local.

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