Humor y glamour desde Ibiza
Es argentino, pero trae Slipstick, su show internacional, por primera vez a Buenos Aires
"Te saludo con la mano, porque estoy todo sudado y lleno de maquillaje", dice Martín Kent, mientras baja del escenario para hacer una pausa en el ensayo. El actor argentino, que desde los 17 años vive en Ibiza y lleva sus shows a toda Europa y Asia, trae por primera vez a la Argentina su espectáculo, Slipstick . La obra, creación del mismo Kent, mezcla clown, clásicos del cine y música; una mixtura de homenaje y mucho humor. Esta propuesta nació a partir de una selección de partes de los trabajos que realiza el actor desde hace veintisiete años,
La mayor parte de Slipstick está hecho a partir de escenas de películas memorables, a cuyos personajes Kent le pone su impronta y los recrea. En algunos casos, une a los de la ficción con otros reales, y de esa simbiosis nace uno nuevo. "Amo el cine y el circo desde pequeño", dice quien se siente influenciado por el séptimo arte. La hipérbole es una de las características de Slipstick , y se hace evidente desde el maquillaje, el vestuario, la gestualidad. "Tengo mucha influencia del expresionismo alemán; por eso mi maquillaje por ejemplo", explica. Del movimiento alemán de principios de siglo le atraen los decorados, las caracterizaciones extremas. "Me gusta mucho comunicar con las emociones, con las miradas, sin palabras".
Entre las particularidades de Slipstick , el actor saca a escena parte del camarín para maquillarse frente al público, sin espejo. El espectador se convierte así en una especie de voyeur . "Me parece muy interesante que el público vea de entrada lo que hay detrás de todo esto", explica.
Dice que su transformismo es "con una vuelta de tuerca". "No me disfrazo de mujer por disfrazarme, sino que hay un motivo más allá", explica.
En Slipstick abundan el color y la risa. "Es de un humor universal y quiero que sea siempre así; el idioma no tiene que ser una barrera", afirma. Por eso, en sus textos se mezclan distintas lenguas como el español, inglés, francés y alemán.
Durante noventa minutos, el actor hace unos veinticinco cambios de vestuario. Utiliza además diferentes pelucas, todas hechas de cáñamo, y unas llamativas pestañas postizas que confecciona él mismo.
Parte de la escenografía que se verá en la obra es la misma que utiliza en sus presentaciones en Europa. Además, integra elementos multimedia y muñecos, con los que interactúa y se mezcla a medida que transcurre la historia.
Martín Kent estará los viernes y sábados, a las 22.30, en el Margarita Xirgu (Chacabuco 875).