En streaming: la iniciativa de Banfield Teatro Ensamble

Desde que la actividad escénica entró en modo pausa por el coronavirus se empezaron a poner en práctica modos y costumbres muy alejados de las prácticas habituales del rito teatral. Algunos creadores (Ricardo Bartís, Alejandro Tantanian), algunas salas públicas (Complejo Teatral de Buenos Aires, Teatro Nacional Cervantes), algunas salas alternativas (Timbre 4, El Extranjero) subieron espectáculos para ver online.

Al inicio de la cuarentena ese modo de consumo virtual acaparó la atención de curiosos. Con el correr de los días simultáneamente algunas voces alertaron de los efectos de la saturación que se podría generar. "En este afán de seguir presentes, de querer compartir, de intercambiar nuestros trabajos, de llegar a más gente, peligran los principios esenciales de una experiencia teatral. Entre otros aspectos, la saturación de contenidos termina achatando las diferencia entre los mismos", afirmaba hace unos días el bailarín y performer Iván Haidar, quien desde 2013 hizo suya la idea de realizar obras en streaming,

Paralelamente algunas salas (Timbre 4, El Picadero) lanzaron un modo de compra de entradas a futuro como manera de solventar los gastos fijos de esas salas, tanto comerciales como alternativas, que están atravesando una crítica situación económica. Por fuera de ese parámetro algunos creadores se refieren a este tiempo tan particular como Teatro Líquido, Teatro Pandémico, Teatro de Excepción. Toda la actividad escénica como el pensar a la actividad en estos tiempos entró en un plano no transitado hasta el momento.

Banfield Teatro Ensamble (BTE), subió su programación a la página de esta sala fundada hace 23 años por el actor, dramaturgo, director y gestor cultural Nelson Valente, el mismo que en ese mismo lugar estrenó El loco y la camisa, esa obra de culto que, hasta antes de la cuarentena, estaba en cartel en El Picadero. Su primera reacción ante la cuarentena fue de susto. El desafío de mantener la sala ubicada en el ímite entre Banfield y Lomas de Zamora (Larrea 350) que cuenta con tres para entre 30 y 300 personas, una galería de arte, un restaurante, 40 empleados y enorme gasto fijos en cierto modo lo paraliza. "Pero al día de hoy noto varios avances", comenta el talentoso director que viene de hacer su primera compra de casa luego de 10 días. Es que a la práctica de subir contenidos propios de obras, espectáculos de stand up, de café concert y de música le sumaron un plus.

"Decidimos mantener los horarios habituales y mantener los ciclos programados pero apelando al vivo. Buscamos los medios tecnológicos para reproducir esa obras que son pensadas durante la semana para las funciones de jueves, viernes y sábados. O sea, el mismo procedimiento que aplicábamos antes solamente que adaptamos los argumentos a la situación actual", apunta quien utiliza la plataformas Zoom para resolver tanto los ensayos como la necesaria relación de copresencia entre los artistas de los elencos y agrupaciones musicales que se transmiten en vivo.

Los ciclos que actualmente pueden verse en vivo por Instagram y en la cuenta de YouTube de Banfield Teatro Ensamble son los de Stand up interactivo, los días jueves, a las 21; el de Café concert, los viernes, a la misma hora, y los sábados, a las 23; y el de Música que se transmite los días domingos, a las 21. Todos esos contenidos luego quedan colgados a plataforma de YouTube. Ya hay parámetros para evaluar esta experiencia inédita en una sala alternativa de la región que acaba de iniciarse: el ciclo de café tuvo unas 12 mil vistas frente a las 500 de contenidos de archivo, las seguidores en las redes de la sala aumentaron y en términos de recuadación la boletería virtual de la semana pasada la emblemática sala se alzó con 65 mil pesos. De yapa, accedieron a un público del interior y del exterior.

"Tengo en claro que ver teatro en video es un plomo -apunta el talentoso y premiado director-. Por eso de un principio, luego del susto, insistí en producir los ciclos haciendo eje el el humor porque considero que la comicidad es una herramienta válida para este tiempo y una manera de sacar a la gente del seguimiento de la noticia del coronavirus. Por eso mismo, más allá de las medidas que se tomen de prevención, la idea es continuar con el ciclo. Ahora mismo estamos evaluando que en durante el horario de función el público pueda pedir la comida al restaurante del Ensamble como hacía mientras veía los ciclos de café concert o de stand by".

En otras regiones ya hay experiencias similares a las del Banfield Teatro Ensamble, En Madrid, el Teatro de la Abadía posee un ciclo que llama Teatro confinado en que artistas interpretan obras desde sus casas para 20 espectadores conectados todos entre sí por videollamada a través de la plataforma Zoom. En Estados Unidos, la serie de monólogos The 24 Hour Plays, que ya existía sobre los escenarios, se ha trasladado a Instagram apelando a temáticas relacionadas con la vida cotidiana de la cuarentena. Y en Reino Unido, el actor y dramaturgo Robert Myles creó un grupo de lectura para actores profesionales y aficionados para interpretar en directo en YouTube las obras completas de Shakespeare en el orden en que se cree que fueron escritas.

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