Vuelve Orange Is the New Black: qué podemos esperar de la sexta temporada
PARA LA NACIONMilagros Amondaray
Una de las grandes novedades de Netflix de este mes es el desembarco a la plataforma de streaming de la sexta temporada de Orange Is the New Black , el drama carcelario de Jenji Kohan perfectamente concebido para maratonear, pero que después se hace esperar durante más de un año. La quinta entrega de la serie basada parcialmente en la autobiografía de Piper Kerman se estrenó el 9 de junio de 2017, lo cual no hizo más que incrementar la ansiedad ante esta vuelta sobre la cual su showrunner ha decidido no brindar demasiados detalles para preservar el factor sorpresa. De todas formas, en esta nota recordamos de dónde venimos y palpitamos hacia dónde vamos en la multiplicidad de historias que despliega la creación de Kohan. ¡Atención: esta nota tiene spoilers!
*La rebelión como punto de partida
En "Storm-y Weather", el último capítulo de la quinta temporada, la popular canción de The Cinematic Orchestra "To Build a Home" - elegida por infinidad de series por su incuestionable eficacia, como pudimos ver tanto en Grey's Anatomy como en This Is Us - sonaba mientras se suscitaban dos hechos en paralelo. Por un lado, la gran mayoría de las presidiarias de Litchfield eran trasladadas a otras cárceles, siendo separadas en el proceso. Por el otro, el grupo de la resistencia conformado por Gloria (Selenis Leyva), Taystee (Danielle Brooks), Frieda (Dale Soules), Piper (Taylor Schilling), Alex (Laura Prepon), Nicky (Natasha Lyonne), Black Cindy (Adrienne C. Moore), "Crazy Eyes" (Uzo Aduba), Red (Kate Mulgrew) y Flores (Laura Gómez) decidió permanecer en ese búnker improvisado para sostener sus pedidos hasta las últimas consecuencias. Tomadas de la mano y de cara a las posibles represalias, en los rostros de cada una de ellas podíamos ver el miedo al futuro. Precisamente de esa premisa surge la sexta temporada de Orange Is the New Black: de la convivencia con lo impredecible.
Asimismo, el equipo de guionistas de la serie - desde la propia Kohan, pasando por Jordan Harrison, hasta la imprescindible Lauren Morelli - sorteó con altura el desafío que se había impuesto: que la quinta temporada se desarrolle en un marco de tres días, el tiempo de duración de ese motín propulsado por más de una razón. La muerte de Poussey Washington (Samira Wiley) fue un punto de inflexión para los personajes, especialmente para su amiga Taystee, quien se convirtió en la figura indiscutida de los últimos episodios. "Disfruté mucho poder contar la historia de Taystee, quien se rebela y logra hablar de manera muy inteligente sobre las reformas carcelarias y sobre la búsqueda de justicia para Poussey; poder ver a un personaje atravesar un conflicto interno tan intenso fue muy positivo", le contó Brooks al portal Digital Spy, remarcando que la unión de los personajes fue la clave de la quinta temporada y el perfecto contraste de la sexta, que estará signada por la emancipación.
*Nueva temporada, nuevos códigos
Si bien en el primer adelanto difundido no podíamos inferir nada por fuera de lo evidente - que la prisión de máxima seguridad será un personaje más -, en el segundo trailer el panorama se aclaraba. "Lo que se va a ver es cómo todas pasarán a convertirse en sapos de otro pozo, y se verán forzadas a reinventarse a sí mismas en una nueva prisión", contó Brooks. Efectivamente, Netflix puso énfasis en el adjetivo "nuevo" cuando dio a conocer los dos trailers de esta sexta temporada, en los que la palabra se repetía constantemente, también como modo de reasegurarnos que si algo sabe hacer Orange Is the New Black, es reinventarse. De hecho, si nos basamos en el axioma principal de la serie - la alternancia entre una temporada más light con una mucho más oscura -, entonces es probable que este regreso esté marcado por viñetas más crudas, también fruto de ese efecto dominó que mantiene la máquina encendida. La muerte de Poussey no solo puso de relieve las problemáticas de Litchfield sino que también amplió la mirada y le permitió a Orange abordar tópicos de urgencia, como el movimiento Black Lives Matter . En esta nueva temporada, las réplicas de ese motín se expanden hacia otros lugares de características desconocidas pero igual de urgentes.
Por lo tanto, como ya vimos en "Storm-y Weather", las amistades más sólidas serán puestas en pausa, abriendo así todo un nuevo mundo de posibilidades: ¿Cómo será la cotidianidad de Flaca (Jackie Cruz) sin Maritza (Diane Guerrero)? ¿Cómo podrá subsistir Morello (Yael Stone) sin Nicky? En el trailer oficial, el rostro de "Crazy Eyes" al presenciar el cambio de hábito simboliza de algún modo la reacción del espectador ante ese terremoto en los cimientos de los vínculos más importantes de la serie. Orange Is the New Black siempre privilegió las dinámicas tanto grupales como individuales por sobre los golpes de efecto. Una conversación, una confesión, una palabra de apoyo nos permitían conectar con el crisol de personajes, estableciendo una familiaridad con ellos. En este sentido, la sexta temporada será una protagonizada por parias en microcosmos en los cuales de esa familiaridad quedará poco y nada, y en los que incorporar códigos de poder será la llave para garantizarse la supervivencia.
*El paradero de Alex, un enigma a resolver
El personaje de Alex finalmente había encontrado la estabilidad, tras varios episodios traumáticos. De todas maneras, como sucede siempre en la serie, su bienestar está ligado al de Piper y el estadio de su fluctuante relación. En la quinta temporada, la pareja se compromete antes de que se produzca el estallido, y se muestra unida en ese plano final. Sin embargo, la ausencia de Alex en los adelantos es notoria. Mientras todas las sobrevivientes del búnker ponen a prueba su lealtad cuando son interrogadas por los pormenores de ese motín-dentro-del-motín, el rostro de Prepon brilla por su ausencia. Si bien esto no determina el tiempo de pantalla que tendrá la actriz - quien compartió imágenes del fin del rodaje junto a Schilling en febrero -, sí es otra movida clásica de Kohan y compañía: dejar respirar a un determinado personaje para que su regreso sea más rutilante (esto sucedió con Nicky, Sophia, e incluso con Alex en la segunda temporada, donde estuvo en solo cuatro de los trece capítulos).
En otra de sus astutas promos, Netflix jugó con la ansiedad del fanático, y posteó un video en el que podemos ver a Piper jugando en el emblemático programa Jeopardy, y respondiendo cada pregunta con su propio interrogante: "¿Dónde está Alex?". De esta forma, la desaparición momentánea de la partenaire de Schilling nos retrotrae a "I Wasn't Ready", el primer capítulo de la primera temporada que concluía con la súbita entrada en escena de Prepon, una actriz de fuerte presencia que, más temprano que tarde, seguramente ingrese del mismo modo a una sexta temporada donde nos despedimos de la "normalidad" de Litchfield. Será cuestión de adaptarnos.
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