El mérito de buenas actrices
"Chicas católicas", de Casey Kurtti. Traducción: Miguel Abeledo Peñeyroa. Con Julia Calvo, Fabiana García Lago, Verónica Llinás y Vanesa Weinberg. Escenografía e iluminación: Gonzalo Córdova. Vestuario: Romina Martínez. Dirección: Alicia Zanca. En el Picadilly.
Nuestra opinión: Bueno
En cierta forma, "Chicas católicas" es otra obra de mujeres. Como lo fueron "Confesiones de mujeres de 30" o "Monólogos de la vagina", por nombrar a algunas. La afirmación no sólo tiene que ver con el hecho de tratarse de una pieza protagonizada por mujeres, sino con un tipo de propuesta que maneja cierto contenido ideológico (en general, de espíritu progresista), en la que el juego escénico es clave y en la que el material entabla una relación muy cercana con el público.
Pero ya en esta mínima reseña se presentan algunas diferencias en relación con el "género" mencionado. Por empezar, el texto de Casey Kurtti es sencillamente pobre. La obra propone seguir irónicamente el recorrido de cuatro niñas, desde que comienzan el primer grado en un colegio católico hasta la fiesta de despedida. Pero el desarrollo y las reflexiones de tono crítico-irónico hacia la institución religiosa son poco significativos.
Quizá conscientes de las limitaciones, las actrices y/o la directora (responsabilidad no especificada en el programa de mano) ubicaron a la trama en nuestro país (en el original, la acción transcurre durante la década del setenta, en los Estados Unidos). De este modo, salpicaron la propuesta de divertidas referencias culturales (canciones, modas, publicidades, giros idiomáticos) y algunas referencias a hitos políticos institucionales, como la muerte de Juan Domingo Perón o el Mundial 78.
Pero, al haber respetado la época en la que transcurre la acción en el original, hace que estas cuatro chicas cursen su primaria durante una de las épocas más sangrientas de nuestro país. En cuanto a este dato "menor", llamativamente la obra mira hacia otro lado (a lo sumo, casi al final intenta resolver el olvido con un texto que hace hincapié en la prohibición como tal). Eso sí, la obra maneja una certeza: que la educación católica -o la que se aplicaba en ese colegio- era sencillamente reaccionaria y que, en términos pedagógicos, ninguna de las hermanas a cargo de la educación de estas blancas palomitas (no tan blancas porque usan jumpers) había leído a Jean Piaget (y muchos menos a Paulo Freire, pedagogo de moda en los setenta, pero demasiado de izquierda para el colegio en cuestión).
Ellas, las chicas
Claro que la vitalidad del espectáculo recae en el trabajo actoral de un talentoso cuarteto que alternativamente hace de las niñas y de las monjas que las educan. Ellas son Verónica Llinás (la ex Gamba al Ajillo que, en los ochenta, tenía un número disparatado vestida de monja), Vanesa Weinberg (ex Las Hermanas Nervio, que brilló en "El aire alrededor"), Julia Calvo (recordada por su trabajo en "Padre Coraje") y Fabiana García Lago (otra labor clave actoralmente de esa novela).
En la selección del elenco radica el primer acierto de esta producción que se acaba de estrenar. En lo que se refiere a la dirección de Alicia Zanca, se percibe que todo el tiempo propuso situaciones para potenciar el aspecto lúdico que requiere este tipo de emprendimiento. Y aunque por momentos algunas marcaciones o interpretaciones están muy exageradas (como los rasgos infantiles de los personajes de Calvo y García Lago), el trabajo tiene algunas escenas disparatadas, como cuando cantan una canción de Abba. Las cuatro actrices poseen una fuerte comicidad y el público agradece la entrega. Hasta está bien resuelto el cambio en la postura física y los tonos de voz de los personajes cuando llegan a la adolescencia.
El resto de lo que hace a la puesta es dispar. Si bien el vestuario de Marianela Gómez tiene su vuelo, no sucede lo mismo con la iluminación y escenografía de Gonzalo Córdova, que es tan chata como el texto mismo.
Temas
- 1
- 2
Le hicieron una broma de mal gusto a Santi Talledo con Michael Bublé y terminó de una forma inesperada: “Mi héroe, te amo”
- 3
El teatro independiente “invadió” la Calle Corrientes, un fenómeno convocante que llegó para quedarse
- 4
En fotos: de la atlética tarde de playa de Nicole Kidman al impresionante anillo de brillantes de Jennifer Garner