UnReal, una comedia que de tan amarga se vuelve un drama
Ambientada en un reality show al estilo The Bachelor, la ficción de Marti Noxon se destaca por el gran trabajo actoral de sus protagonistas
UnReal.Creada por: Marti Noxon y Sarah Gertrude Shapiro. Elenco: Shiri Appleby, Constance Zimmer, Craig Bierko, Freddie Stroma. Emisiones: los lunes a la medianoche, por Lifetime.
Nuestra opinión: Muy buena
Por más que uno busque y espere y luego vuelva a buscar es imposible encontrar algún personaje heroico en UnReal, una comedia que de tan amarga se vuelve un drama. Por momentos parece que Rachel –la productora que vuelve a Everlasting, el reality show de búsqueda de pareja, luego de haber sufrido una crisis nerviosa– será la que redima a la raza humana en el set del programa. Pero enseguida quedará claro que por más que la mujer lo intente, su ambición e inestabilidad emocional no la dejarán librarse de los juegos de manipulación que parecen necesarios para el programa y la razón de vivir de su principal gestora, Quinn King.
En la ficción de UnReal no hay cliché de los reality shows que quede en pie ni truco sin destapar. Desde la técnica de hambrear y emborrachar a las participantes para que reaccionen violentamente ante las cámaras hasta los oportunos susurros de los productores que las harán pelearse entre sí, la serie pinta un cuadro descarnado de lo que se necesita para conseguir lo que Quinn llama "buena televisión" y lo que el género ya causó en los vínculos sociales. Tan despiadados como quienes están detrás de cámaras son los participantes del show en el que una docena de mujeres intenta conquistar a un heredero británico con más acento que dinero. Ellos ya conocen el juego y lo que se espera de ellos para conseguir sobrevivir a la votación semanal.
El sórdido ambiente que retrata la serie puede parecer superficial en un principio, pero con el correr de los episodios, el conflicto se profundiza con referencias a la discriminación racial, las enfermedades mentales y el precio que se paga por una imagen perfecta.
Más allá de los méritos de guión y dirección de UnReal, lo más notable del programa son sus personajes centrales, Rachel y Quinn –excelentes trabajos de Shiri Appleby y Constance Zimmer, respectivamente–, dos mujeres fuertes pero no invencibles, capaces pero repletas de heridas, independientes pero obsesionadas con la idea de la soledad, del desamparo que ocurre cuando se apagan las cámaras y todos tienen un lugar al que regresar, menos ellas.