Jason Bateman: "Me gustan los personajes que parecen normales en la superficie"
En una entrevista exclusiva con LA NACION, el actor habló sobre su protagónico en Ozark, la flamante serie de Netflix de la cual también es director y productor
Del otro lado del teléfono, Jason Bateman asegura que su trabajo en Ozark fue mucho más que ponerse delante y detrás de cámara. El prolífico actor, director y productor también se involucró, por ejemplo, en el proceso de selección de la paleta de la serie y en la búsqueda de las canciones perfectas. Por lo tanto, no resulta casual que en "Sugarwood", el primer episodio del drama de Netflix creado por Bill Dubuque, Bateman haya optado cerrar la acción con un plano general de la región de los lagos de Ozark mientras Thom Yorke canta "Decks Dark", un tema sobre el descenso a la oscuridad.
En Ozark, Bateman interpreta a Marty Birde, un asesor financiero de vida aparentemente apacible que despunta el vicio por lo criminal lavando dinero de un cartel de droga de México. Cuando su socio comete un error imperdonable, Marty se ve obligado a mudarse con su esposa Wendy (Laura Linney, siempre perfecta) y sus hijos a la región montañosa de Ozark para subsanar la relación con su lapidario empleador Del (Esai Morales).
La premisa de la serie le valió comparaciones un tanto lógicas con Breaking Bad y generó la ineludible pregunta de si necesitamos otro drama sobre antihéroes que deben lidiar con las consecuencias de sus cuestionables acciones (en Gypsy el resultado estuvo muy por debajo de las expectativas). En este caso, la respuesta es afirmativa. Ozark es una serie densa, violenta e incluso apática, donde Bateman se luce como ese hombre que, al igual que el protagonista de esa canción de Radiohead, decide no mirar atrás, cubrir sus oídos y aprender a resistir.
-¿Qué te atrajo de este proyecto?
-Lo que me atrajo inicialmente fue lo brillantes que eran los dos primeros guiones y por eso acepté ser parte, pero sólo si me dejaban dirigir los episodios y producirlos. Lo hablamos, eventualmente dijeron que sí y comenzamos, pero no pudimos coordinar que yo dirigiese todos los capítulos por cuestiones de agenda, así que dirigí solo algunos. De todas maneras, creo que observar la acción desde el rol de productor ejecutivo fue casi igual de satisfactorio, porque el objetivo era el mismo: encontrarle el clima adecuado al programa.
-¿Cómo definirías tu estilo como realizador en Ozark?
-Como lo que le sucede a Marty es algo muy difícil y atemorizante y se está sintiendo inseguro de manera constante por las situaciones crudas que atraviesa, la clave era encontrarle literalmente el color justo a Ozark. Desde los encuadres hasta los lentes, pasando por la música, por las locaciones, hay muchos factores que influyen a la hora de crear la paleta correcta, la atmósfera justa para situar a la audiencia en ese lugar, para contagiarle un cierto estado de ánimo como receptores de los eventos.
-En cuanto a la búsqueda de locaciones, ¿cuánto tiempo les llevó encontrar el escenario ideal?
-En realidad tuvimos un par de etapas bien marcadas. La selección original llevó muchos meses porque me mandaban imágenes de determinados lugares y a partir de las rechazadas afilábamos cada vez más la búsqueda. Luego, en la filmación misma, esa búsqueda no se acababa porque a cada secuencia había que encontrarle la locación perfecta. Lo que tenía de especial el norte de Atlanta, Georgia, era ese look muy rural que iba a tono con los lagos de Ozark en Missouri, entonces apostamos por eso.
-¿Cómo describirías a tu personaje, Marty?
-Lo más interesante de interpretar a alguien como Marty fue esa cualidad que tiene de usar su inteligencia para justificar sus acciones. A todo lo que hace, a todo lo mal que se maneja, le encuentra siempre una razón con la que puede vivir. De esta manera, rompe leyes y lidia con lo criminal, pero está convencido de que es para mejorar su situación personal y la de su familia. Sin embargo, creo que éso mismo es parte del problema. Su arrogancia, su hubris, es precisamente su mayor debilidad, porque uno no puede escapar de las consecuencias, eventualmente te pisan los talones y cuando eso le sucede a Marty, tiene que poner a prueba su inteligencia para mantenerse con vida. Eso es lo más fascinante de ver en la serie: comprobar si tiene lo necesario para sobrevivir o si se lo gastó todo en los capítulos anteriores (risas).
-Siempre decís que lo fundamental de un proceso de filmación es la colaboración con otros actores, ¿cómo fue trabajar con Laura Linney?
-Ella es una persona a la que no ves actuar, realmente es muy natural, no hay muchos trucos, es humana. Por eso me parecía la actriz ideal para este material porque lo que buscábamos era la mejor representación posible de una familia normal en una situación extraordinaria y su estilo de actuación va por ese carril.
-En comedia hiciste trabajos brillantes como en Arrested Development y en cine interpretaciones más oscuras como en El regalo de Joel Edgerton, ¿qué género te sienta más cómodo?
-Como actor me siento más cómodo interpretando personajes que parecen normales en la superficie, me gusta eso. Me atraen esos papeles de hombres comunes que se enfrentan a hechos complejos que exponen sus verdaderas cualidades, ya sea rasgos más dramáticos o más cómicos, me interesan los personajes que se ubican en el medio y con tendencia a caer hacia una de las dos alternativas, considero que todos los seres humanos somos un poco así.
-Tu segundo largometraje como director, The Family Fang, es realmente conmovedor. ¿Cómo fue dirigirlo y para cuándo planeás realizar tu tercera película?
-Muchas gracias por lo que decís. Mi próxima película la voy a rodar en abril de 2018, no sé cuál será porque estoy viendo un par de guiones, pero recién el año que viene tendré tiempo para hacerla. En cuanto a The Family Fang, dirigir ese film fue una experiencia increíble, porque el guion de David [N. del E.: Lindsay-Abaire] fue algo que puede entender, me conecté de una manera especial...
-¿Sí? ¿Por qué lo decís?
-Porque al igual que los protagonistas de esa película yo también crecí con una familia no tradicional, en situaciones extraordinarias. Mi papá es actor y director, mi hermana es actriz [N. del E.: Justine Bateman, de Family Ties], mi mamá era azafata de Pan Am, todos teníamos horarios distintos y vivíamos a diferentes ritmos, como que algo estaba siempre desconectado. Como familia, tuvimos que encontrar la normalidad en lo anormal, en lo extraño, y eso puede ser divertido pero al mismo tiempo te puede romper el corazón. Cuando leí el guion, lo entendí. Me sentí identificado con esa atmósfera.
-En la actualidad, gracias a plataformas como Netflix, podemos acceder a contenidos de lo más variados; ¿cuáles son aquellas series que dejaron una marca en vos?
-La versión británica de The Office de Ricky Gervais . Me gusta lo tranquila y lenta que podía llegar a ser por momentos, cómo se concebían esas situaciones incómodas, eso requiere de mucho coraje y paciencia, y lo aprecio como espectador. También quiero mencionar Top of the Lake [N. del E.: creada por Jane Campion y Gerard Lee], porque fue un drama que usé como fuente de inspiración para Ozark, por su tono y por su ritmo. Me gusta muchísimo la fotografía de Adam Arkapaw ahí, soy un gran fanático de sus trabajos.
-¿Qué es lo que más te gusta de ser actor?
-Mi parte favorita de ser actor es cuando siento que el espectador no sólo está mirando lo que hacés sino que está ahí con vos, que está tan conectado con el momento en el que vos estás que podés moverlos fácilmente de un lado a otro. Y eso lo lográs con algún detalle en los gestos, con la creación de una pausa, con movimientos del cuerpo, con quebrar la voz. Es difícil generar esos instantes, pero cuando estás ahí en el proceso, dentro de una escena, los sentís. Luego sólo resta esperar que el editor y el director conserven esos detalles en el proceso de montaje.
-De toda tu filmografía, ¿cuál interpretación te hace sentir más orgulloso? En Papá por accidente tenés un muy buen papel en una comedia un tanto infravalorada
-¡Papá por accidente! Lindo recuerdo. Con Jennifer [Aniston] seguimos siendo muy amigos desde que filmamos esa película, nos divertimos mucho en el rodaje. Respecto a la pregunta, sé que estamos haciendo una entrevista por Ozark, pero honestamente debo decir que me encantó abordar el personaje de Marty porque, por un lado, es muy fuerte en algunas escenas, pero luego se quiebra y se muestra débil en otras. Sin embargo, lo que más me gustó fue dirigir la serie, trabajar con el resto de los actores y colaborar con todo el equipo.
¿Dónde verla? La primera temporada completa de
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