Cómo puede continuar una función teatral si se corta la luz

El calor agobiante y los cortes de luz en los barrios, entre ellos Boedo, en el que está ubicado Timbre 4 (México 3554), sede del Festival TABA (Temporada Alta en Buenos Aires), en su octava edición, no impidieron que un público fiel, disfrutara del artista francés, de origen árabe Mohamed El Khatib y su pieza de teatro-documento Finir en beauté-Bello final. También casi sin pensarlo, la situación obligó a Maxime Saugé, director general de la muestra, a oficiar de traductor del artista.

Frente a una sala llena, sin aire acondicionado y acompañados por luces de emergencia, El Khatib, con la ayuda en traducción de Saugé, detalló las charlas mantenidas con su madre, mientras le tomaba la mano, en el hospital antes de morir, en 2012. Este es el tema de su pieza, que ante la ausencia de la iluminación adecuada se convirtió en una absurda situación, en la que el artista contaba al público lo que debería verse en un video si hubiera luz –"acá aparece mi madre hablando a cámara. Mi diálogo con el médico. El sacerdote, oficiando el ritual de entierro, mientras lee textos en su celular"…-. Ese contrapunto escénico "modificó" la pieza y le otorgó matices confesionales y emotivos, a esos textos compuestos de retazos de la memoria y anotaciones en cuadernos. El Khatib y Seugé, como el artista y su doble, le otorgaron a la vez una vertiente artesanal a sus palabras y provocaron una absoluta empatía con la platea, de la que sólo se retiraron tres personas de las aproximadamente 200 presentes en la sala. Al finalizar se aclaró que el público podrá canjear su entrada para la función de hoy, a las 22.45.

Mientras se buscaba ganar la calle México y sus aledaños, alumbrándose con linternas o celulares, en el ingreso a la sala, Albert Salazar, el joven actor de A.K.A (su autor es Daniel J.Meyer) que debutó el miércoles, se movía de un lugar a otro preocupado por tener que suspender la última función de su muy merecidamente premiada obra. Salazar en su debut conmovió hasta las lágrimas al público, al contar la historia de un joven moro, adoptado, que es acusado de una violación no cometida, por una joven racista. La dirigió Montse Rodríguez Clusella. Hoy, a las 19.45, se verá la muy esperada Kassandra, de Sergio Blanco, con Elisabet Casanovas, reconocida por el público local, por el personaje de Tania, en la serie Merlí, que emite Netflix. A las 21.30, en la sala de la calle Boedo, se verá la producción venezolana, Hay que tirar las vacas por el barranco, por la Compañía Caja de Fósforos, que tuvo que suspender ayer.

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