El mejor socio del genial Mel Brooks
El autor de Annie, Los productores y Hairspray, vino a ver su última obra: El joven Frankenstein
Tan fascinado estaba con Buenos Aires que se perdió por la ciudad haciendo compras y llegó a la entrevista con LA NACION, unas veinticuatro horas después. Thomas Meehan estuvo en Buenos Aires para ver la primera versión de El joven Frankenstein que se hizo fuera de su país. Es el coautor del libro, junto a Mel Brooks, con quien también hizo Los productores . Pero Meehan, se hizo célebre en Broadway, mucho antes de estos trabajos mencionados: en 1977, cuando estrenó la comedia musical Annie . Por ella ganó el Tony y se metió de lleno en el trabajo más humilde de esta forma de teatro tan colaboracionista: el autor del libreto.
-¿Disfrutó de la producción argentina de El joven Frankenstein ?
-Sí, es muy divertida y distinta a la de Nueva York. Esta tiene más corazón y es más emotiva. Creo que eso se debe a las actuaciones, especialmente el protagonista, que es fantástico. Es diferente, pero es mejor, en cierto sentido. Prefiero esta versión. Le voy a contar a Mel Brooks y a nuestros directores lo que vi en Buenos Aires, y les voy a sugerir que hagan ciertos ajustes que puedan ayudar a la puesta que allá está de gira.
-¿Vendrá a verla Mel Brooks?
-Desde que su esposa, Anne Bancroft, murió, hace cuatro años, no viaja demasiado. Va a cumplir 83 años.
-¿Cuáles eran sus expectativas antes de llegar a la Argentina?
-Era optimista porque escuché que Los productores fue una producción brillante, con un gran suceso. Por lo tanto, era optimista y estaba esperanzado, pero esto superó mis expectativas. Además me entusiasmaba venir a Buenos Aires.
-¿Sabía que en esta ciudad hubo cuatro producciones suyas? Annie, Hairspray, Los productores y El joven Frankenstein .
-Sí. Me enteré que hay negociaciones para reponer Annie . Es mi primera obra, así que es mi favorita. Esa niñita me ayudó mucho en la vida.
-¿No es ingrato el trabajo del libretista de un musical? La gente recuerda las canciones.
-Debe ser una buena historia e interesante, pero el libro está en un segundo plano. Creo que lo más importante son las partituras. Cuando trabajás en un musical hay mucha gente que colabora entre sí: el director, los coreógrafos, los actores... Y eso es fundamental.
-¿Usted trabaja por separado o con todos?
-En Annie , trabajábamos los tres juntos, con Charles Strouse y Martin Charnin. En Los productores y El joven Frankenstein trabajamos juntos, con Mel Brooks. Mel ganó el Oscar como guionista de Los productores , pero, en realidad, nunca escribe. Lo suyo es hablar. Y yo escribía. Trabajamos con una secretaria que anota todo, durante tres o cuatro horas.
-No es fácil encontrar el momento indicado para poner una canción en un texto...
-Es verdad. Es más difícil de lo que parece. Uno tiene que escribir para momentos con distintas emociones, y esa emoción que explota es tan fuerte que se tiene que fusionar en una canción. Pero de modo tal que la canción fluya naturalmente con el diálogo. La canción tiene que lograr que progrese la trama.
-Entonces el libretista de musical es el más humilde de los creadores.
-Sí, pero si tenés éxito, te pagan bien (risas). Mi trabajo es como el de un artesano.
-¿Por qué esperó treinta años para hacer otro musical?
-No lo sé. Escribí un par de películas y algunos musicales que no tuvieron mucho éxito. Ahora estoy escribiendo un guión con el creador de Nine , Maury Yeston: The Death Takes Holidays ( La muerte se toma vacaciones ). ...l escribió una partitura muy bella y se va a estrenar el año próximo, en una gira.
¿Cómo fue trabajar con Mel Brooks? ¿Es una estrella? Se me ocurre que puede ser muy difícil decirle "estás cometiendo un error".
-Nooooo... Le puedo decir de todo porque nos conocemos mucho. Lo que sí te puedo decir es que a Mel no le gusta trabajar muchas horas. Creo que dos o tres horas por día es su límite. Pero es muy divertido trabajar con él. Recuerdo que cuando escribíamos Los productores nos moríamos de risa. Debe ser uno de los cuatro o cinco genios que conocí en mi vida. Te sabe leer la mente. Es como un doctor. Y sólo fue un año a la facultad, cuando estaba en el Ejército. No tiene una educación formal, pero es autodidacta.
-¿Suele disfrutar o sufrir cuando ve sus obras?
-Cuando están bien hechas las disfruto. Ahora están Los productores , en Berlín; Hairspray , en Londres; y El joven Frankenstein , en Buenos Aires.
-¿Tiene algún otro proyecto con Mel Brooks?
-Sí. Quizá hagamos Blazing Saddles , un western que está basado en una película que hizo Gene Wilder con Cleavon Little.
-¿Cuánto tiempo tarda en hacer un musical como El joven Frankenstein ?
-Como mínimo tres años. Es lo que llevó hacer Los productores. Hairspray , un poco menos, dos años.
-¿Y Annie ?
-¡Cinco! Desde 1972 hasta 1977. Porque no le gustaba a ningún productor. Todos decían: "Una obra con chicos, no es comercial". Nadie la quería. Hasta que un productor escuchó la canción "Mañana". Me dijo: "Iba caminando y no me la podía sacar de la cabeza". Entonces me llamó porque pensó que debería hacer la obra. Fue tan exitosa que me dio miedo.
-¿Qué más me podría decir de Guillermo Francella? Ni canta ni baila muy bien, pero es efectivo.
-Es verdad eso. Pero tiene alma. Es real. Creo que es lo que hace la gran diferencia entre la versión neoyorquina y esta.