Luego del suceso en el Luna Park, y de una gira programada por el interior del país, el musical de Cibrián y Mahler volverá a Buenos Aires para despedirse definitivamente en octubre
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“Y Drácula no se va, y Drácula no se va…”, terminó coreando el público que había asistido ayer a la quinta función de las nueve pautadas para despedir al famoso musical en el Luna Park, luego de que Ángel Mahler sorprendiera a todos –incluso al otro padre de la criatura, Pepe Cibrián Campoy, y a todo el elenco– con la noticia de que Drácula tendrá otra fecha de despedida definitiva y otro ámbito: será en octubre en el estadio Movistar Arena.
Si el público se manifestó gritando, los actores no le fueron en zaga y comenzaron a saltar, abrazarse y hasta llorar en grupos. Abajo y arriba del escenario la emoción era evidente y las ganas de compartirla, también. Así se suma un hecho más de festejo para un regreso muy esperado que, ya se sabe, estuvo en peligro varias veces por el distanciamiento que existió entre Mahler y Cibrián tras la temporada por los 25 años de Drácula, llevada a cabo en el Teatro Astral, en 2016. Ahora, con aquellas diferencias limadas, artistas y público pueden disfrutar de la celebración por los 30 años (que en realidad se cumplieron el año pasado, pero por cuestiones de la pandemia debió postergarse hasta el actual).
El suceso de esta breve temporada titulada Drácula 30 años, la despedida se veía venir en cuanto se pusieron las entradas a la venta, a mediados de diciembre. El interés del público fue inmediato, y por eso hoy no sorprende que durante las primeras cuatro funciones de las nueve programadas hayan asistido al Luna Park 12.800 personas, una cifra que sobrepasa cualquier cálculo positivo si se recuerda que se trata de un espectáculo teatral (y no de un recital de rock) y aún continúa la pandemia. Para este fin de semana, incluso, se esperan más espectadores que en la anterior, motivo por el cual debió agregarse una función extra mañana domingo, a las 15.30, siendo la última la de mañana a las 19.
Es por este semejante suceso que Mahler inició aceleradas negociaciones para volver al Luna Park luego de la gira que el espectáculo comenzará el próximo fin de semana en Mar del Plata. La idea era continuar con el fenómeno en la casa donde nació el proyecto y que fue sede del musical en otras cuatro ocasiones más, pero por cuestiones de agenda del estadio finalmente Drácula no podrá despedirse definitivamente allí. Lo hará en el Movistar Arena, el estadio que cuenta con una capacidad de hasta 15.000 espectadores, y a través de cuatro funciones. Las fechas exactas aún están en evaluación, pero serán a comienzos de octubre.
Si los intérpretes –entre ellos los protagonistas Juan Rodó, Cecilia Milone y Josefina Scaglione– aún no salen de su asombro por la noticia de ayer, lo que les espera hoy sábado tampoco será emocionalmente fácil de atravesar; ya que a la primera función asistirá Mirtha Legrand y a la segunda Paola Krum, la actriz que originalmente encarnó a Lucy (rol que hoy desempeña Scaglione) y que nunca dejó de ser recordada por su maravillosa labor (sobre todo si se tiene en cuenta que sólo tenía 19 años y era su primera experiencia en musicales).
Después de estas funciones en el Luna Park, y antes de la despedida definitiva en el Movistar Arena, el espectáculo se presentará por distintas plazas del país hasta mediados de septiembre. Al principio iban a ser unas pocas, en general ciudades capitales con una importante densidad poblacional. Pero después, ante la demanda intempestiva de otras localidades, el espectáculo extenderá mucho más de lo previsto su tour por el país. La primera parada será Mar del Plata, donde Drácula ofrecerá funciones durante toda Semana Santa (el 14, 15, 16 y 17 de abril, en el Teatro Radio City), la segunda Bahía Blanca (el 22, 23, 24 de abril, en el Teatro Municipal), la tercera San Nicolás (el 27 de abril, en el Teatro Municipal Rafael de Aguilar), la cuarta Paraná (el 28 de abril, en el Teatro Tres de Febrero), la quinta Santa Fe (el 29 y 30 de abril, en el Teatro Municipal 1º de Mayo). En mayo el musical se presentará el 6 en Santiago del Estero (en el Teatro 25 de Mayo), el 7 y 8 en San Miguel de Tucumán (en el Teatro Mercedes Sosa), el 9 en Salta (en el Teatro Provincial Juan Carlos Saravia), el 11 en Huinca Remanco (en el Teatro Cervantes), el 12 en Río Cuarto (en el Teatro Municipal), el 13, 14 y 15 en Córdoba (en el Teatro Libertador General San Martín) y el 20, 21, 22, 27, 28 y 29 en Rosario (en el Teatro Broadway). Luego, en junio, Drácula se presentará en Mendoza (el 2, 3, 4 y 5, en el Teatro Independencia), el 10 en Gualeguaychú (en sala a confirmar) y del 11 al 26 por distintas localidades del Conurbano bonaerense. En julio posiblemente hagan funciones en San Juan, La Pampa y algunas ciudades del sur del país, para después trasladarse a Montevideo, donde estarán el 19, 20, 21 y 22 (en el Teatro El Galpón) y concluir el mes en Carlos Paz, con fechas programadas el 27, 28, 29, 30 y 31 (en el Teatro Del Lago). En agosto y septiembre la gira continuaría por otras plazas aún por cerrar.
De esta manera la buena estrella de Drácula, que comenzó un 29 de agosto de 1991 con un Luna Park abarrotado de un público deseoso de ver por primera vez un musical nacional a gran escala, continúa dejando una estela que pareciera no tener fin. Sus creadores, Pepe Cibrián Campoy y Ángel Mahler dijeron ante LA NACION, hace ya unos meses, que la despedida final del musical serían las funciones que concluyen mañana en el estadio de Bouchard y Corrientes. Luego se sumó una gira y ahora se acaba de confirmar una despedida definitiva en Capital, pero en otro ámbito, el del estadio Movistar Arena para octubre. ¿Será ése el final-final de Drácula? ¿O, como siempre, la última palabra la tendrá el público?
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