Diego Corán Oria: un director de culto
Con una fuerte historia, es el creador de dos éxitos inusuales: La Parka y Alicia en Frikiland; hoy estrena Rinaudo..., pero como protagonista

Miríadas de colores. Música. Alegría. Tenía cinco años cuando vio un desfile de carnaval por primera vez, en las afueras de Mendoza, donde pasaba cada verano junto a su abuela materna, y se enamoró de esa pulsión provocadora de lo espectacular. Disfrazarse, inventar otros mundos y otros yos, se convirtió en algo intrínseco a su persona. "Era un caradura". Diego Corán Oria se divierte ahora, a los 31, cuando mira atrás y se engolosina con un sinnúmero de anécdotas graciosas de su infancia. Director, autor, actor y productor de sus obras, supo ganarse un lugar como uno de los hacedores de teatro musical off más destacados del momento. Este muchacho éxito es el creador de dos obras alternativas que despertaron un apasionado furor: La Parka y Alicia en Frikiland. Ambas, inscriptas en ese raro y exclusivo mote "de culto". ¿Cómo hace este muchacho de ideas certeras, alocadas, rimbombantes y divertidas que aman los jóvenes espectadores? Veremos.
Esta noche, Diego estrena una obra en la que por primera vez es el único protagonista: Rinaudo, el amor tiene razón, de los creadores de otro éxito del off: Embarazados, ecografía de una espera.
"Mis creaciones tienen que ver con grandes dolores", dice. Cuesta pensar que siendo tan joven y sonriente la vida pueda haberlo golpeado tanto. Sin embargo, su historia como artista tiene un trágico pistoletazo de partida: en 2003, cuando comenzaba a estudiar comedia musical en la Escuela de Julio Bocca y Ricky Pashkus, tuvo que enfrentar la inesperada muerte de su padre víctima de cáncer. Hacia fines del mismo año, recibió un tiro que lo atravesó transversalmente y lo dejó dos días en coma. Sobrevivió y creó La Parka, un musical que retrata el mundo de los muertos como una gran ironía sobre ese concepto desconocido e inevitable que es el final de la vida. La Parka no sólo fue un éxito seis veces reestrenado, sino que además se convirtió en un fenómeno de culto, al cosechar miles de fanáticos que ahora siguen ansiosos las nuevas creaciones de Diego y sus coéquipiers, Agustina Seku Faillace, Facundo Rubiño, Tadeo Jones, Roberto Peloni y Jorge Soldera, con quienes fundó el grupo Random Creativos, autores del suceso infantil de esta temporada, Alicia en Frikiland.
Su lema es "Dejar que la vida te sorprenda". Después de una larga charla con él, se pueden sumar algunas otras frases de la sabiduría popular que apuntalan su filosofía: "Tomar el toro por las astas", "Persevera y triunfarás" podrían completar su receta. Cuando supo que quería vivir del teatro, dejó la carrera de Comunicación a medio camino y se dispuso a lograrlo. "La vida es profunda; tiene dolor, pero también hay una responsabilidad propia de hacer que se aliviane. Me di cuenta de que el teatro es la excusa perfecta para disfrutarla", dice, aunque admite que le llevó años de terapia tener tan claros estos conceptos. "A los 18, creía que el éxito te lo otorgaban los otros. Por eso tal vez lo primero que busqué fue hacer televisión. Después entendí que el éxito es hacer lo que a uno le gusta. Me aferro mucho a esa frase."
Diego hizo su debut en televisión con una participación en Rebelde Way. A eso le siguieron personajes de mayor o menor relevancia en Patito Feo, Son de Fierro, Casi ángeles, entre otras. Sin embargo, un inesperado reconocimiento le llegó este año de la mano de Doble Click, una tira online que con cada una de las 18 entregas de aproximadamente tres minutos de duración causó furor en las redes sociales y llevó el rostro de Diego y Agustina Seku Faillace, su coprotagonista, allende los mares. "Nos vieron en Israel, en España, en Chile… Fue un flash lo que generó", cuenta, todavía extasiado con el resultado de una propuesta que surgió casualmente. El director televisivo Leo López fue a ver una función de Eh... no sé cómo decirlo , obra que protagonizaban Diego, Seku y Leo Bosio, y los convocó para la tira, que sería producida por Underground para un formato online. Con total libertad para crear sus monólogos, Diego y Seku se divirtieron a lo grande jugando a ser novios que se pelean a través de videos caseros subidos a YouTube. Los primeros dos videos comenzaron a circular sin que se supiera que se trataba de una ficción. El rumor se multiplicó por Twitter y Facebook: "¿Es real esta pelea?", se preguntaban los cibernautas mientras generaban una explosión de visitas a la página de la serie. ¡Bingo! Habían mordido el anzuelo. Lo demás fue un verdadero éxito.
De esta manera, aunque su figura se asocia al teatro musical off, conoce de cerca el lenguaje audiovisual y ya comenzó a combinar las ideas de Random con las posibilidades de la pantalla chica: "No se puede negar que lo masivo de la televisión hace que los proyectos se sostengan más a nivel comercial. Si tenés pantalla, seguramente te va a traer más público". Así es que hoy los Random se preparan para convertir a Alicia en Frikiland en una tira de la mano del guionista Marcelo Camaño, al tiempo que avanzan en la preproducción de un ciclo de scouting de talentos en el interior del país, junto al canal Ciudad Abierta, del cual resultará el elenco de un proyecto para estrenarse en julio de 2013, sin dejar de lado su raíz escénica: cerrarán el año con Alicia, en concierto, en La Trastienda, preparan el reestreno para abril del año que viene y una nueva obra que ya está germinando, C.E.P.O. Centro Experimental para Oscuros.
Los límites entre el actor y el puestista
Un cúmulo de sentimientos encontrados hace incontenible su ansiedad y apenas puede quedarse quieto en la silla cuando empieza a hablar de este nuevo desafío: Rinaudo... "Vos me venís a hacer una nota como actor. Para mí es muy fuerte eso", dice.
Es que la enorme repercusión que tuvo como director de los sucesos más grandes del off de los últimos años, inspiradores de un estallido de nuevas obras en el circuito alternativo, dejó algo opacado su rol de actor. "A los 18 no quería ser director de teatro musical. Estudié para ser actor, después se dio esta pulsión de dirigir. Siento que al director lo controlo más y que al actor no lo puedo controlar tanto, porque soy parte de un engranaje, de un dispositivo que está en marcha, entonces lo tiño más de mis inseguridades", comenta.
Como docente en distintas escuelas de comedia musical, aborda la actuación desde un lugar muy reflexivo y con un sincero respeto: "Meterme con las problemáticas de mis alumnos me llevó a encontrarme con un montón de mis propias preocupaciones como actor".
Guiado por su intuición, por esta idea de "no planificar", Diego va encontrando a su paso las condiciones para enriquecer su arte y apela a una enseñanza de Ricky Pashkus para explicarse este devenir aleatorio por el que transita y que le encanta: "La vida es un juego y hay una cámara que está filmando cómo jugás. Pero la cámara está dentro tuyo".
Es el turno del fracaso con las mujeres
Le toca encarnar a un personaje que lo identifica Rinaudo, el amor tiene razón es el resultado de un largo proceso surgido de la cabeza de Da Capo Producciones, los creadores de Embarazados, ecografía de una espera, y llega a escena no sin antes haber atravesado algunos contratiempos. "Yo estaba con Juan [Álvarez Prado, el director] cuando Germán Tripel llamó para decir que no podía ser Rinaudo. Faltaba poco más de un mes para el estreno, y le dije: «La tenés que hacer igual. Yo te hago Rinaudo»", cuenta Corán Oria, todavía afectado por la adrenalina extrema de preparar un personaje en un mes. "No soy cantante, así que la obra tuvo que adaptarse a eso. Sin embargo, tiene el acento puesto en lo actoral más que en el virtuosismo vocal", agrega. Deberá ponerse en la piel de un hombre que tiene muchas dificultades para encontrar pareja y elabora un mapa para entender a las mujeres. "Es una comedia clean, es limpia, es teatro sano. Este muchacho quiere planificar todo y no se puede. Es una historia muy divertida con la que yo al menos me identifico bastante", dice, entre risas, tras confesar que tiene un largo prontuario de fracasos amorosos. Con libro de Juan Ignacio Bruzzo y música de Hernán Matorra, se estrena hoy en La Comedia.
- Rinaudo, el amor tiene razón
Dirigida por Juan Álvarez Prado
Lunes, a las 21, en La Comedia, Rodríguez Peña 1062 - Alicia en Frikiland
Especial en Ciudad Abierta,
Hoy, a las 19; mañana, a las 12.30; miér., a las 16; jue., a las 14 y 19; sáb., a las 11.30, 17 y 23; y dom., a las 10.30 - Embarazados
Dirigida por Juan Álvarez Prado
Viernes y sábados, a las 21, en La Comedia, Rodríguez Peña 1062