Se consagró en el folklore y la comparaban con La Sole, pero la tragedia la encontró en el mejor momento de su carrera
Tamara Castro murió en un accidente automovilístico en 2006, a los 34 años; tenía dos hijas, una de ellas fruto de su relación con Cau Bornes, expareja de Valeria Lynch
- 5 minutos de lectura'
Un regalo de reyes, como le ocurre a tantos niños y niñas, marcó su vida para siempre: una simple pero preciada guitarra señalaría definitivamente su camino. Aunque Tamara Castro, nacida en Ensenada pero adoptada desde pequeña por Brandsen, ya había vivido experiencias que le fueron dejando huellas: apenas dejó de ser un bebé cuando asistió a estudiar danzas nada menos que con Mabel Pimentel y Oscar Murillo, creadores del Ballet Brandsen, pero no se quedó quieta...
Luego formó parte de la Banda Municipal, se incorporó al coro y más allá de su pasión por la música, por su personalidad siempre extrovertida y simpática, empezó a tomar clases de teatro, y desde que fue una adolescente no paró más de crecer como artista. Nunca dejó pasar ni despreció cualquier convocatoria que se le presentaba. Siempre repetía, respetando las invitaciones: “Adonde me llamen voy a estar, deseaba esto, jamás voy a dejar de asistir a un festival, siempre me voy a hacer un lugar en la agenda para poder ir a cada rincón de mi Argentina”. Así, en crecimiento, trabajando duro y recorriendo rutas para brindar su arte la encontró la muerte a los 34 años. Por eso dolió tanto...
La mañana del viernes 8 de diciembre de 2006 Tamara venía de cantar hasta bien entrada la madrugada en el Festival La Fortinera en la localidad de Humberto Primo, provincia de Santa Fe, rumbo a la ciudad de Chivilcoy, donde debía presentarse durante la noche.
En la camioneta Partner que manejaba su marido, Sergio Dorado, viajaban la cantante y sus cuatro músicos. Pasadas las 10.30 horas, en la ruta provincial 13, a cuatro kilómetros del ingreso a Rafaela, dicha camioneta embistió a un Fiat Palio que venía de frente con un resultado de catástrofe: la muerte del chofer del auto, de las tres mujeres que venían con él, y de la propia Tamara, que viajaba en el asiento del acompañante de la utilitaria Peugeot junto a su esposo, quien salvó su vida pese a padecer fracturas en sus piernas, al igual que los otros integrantes de su grupo, que sufrieron magullones y politraumatismos pero no de gravedad.
De inmediato se supo que el choque ocurrió por una negligencia. El bandoneonista Elibio Reyes detalló que al conductor se le cayó encima el agua hirviendo del mate que estaba tomando, eso hizo que descuidara el manejo, el vehículo perdió el rumbo, quiso corregirlo con un volantazo, y el descuido produjo el impacto de frente.
Se escuchó una explosión tremenda, la camioneta dio un vuelco, la cantante salió despedida porque no tenía puesto el cinturón de seguridad, y terminó atropellada y aprisionada entre los hierros contra el suelo.
Los que acudieron de inmediato en socorro fueron policías y bomberos de Sunchales y Castellanos a quienes les costó grandes esfuerzos rescatar los cuerpos de los hierros retorcidos. Los uniformados no podían comprender después de ver el estado de los vehículos, cómo había personas que sobrevivieron a la tragedia.
Así, por un descuido difícil de comprender y que es moneda corriente en las rutas, se frustraba el futuro de la joven folklorista a la que hasta los grandes ya comparaban con “La Sole” Pastorutti por su presencia escénica y la potencia de su voz. Le iba tan bien en su ascendente carrera que se estaba preparando intensamente para participar en el verano de 2007 por primera vez como invitada en el Festival Internacional de la Canción de Viña del Mar.
Por supuesto venía de ser atracción en los grandes festivales nacionales junto a primerísimas figuras, como en Baradero y Cosquín, entre tantos otros que siguen convocando multitudes. En Cosquín había recibido el premio a la mejor interpretación por “Paradoja”, de Jorge Mlikota, su impulsor, productor y amigo, quien quedó maravillado cuando la escuchó cantar por primera vez.
Otro hombre clave en su trayectoria fue Titán Amorena de DBN Discos, quien determinado día fue a cenar a una parrilla de General Rodríguez, oyó su voz y esa misma noche le propuso firmar un contrato para grabar.
En ese trágico 2006, Tamara venía de promocionar su último disco, Vital. Antes como solista había grabado Pasiones; Revelaciones; Resplandor; Lo mejor de mí y La patria digna. Recibió un reconocimiento póstumo con el Premio Gardel 2007 por el Mejor álbum como artista femenina de folklore por Vital. También en 2008 repitió en la misma categoría por Inéditos.
La cantante tuvo dos hijas, Malena, fruto de la relación con Sergio Dorado, y Taís, con el brasileño Cau Bornes. No le gustaba nada todo lo que tenía que ver con los escándalos. Por eso padeció que en su momento se ventilara en la prensa el trámite de divorcio con Bornes, hoy ex de Valeria Lynch.
En 2015 Martín Agüero publicó el libro Tamara Castro, con la biografía de la cantante. Y en 2023, Glenn Miller, quien se define como “Tamarologo” y presidente del club de fans de Tamara Castro presentó un documental de 1 hora 40 minutos de duración que puede verse en Youtube llamado Tamara Castro, como un tizón encendido ardiendo dentro de mi sangre, que comienza con la presentación de la folklorista en el Festival de Baradero 99, realizada nada menos que por Horacio Guarany, con todos los elogios y honores, como ella y su historia de amor por la música lo merecían...
Temas
Otras noticias de Celebridades
Más leídas de Espectáculos
Fernán Mirás. Una hijastra famosa, un matrimonio que naufragó y la mujer que lo acompañó en el momento más crítico
“Pasamos por muchas etapas”. Andrea Rodríguez reveló detalles de su historia de amor con Jorge Lanata
"Tóxica". Yanina Latorre estalló contra Wanda y aseguró que tiene pruebas que la comprometen
Solo 3 capítulos. La miniserie basada en una historia real que aterrizó hace unos días en Netflix y ya es furor