Aniversario. Las infancias tienen un gran espacio en el Centro Cultural de la Cooperación
Se convirtió en un epicentro del teatro de títeres y objetos, además de otros espectáculos familiares de jerarquía
- 5 minutos de lectura'
El Centro Cultural de la Cooperación (CCC) sumó en sus dos décadas de existencia un fuerte perfil de programación para chicos, con especial foco en el arte de los títeres. “Floreal Gorini insistía siempre en que el CCC se poblara de muchos chicos“, dice Antoaneta Madjarova, coordinadora del Área de Títeres y Espectáculos para las Infancias del Centro Cultural.
“Estoy en el proyecto desde que lo lanzó Gorini, en septiembre de 1997″, recuerda Madjarova. Ella, al igual que el actual director artístico CCC Juano Villafañe, venía de la experiencia en Lilberarte, la librería y sala teatral vecina que había aportado ya varias temporadas a la cartelera infantil. Madjarova, formada como titiritera en su Bulgaria natal, y Juano Villafañe como hijo del maestro titiritero Javier Villafañe (1909-1996), adhirieron sin dudar a la propuesta del fundador del CCC.
“Convocamos a personalidades reconocidas en el arte de las infancias de ese momento, como Hugo Midón, Carlos Gianni y Marcelo Katz, para que nos ayudaran a darle el perfil propio a este nuevo centro cultural, en el que se formaran también artistas jóvenes, intelectuales críticos, así como gestores e investigadores culturales.“
La programación inaugural del CCC, en noviembre de 2002, incluyó por tanto también un estreno para público infantil, Guillermo Tell, una versión clownesca de la ópera de Gioachino Rossini dirigida por Martín Joab y Marcelo Katz.
A lo largo de las temporadas que le sucedieron pasaron por sus tres salas, con dos obras simultáneas en cada una, los títeres de Silvina Reinaudi, Carlos Martínez y Mariano Cossa, la danza de Teresa Duggan, y los recitales de música de Mariana Baggio, Los Cuatro Vientos, El Murgón de la Esquina y Los Musiqueros, entre otros. Así como prácticamente todo el repertorio de los tres elencos más afines, casi podría decirse estables, de esta área del CCC: los títeres de la Compañía El Nudo (Un hipo desafinado, El viaje de Azul), la Compañia Amichis (Clac! Una historia de película, Bom, Bim, Bam) y el grupo de títeres y teatro negro Kukla, dirigido por la misma Madjarova (Calidoscopio, Circo Fokus Bokus).
“Tenenos mucho títeres... Acá lo que más más se busca por ventanilla, si se puede decir, son los títeres. Nuestro público, los mismos padres, fueron instalando este perfil, pidiendo obras para los más pequeños“, explica Madjarova.
A las funciones de fin de semana se agregaron las organizadas para escuelas. “Convocábamos a unos 22.000 alumnos y docentes por temporada. Aparte de lo educativo es muy lindo cuando los chicos se encuentran por primera vez con un teatro, venían chicos de seis o siete años que nunca habían habían pisado una sala teatral, nunca habían subido a un ascensor“, reseña Madjarova.
“Y los docentes, al igual que los padres, son los grandes difusores de nuestras obras infantiles, el boca a boca funciona muy bien, más allá de lo que hagamos en prensa y redes sociales. Para ello es clave tener obras de calidad, para cualquier edad y temática.“
La pandemia impuso un corte, como en todos los teatros. Madjarova traza el nuevo panorama: “Ahora nos estamos recuperando lentamente de este golpe que tuvimos todos los artistas, toda la sociedad, y comenzamos a retomar la actividad normal. El año pasado fue muy parcial, tuvimos una cartelera virtual durante casi la mitad del año, a partir de marzo empezamos con la cartelera estable. Y, claro, el retorno del público también costó, como en todos los teatros. Por eso decidimos hacer períodos más cortos de las obras, con menos cantidad de funciones, y nos fue bastante bien. En 2023, si está todo bien, podremos recuperar la programación por completo. Es más, vamos a incorporar también la Sala Inda Ledesma en el Espacio Leónidas Barletta, con obras para chicos más grandes, empezando con Unidiverso, del grupo Amichis.“ El arranque de la próxima temporada infantil en el CCC va a estar dado en marzo por la puesta en escena de El vuelo de Basilio, una adaptación de un cuento de Haroldo Conti, con dirección de Analía Fedra García, en la Sala Tuñón.
Antes de ello, integrándose a la celebración del vigésimo aniversario del Centro Cultural de la Cooperación, tendrá lugar el miércoles próximo la quinta entrega del bienal Premio Javier Villafañe para Teatro de Títeres y Objetos. “Esta vez se presentaron casi un centenar de obras para infancias y para adultos, muchas de ellas del interior“, informa Madjarova, “es un premio cada vez más federal. Contamos con un jurado especializado para los diversos rubros y otro de niños, que elige su propio premio. A los premios mayores se les entregan réplicas de los títeres emblemáticos de Javier Villafañe, el Maese Trotamundos y Juancito y María.“
Vinculado al Premio Villafañe se edita desde hace unos años un libro de la serie Títeres en Palabras, con una selección de obras premiadas o representadas en el CCC, dentro de la colección Dramaturgias Argentinas que dirige Jorge Dubatti. Se cumple así también en la programación para las infancias con la propuesta del CCC de integrar la representación en escena con aportes a la documentación e investigación.
Otras noticias de Teatro infantil
- 1
Lo que hay que saber para ver la nueva temporada de El juego del calamar
- 2
De Nicole Neumann al Kun Agüero, todos los famosos que fueron padres en el 2024
- 3
Festejos navideños: de Yuyito y Milei a un accidente de Silvina Escudero pasando por Ángela Leiva en modo romántico
- 4
Amelita Baltar, su enemistad con “la otra” ex de Piazzolla, la insólita charla con el Papa Francisco y su balance a los 84 años: “He vivido como un hombre”