Medio siglo de farándula
Así empezó la cuestión / Autor y director: Raúl Ramos / Intérpretes: Víctor Hugo Vieyra, Raúl Ramos, Sebastián Codega y Paula Trucchi / Sala: El Portón de Sánchez, S de Bustamante 1034 / Funciones: domingos, a las 20.15 / Duración: 80 minutos / Nuestra opinión: buena
¿Cuándo debe retirarse un actor? No hay reglas fijas que indiquen cuándo hacerlo. Cada intérprete debe dilucidar, en el interior de sí mismo, esa fecha. Eso, si puede determinarlo con libertad y no son los propios hechos los que imponen su desplazamiento. En todo caso, esa decisión es siempre difícil, angustiante, porque el alejarse del contacto con el público, sobre todo si se es una figura muy popular, es un hecho que raramente se acepta con indiferencia. Esta obra de Raúl Ramos comienza un día que José Juan "Pepe" Podestá celebra sus 50 años de actuación y empieza, en medio de los aplausos, a pensar que el epílogo de su carrera ha llegado. Sin embargo, la pieza no es una meditación sobre esa decisión vital, sino más bien un homenaje al coraje de continuar en actividad aun en las etapas maduras bajo el empuje de la pasión. Se trata de una fantasía libre sobre los últimos años en la carrera de Pepe Podestá, figura central en el origen del teatro argentino y creador del drama criollo, que arranca en el momento en que siente declinar sus fuerzas y es "visitado" nada menos que por Juan Moreira, uno de los personajes míticos que compuso, para instarlo a recobrar el brío y a lanzarse por los caminos de la patria a refundar la escena nacional.
Con este pretexto, además de Moreira visitan al recordado creador de Pepino el 88 personajes que pertenecen a la galería de obras o etapas en las que actuó: el payaso inglés Frank Brown, el traidor Chirino, el viejo estafador Sardetti y muchos otros que describen pasajes clave del trabajo en las arenas del circo y en los teatros posteriormente. En ese ir y venir de pequeñas odiseas, que tienen a menudo cierto clima de ingenuidad inevitable -como era en las obras de esa época-, pero dotadas de una gran vivacidad y frescura, los cuatro intérpretes convocados despliegan sus saberes actorales. Con mucha experiencia y aplomo profesional Víctor Hugo Vieyra y Raúl Ramos (Podestá y Moreira); con gracia sin declinación Paula Trucchi en los roles femeninos, y a veces con acierto y otras no tanto en sus caracterizaciones Sebastián Codega. El vestuario es muy apropiado y el marco escenográfico sencillo: el mostrador de una pulpería y un telón de fondo desde cuya parte de atrás van surgiendo los actores. Pepe Podestá trabajó hasta los 70 años y vivió hasta los 78 (1858-1937). En su retiro encontró una agradable forma de soportar la nostalgia: escribió sus memorias con el título de Medio siglo de farándula. Una forma inteligente también de recuperar el pasado.