Game of Thrones: por qué el final de la serie no será el final de la historia
Hay al menos una de las figuras centrales de Game of Thrones que quiere que la serie realmente termine el próximo 19 de mayo. "¿Para qué carajo continuarla?", dice sin pelos en la lengua Emilia Clarke , la mismísima Madre de los Dragones. "La serie es un fenómeno impensado, así que entiendo perfectamente que alguien quiera hacer 1500 episodios más de una fórmula tan exitosa", agrega Clarke. "Simplemente creo que no deberían hacerlo."
Sin embargo, las tendencias de la cultura pop y las presiones del mercado tal vez terminen conspirando contra esa convicción artística, y lo cierto es que el piloto de una nueva serie, una precuela de la original, ya está en etapa de desarrollo. Así que mientras se acerca el arranque de la temporada final del mayor éxito en toda la historia de HBO, el domingo, un nuevo interrogante se cierne sobre su futuro: ¿Game of Thrones es una serie o es un universo?
Medido por la cantidad de espectadores, su impacto en la industria y la atención mundial que concita, ciertamente GoT es uno de los mayores éxitos de la historia de la TV. Pero en estos tiempos en que las corporaciones se compran unas a otras y planean el lanzamiento de nuevas plataformas de streaming en una guerra cada vez más encarnizada por conseguir nuestra atención y nuestro dinero, ya no alcanza con ser un gran éxito en pantalla.
Aunque sólo restan seis episodios de la historia de Jon Snow, Daenerys Targaryen, Tyrion Lannister y sus enemigos, lo más probable es que nuestra exploración del continentes de Westeros recién acaba de comenzar.
Basta pensar en La guerra de las galaxias. Desde que adquirió la productora Lucasfilm por 4000 millones de dólares, en 2012, Disney ha explotado esa franquicia como una mina a cielo abierto, concibiendo múltiples trilogías de películas, series de TV y películas ambientadas en ese universo, además de darle un lugar de preminencia en los parques temáticos de Disney (lo próximo que harán los creadores de Game of Thrones, David Benioff y D.B. Weiss, es precisamente, una trilogía de Star Wars )
También está el ejemplo de Harry Potter (que, al igual que GoT, pertenece al imperio WarnerMedia) que, tras ocho películas basadas en las novelas, se ha metido a fondo en la serie de precuelas Animales fantásticos, y también tiene atracciones turísticas alrededor del mundo que permiten disfrutar del mundo en el que transcurren las historias.
Por supuesto no hay que olvidarse del mayor universo de la cultura pop: el de Marvel , también propiedad de Disney, que el 25 de este mes dará por agotado el filón de los "Vengadores" con la película Avengers: Endgame , pero que en junio estrenará un nuevo brote de ese árbol, la rama X-Men, con Dark Phoenix, protagonizada por la propia Sansa Stark, la actriz Sophie Turner ¿Por qué un fenómeno tan popular y lucrativo como la serie Game of Thrones no sería entonces candidata seguir el mismo camino?
Todos los detalles que rodean a la serie apuntan en esa dirección. En febrero fue aprobada la fusión (por 85.400 millones de dólares) de AT&T con la corporación madre de HBO, Time Warner. Este nuevo conglomerado, Warner Media, lanzará una plataforma de streaming para competir con servicios similares como Disney + –que compró de la 21st Century Fox por 71.300 millones de dólares– y de Apple TV+, que se sumaron a las ya existentesNetflix , Amazon y Hulu.
El servicio de streaming de Warner Media, aún sin nombre, se nutrirá de la vasta colección de películas y series de Warner Bros., Turner y HBO. Está previsto que HBO Now, la actual aplicación de streaming de la cadena (conocida en la Argentina como HBO GO), siga funcionando, pero las series originales y nuevas ofertas de HBO serán incorporadas al servicio de WarnerMedia, lo que significa que en poco tiempo más, Game of Thrones podría aparecer junto a películas de Harry Potter, la Mujer Maravilla o la serie Friends.
John Stankey, el ejecutivo de AT&T a cargo de WarnerMedia, dijo que HBO tendrá mayor presupuesto de programación para potenciar la producción. "Queremos incrementar nuestra inversión en contenidos premium", dijo el año pasado en una reunión de accionistas. La pregunta que queda abierta es qué parte de esos contenidos constituye GoT Pero es poco probable que la compañía telefónica norteamericana haya comprado Time Warner sólo para dejar que uno de sus mayores valores de propiedad intelectual muera antes de sacarle el jugo.
Debe recordarse que Game of Thrones es apenas una parte del universo de la saga fantástica Canción de hielo y fuego, del escritor George R.R. Martin , un mundo tan denso en historias y tradiciones que podría inspirar decenas de series y películas. "Este universo es demasiado rico para no intentarlo", dijo Casey Bloys, presidente de programación de HBO. "Pero, por otro lado, no quiero hacerlo solo porque podemos hacerlo".
El piloto de la precuela, aún sin título, creada por el propio Martin y la guionista Jane Goldman, entrará en fase de producción a mediados de este mismo año. Narrará hechos que ocurren mil años antes de Game of Thrones, probablemente el nacimiento de losCaminantes Blancos que hoy amenazan a Westeros y a los Stark, y será protagonizada por estrellas como Naomi Watts y Miranda Richardson, entre otros. Fue uno de los múltiples conceptos de precuela encargados por HBO, que no ha descartado avanzar con la producción de cualquiera de las cuatro series propuestas restantes.
A partir de 2020, los fanáticos de la serie —como los devotos de La guerra de las galaxias, Harry Potter y Marvel— podrán tener una dosis de ese mundo en carne y hueso. Para principios del año próximo, está planeada la inauguración de una atracción turística de más de 10.000 metros cuadrados: un recorrido por los estudios de filmación en Irlanda del Norte, donde fue rodada la mayor parte de la serie. El proyecto, inspirado por el recorrido del estudio de Harry Potter de Warner Bros. en las afueras de Londres, transformará a los estudios Linen Mill en Banbridge en una exposición interactiva de los escenarios, vestuarios, utilería y las armas de la serie. "Será una experiencia inmersiva, en la que los fanáticos sentirán que están dentro de sus escenarios favoritos", dijo Jeff Peters, vicepresidente de licencias y ventas minoristas de HBO.
Los estudios Linen Mill serán los primeros de cuatro antiguas locaciones de filmación de Game of Thrones en Irlanda del Norte en ser transformados en experiencias interactivas para los fanáticos. Otras posibilidades incluyen los sets de filmación de locaciones de la ficción como King's Landing (en Belfast), y del Castillo Negro y el Muro en una cantera en las afueras de la ciudad. Aunque actualmente no hay planes para crear atracciones similares en los Estados Unidos y otras latitudes donde se filmó la serie, como Croacia e Islandia, "Todo es posible", dijo Peters. "Es una oferta que nos hacen todo el tiempo, y estamos abiertos a todas esas diferentes oportunidades".
Cabe destacar que existen algunos obstáculos potenciales para que GoT se convierta en la futura Star Wars. Por un lado, está la naturaleza adulta del lenguaje y las situaciones que muestra la serie, que restringe su atractivo familiar (HBO argumenta que justamente eso contribuirá a que siga siendo relevante incluso si no agrega más series, a medida que las nuevas generaciones de adultos descubran la saga).
Otro obstáculo es la propia HBO. El canal se convirtió en la joya de la TV a través de su buen gusto y compromiso con la calidad. Es sabido que ha rechazado numerosos pilotos de series que no cumplían con sus estándares y solo dará continuidad a la anunciada precuela si está a la altura de la ficción original, dijo Bloys. "Quiero honrar los altos estándares que Dan y David le imprimieron al programa", dijo. Como resultado, es muy pronto incluso para empezar a pensar en GoT omo una franquicia, agregó. "Para mí, una franquicia es cuando hay múltiples películas y series de TV que conviven al mismo tiempo– explica–. "Como todavía ni siquiera nos hemos abocado de lleno a la precuela, todavía es prematuro decir que vamos a tener múltiples productos al mismo tiempo".
No obstante, AT&T no ha demostrado ser precisamente distante o paciente. Richard Plepler, exdirector ejecutivo de HBO, tan responsable como los demás por la reputación del buen gusto del canal, abandonó la compañía abruptamente dos días después que se oficializara la compra. De hecho, ya hay señales de que AT&T planea usar a Game of Thrones para crear sinergia en su maquinaria corporativa. Kristian Nairn (el actor que interpreta a Hodor) debió presentarse en una tienda AT&T en Boston donde los clientes pueden participar en el sorteo de un asiento en una "carreta de dragón" durante la premiere en Nueva York de la octava temporada. Pero si hay un grupo de personas que no está demasiado interesada en las nuevas versiones de esta historia son precisamente las estrellas de la serie.
Ninguno de los actores actuales tiene participación en la precuela ni ha tenido relación alguna con su desarrollo. La noticia "nos impactó a todos", dijo Clarke. El sentimiento general de parte de la actriz y el resto del elenco sobre series futuras de la saga equivale a básicamente a: "Les deseo lo mejor, fue la mejor época de mi vida, pero para mí se terminó". (con una excepción: el siempre cauteloso Varys. "Nunca digas nunca", afirmó Conleth Hill).
En el fondo, la reacción de los actores no debería sorprender, debido a la duración de los contratos, las exigencias físicas de la serie, y además porque quién sabe qué personajes sobrevivirán a la temporada final. Sin embargo, la flexibilización de los formatos televisivos parecería abrir muchas oportunidades, incluso para los personajes que no sobrevivan ¿Qué fanático no querría una miniserie o película de HBO que muestre hechos de la prehistoria de la serie, como la Rebelión de Robert, o los eventos que convirtieron a Jaime Lannister en el Matarreyes? Nikolaj Coster-Waldau , que interpreta a Jaime, espera que la precuela sea "incluso más exitosa que la serie original", pero también asegura que no le interesa volver a Westeros. "Sería como prepararse para una gran decepción", dijo. "Han sido diez años asombrosos, pero diez años es mucho tiempo". Tampoco esperen una miniserie surgida del personaje de Sansa. "No pienso ponerme un corsé nunca más en mi vida", dijo Turner.
Más allá de eso, los veteranos de GoT podrían tener otras oportunidades si la serie se convierte en la próxima gran franquiciao. Tal vez a medida que se acerque el 19 de mayo, sus estrellas alcancen la cima del universo de la cultura pop, pero algunos de ellos conocen suficientemente bien la industria como para saber que todo eso puede cambiar muy rápido. "Estamos muy confiados ante el futuro, pero dentro de cinco años todos podríamos terminar como guías turísticos en el parque temático de Game of Thrones", dijo Coster-Waldau.
Traducción de Jaime Arrambide
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