Una historia de vida fuerte y conmovedora
Su unipersonal es un elocuente canto de posguerra
Hace diez años, Marzenka Nowak asomaba, en la escena porteña, con un conmovedor unipersonal: Marzenka , un canto de posguerra. Creado junto con el director Manuel González Gil y con música de Claudio Martini, el proyecto mostraba un recorrido singular, el de una niña, hija de uno de los líderes de la resistencia polaca durante la Segunda Guerra Mundial, hasta llegar a este país cuya realidad ponía fin a duros momentos de sufrimiento.
Nowak se animó, entonces, a contar su historia y la de su familia, en un trabajo conmovedor en el que no faltaban ciertas canciones que resultaban fundamentales para completar un discurso escénico. Es más: la obra comenzó a gestarse cuando la actriz extrajo de sus recuerdos algunos temas musicales que tenía muy guardados. Luego llegaron los textos.
En los últimos meses, una amiga contactó a la intérprete con los programadores de la sala Hugo del Carril, que pertenece al sindicato de la Uocra, y asomó la posibilidad de reponer aquella experiencia, gratis. La conmoción fue mucha. Volver a contar su historia le causaba dolor, pero de inmediato se dio cuenta de que ahora, con diez años más, podía recuperar esos fragmentos de su pasado desde otra perspectiva. "Es que he podido tomar cierta distancia de aquellos acontecimientos -cuenta la actriz-, y si antes el espectáculo era muy doloroso para mí, ahora debo decir que lo transito con melancolía. Cuando lo estrené, sentí que me sacaba de encima una pesada mochila. Hoy me parece que esta historia puede ayudar a mucha gente a comprender ciertas cuestiones que han pasado y que, desgraciadamente, siguen pasando. En el mundo sigue habiendo odio, guerras, gente que debe escapar de su patria en busca de un destino mejor. No puedo asegurar que mi historia sirva de algo; no sé si el teatro tiene ese objetivo. Creo que es bueno saber lo que pasó, reflexionar sobre eso y tener esperanza."
En el último tiempo, a Marzenka Nowak se la ve en pocas oportunidades sobre un escenario. Su carrera siempre ha sido muy intensa (ha participado en 50 espectáculos teatrales), aunque sus apariciones, esporádicas. La última vez que formó parte de un proyecto fue hace un año y medio, en Herr Klement, de Patricia Suárez y Leonel Giacometto, con la dirección de Alejandro Ullúa (además de haber hecho un coprotagónico en No mires para abajo , film de Eliseo Subiela). "Me gusta mucho actuar, pero no soy de buscar trabajo. En eso me siento una inservible. Cuando otro me da la posibilidad la disfruto a pleno. Creo que tiene que ver con mi historia personal y la de mi padre. Salir y ocultarse es mi conducta. Hago algo y desaparezco". Pero sus apariciones siempre resultan muy significativas, como seguramente sucederá con la reposición de Marzenka .
Para agendar
Marzenka , dirigida por Manuel González Gil.
Sala Hugo del Carril , Rawson 42. Sábados, a las 20.30. Entrada libre y gratuita. Informes: 4981-0139.
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