Teatro en Buenos Aires: en medio de la incertidumbre, apuesta a sumar títulos
Apostando al público de Semana Santa, vuelve el éxito de Una semana nada más a la calle Corrientes, mientras que la escena independiente también ofrece nuevas obras
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La segunda ola del coronavirus, las medidas que están anunciado tanto el gobierno nacional como las administraciones provinciales como el levantamiento de las funciones en el cine Gaumont –ya reabierto– generaron y generan inquietud en el sector tanto para los artistas como para el público. Pero la temporada teatral porteña continúa y, como viene sucediendo desde el 15 de noviembre, cuando se habilitó la actividad musical y teatral en salas, se siguen sumando títulos. “El cierre de estos días del cine Gaumont generó confusión, pero hay que dejar en claro que en ese caso se tratan de trabajadores estatales que están comprendidos por las medidas del gobierno de apostar al teletrabajo en estos tres días previos a Semana Santa. Lo concreto es que no hay nada que indique que las funciones de teatro y música en salas cerradas sea una actividad insegura”, apunta el productor Carlos Rottemberg en diálogo con LA NACION.
Hay varios indicadores que lo ayudan a afirmar lo dicho. En el centro de testeos para artistas y trabajadores escénicos que funciona en el Teatro Colón menos del 1% testearon positivo para Covid-19. Y otra foto de esta película tan compleja: en su primera salida social durante la pandemia, el ministro de Salud de la Ciudad de Buenos Aires, Fernán Quirós, eligió ir al teatro. El fin de semana asistió a la función de El acompañamiento, que protagonizan Luis Brandoni y David Di Nápoli. Para el momento del aplauso final, Brandoni, irónicamente, se refirió a la cantidad de protocolos que todos deben cumplir para enfrentar los tiempos que corren. “Dedicamos nuestro trabajo de esta noche al ministro”, apuntó el actor, mientras toda la platea del Mutiteatro Comafi dirigió sus aplausos el funcionario que estaba en la platea.
Esta semana, en las salas de Rottemberg habrá 18 funciones más que en la anterior. Aprovechando Semana Santa se suma a la cartelera otro éxito probado: Nicolás Vázquez y Benjamín Vicuña reponen Una semana nada más, en El Nacional. Esta vez, estarán acompañados por Gimena Accardi. Mientras tanto, para la primera semana de abril se sumará otro título: Dos locas de remate, con Soledad Silveyra y Verónica Llinás, en el Astral. “Lo importante de todo esto es que se van sumando títulos mientras no baja la media de espectadores de los que ya estaban en cartel. Yo creo que el secreto es que la gente va comprobado que el teatro es seguro, que el protocolo funciona”, apunta el experimentando productor.
En el centro de testeos para artistas y trabajadores escénicos que funciona en el Teatro Colón, menos del 1% resultaron positivo para Covid-19.
Por fuera de eje de la avenida Corrientes, la escena alternativa, la más perjudicada por el escenario pandémico, que ya ha hecho que varias salas tuvieran que cerrar, también suma obras en escena. En el renovado Moscú Teatro, la sala de Villa Crespo que tuvo que postergar su reapertura casi un año, agrega a su programación dos obras que se presentan los sábados: Captura de aves silvestres, con dirección de Ignacio Torrés; y Nicolás anda, con Nicolás Stupenengo, y dirección y dramaturgia de Nahuel Martinez Cantó.
Más allá de los límites de Almagro/Villa Crespo, algo así como la avenida Corrientes del circuito independiente, esta semana vuelve a ponerse en funcionamiento Que Tren Club Cultural, que venía de ser una de las sedes del Bafici. En la cancha de fútbol 5 de Olazábal al 1700, pleno Barrio Chino, que linda con las vías del ferrocarril Mitre, los viernes suben al tablado los monólogos de los Sutottos, el dúo que conforman Andrés Caminos y Gadiel Sztryk que en octubre habían entrado en modo streaming; y Érase, los fascículos coleccionables de Gustavo Tarrío con Mónica Cabrera, Marcos Krivocapich, Milva Leonardi, Nico Levin y Carolina Saade. En la cancha de fútbol convertida en espacio cultural, cada sábados por la noche tocan Flor Ruiz y el Mono Fontana, celebrando sus veinte años de trabajo en conjunto.
En medio de la incertidumbre, la actividad teatral, con enormes dificultades, sigue intentando recuperar terreno.
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