El cerebro de La Casa de Papel: "Jamás pensé que la serie pudiera reventar de esta forma"
En toda gran hazaña suele haber un capitán, un líder, una persona que se encarga de guiar a los demás hacia el éxito. El que se gana el respeto de su equipo y para muchos es un ídolo. En el atraco más popular del año, La Casa de Papel , Alvaro Morte interpreta a El Profesor, el personaje que se ganó la confianza de los ocho bandidos para dar el golpe más audaz: robar 2400 millones de euros de la Fábrica Nacional de Moneda y Timbre española. Este estratega también supo seducir a cientos de miles de espectadores en todo el mundo. Porque una de las razones del éxito de la serie de moda es, sin dudas, este brillante cerebro del engaño.
La primera parte de la producción española causó un gran revuelo en el público argentino y hay una gran expectativa con el final de la historia que podrá verse desde este viernes en Netflix, con la llegada para la Argentina de su segunda temporada.
La serie tiene dos historias totalmente diferentes pero complementarias a la vez. Los ocho integrantes que ingresaron al edificio con la intención de llevarse un millonario botín tienen que lidiar con problemas con los rehenes, relaciones conflictivas entre ladrones y víctimas, represión de las fuerzas de seguridad y muertes. Afuera hay otro mundo, que a pesar de tener relación directa con el robo, es invadido por el amor entre la inspectora Raquel Murillo y Salva, El Profesor. En diálogo con LA NACION, Alvaro Morte explora las razones del éxito de la serie, tanto en España como en otros países del mundo y anticipa que en la segunda temporada va a haber "más tensión y mucha, mucha acción".
- La primera temporada de La Casa de Papel dio mucho que hablar y hay mucha expectativa por el final. ¿Cuál creés que es la base del éxito de la serie?
- Por un lado, creo que los guionistas y los directores de la serie han conseguido un equilibrio perfecto entre escenas de acción, escenas divertidas, escenas emocionales… Los personajes están construidos sobre pasiones con las que cualquiera se puede ver identificado. Por otro lado, ¿a quién no le gustaría dar el golpe perfecto y, más allá, sin hacer daño a nadie? ¿Quién no se sentiría identificado con eso? Además del mensaje que lanza... No puedo concebir, estando en el siglo XXI, que siga habiendo una sola persona en este mundo que pase hambre.
- Tu papel de "El Profesor" no deja nada librado al azar y es muy detallista, aunque en un momento las emociones lo perturban. ¿En qué te parecés al personaje que interpretás?
- Una de las mejores facultades de El Profesor es precisamente eso, que es "indescriptible". Es un personaje que siempre sorprende, que es aparentemente tímido, pequeño, gris, anodino. Y cuando empiezas a rascar en él, vas descubriendo todo un mundo que sorprende más y más cuanto más vas rascando. Por supuesto, todos sabemos que es metódico, inteligente, concienzudo… Pero, ¿quién (o cómo) es El Profesor en realidad? Una amiga me dijo una vez después de haber visto la primera temporada: "Estoy absolutamente enganchada a El Profesor, pero no tengo ni idea de cómo es. No sé si dice la verdad o miente, si está enamorándose de la Inspectora o todo sigue siendo parte del plan…" Creo que ahí radica parte de la magia del personaje. Ese halo misterioso. Creo que en lo que más me parezco a El Profesor es en dos cosas: en que a los dos nos gusta mucho estudiar y en que ambos somos muy trabajadores, cuando tenemos un objetivo en mente, vamos a por todas y hasta el final.
Jamás pensé que la serie pudiera reventar de esta forma.
- ¿Cómo fue tu encuentro con el personaje? ¿Cómo estaba planteado en el guion y qué le aportaste vos?
- Una de las cosas más complicadas a la hora de construir el personaje fue que queríamos generar un personaje que tuviera la capacidad de arrastrar con él a un grupo de exconvictos. Pero no queríamos que fuera un tipo arrollador, seguro de sí mismo… Sino todo lo contrario. Que fuera tímido, torpe en las relaciones sociales, introvertido… Fue muy complicado generar esa cosa que tiene El Profesor que les arrastra a todos. Ese carisma desde el "no hacer nada para ser carismático". ¡Y creo que lo conseguimos! El carisma de El Profesor no solamente a conquistado a esos exconvictos, sino a fans de todo el mundo.
- ¿Cuál es tu opinión del movimiento Time´s up y las manifestaciones que hay en todo el mundo en protesta por los abusos en la industria del espectáculo?
- Por mi profesión, que esos abusos sean dentro del ámbito del espectáculo, me atañen por supuesto más directamente. Pero tristemente, muchas mujeres han sufrido –y siguen sufriendo- abusos de todo tipo en todos los ámbitos. Laborales, sociales, familiares... Lo cual, debo decir, me avergüenza como hombre. Apoyo rotundamente el movimiento Time´s up y creo que todos los hombres debiéramos hacerlo. Lo único que me da rabia es que no haya surgido antes.
Apoyo rotundamente el movimiento Time´s up y creo que todos los hombres debiéramos hacerlo. Lo único que me da rabia es que no haya surgido antes.
- ¿Qué podemos esperar para la segunda temporada?
- La gente que ya la ha podido ver en España coincide en que la segunda parte sube un escalón con respecto a la primera. Hablamos de la recta final, donde las cosas se están poniendo realmente feas y cada vez hay menos escapatoria. En definitiva, más tensión y mucha, mucha acción. ¡Agárrense que vienen curvas!
- ¿Qué conocés de la ficción argentina? ¿Viste alguna vez alguna serie o película? ¿Qué te gusta? ¿Has seguido algún actor en particular?
Me encanta lo que nos llega a España de los compañeros argentinos. ¡Menuda verdad hay en esos actores, menuda originalidad hay en esos guiones, en esas direcciones…! Desde que vi hace muchos años 9 Reinas, de Fabián Bielinsky, quedé enamorado de la ficción argentina.
- ¿Hay un antes y un después en tu vida tras tu papel en La casa de Papel? ¿Sos más reconocido en la calle? ¿Te llegaron más ofertas laborales?
- Está siendo verdaderamente abrumador. Cuando recibí los primeros guiones de 'La casa de papel' sí pensé que era muy buen producto, pero jamás pensé que pudiéramos reventar de esta forma. Efectivamente, gente de todo el mundo me para por la calle y tengo varias ofertas de trabajo sobre la mesa. Me siento muy afortunado. Me acuerdo mucho de compañeros de profesión, excelentes actores, que están en paro.
- ¿Cómo ves la expansión de la televisión española gracias a las plataformas de streaming?
- Tenemos en mi país, unos profesionales fantásticos y la ficción española goza cada vez más de mejor y mejor salud. Se van haciendo mejores proyectos cinematográficos y televisivos. El público va adquiriendo un paladar más fino y eso es estupendo, porque nos obliga a nosotros a esforzarnos más y más para sacar adelante proyectos que no decepcionen.
Desde el estreno de La Casa de Papel todo el mundo me para por la calle y tengo varias ofertas de trabajo sobre la mesa. Me siento muy afortunado
- Aparte de actor, sos director de cine y teatro. ¿Cómo crees que interfieren las nuevas tecnologías en la forma de hacer y consumir cine y teatro?
- Las nuevas tecnologías están ahí para ser usadas –si han de ser usadas-. Yo no las demonizo, pero tampoco me empeño en usarlas. Hay herramientas maravillosas pero que usadas más de lo necesario pueden resultar a la contra. Creo que lo inteligente es disponer de ellas en la justa medida de lo que requiera cada proyecto concreto.
- ¿Qué te genera saber que semejante éxito mundial llega a su fin?
- Esto ha sido un proyecto más en mi carrera. Un proyecto muy importante, sí. Con proyección internacional, sí. Pero un proyecto más al fin y al cabo. Me gustaría pensar que esto no acaba aquí. Que se pueden seguir abriendo puertas para poder hacer otros personajes. Somos actores y nos debemos a los proyectos, a los personajes que nos surjan. Solo espero que sigan viniendo esos personajes para poder seguir disfrutando de mi trabajo.
- ¿Qué proyectos tenés para el futuro?
- Acabo de empezar a rodar en Barcelona una película dirigida por Oriol Paulo. Estoy muy contento porque el guión es estupendo y él, como director, es fantástico. Lo vamos a pasar muy bien haciéndola. Imagino que se podrá ver hacia finales de año. El título es Mirage.
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