Lalo Mir: "Llamo al país 'Argentimba' porque parece que todo lo jugáramos a vida o muerte cada cinco segundos"
A fines de 2016, Lalo Mir terminó la décima temporada del programa Lalo por hecho, que hacía todas las mañanas, de lunes a viernes, en FM 100. Decidió no renovar contrato y tomarse un año sabático. Cumplido el periodo de descanso, mañana vuelve a la radio con una nueva propuesta: Circo súper pop, en la que estará también de lunes a viernes, de 9 a 13, por FM Pop 101.5.
–¿Qué te llevó a tomarte un año sabático?
–Que hacía mucho que no paraba. En 2012, tuve unos cortocircuitos por estrés. Estaba haciendo Vivo en Argentina en la TV Pública, Encuentro en el estudio en canal Encuentro y cuatro horas diarias de Lalo por hecho en La 100. Se me saltó la térmica. A partir de ahí empecé a bajar y me puse el objetivo de cumplir los 10 años de Lalo por hecho y ahí ver si me tomaba un sabático. Empecé a ver la manera de tomarme un año sin trabajar. Conseguí hacerlo y también aproveché la oportunidad para cambiar de aire. Ya antes me había tomado otros años libres. El último fue en el 93, unos veinte años atrás. Y antes me había tomado uno en el 81 y otro en el 86. A esta altura me tocaba nuevamente uno.
–¿Cómo le sacaste el jugo al tiempo libre?
–No le saqué el jugo. Me dejé llevar por el día a día. Hubo más viajes. Hubo más San Pedro, que es un lugar al que voy los fines de semana cuando estoy trabajando y donde me gusta estar. Pasé más tiempo allí los días de semana cuando el pueblo es muy distinto. No hay turistas y se vuelve una ciudad muy tranquila, muy calma, muy vivible. Lei más, pensé más, jugué con Instagram. Eso te lleva a que la cabeza esté ocupada en otras cosas. Tuve también más tiempo libre para hacer una vida libre. En general no tengo problemas para encontrar en qué ocupar el tiempo.
–¿Y ahora, tenés ganas de volver o simplemente no hay más remedio?
–No hay más remedio, no. En todos los sabáticos que me tomé, pasada la mitad del año ya aparecía la presión por volver. Pero esta vez no me apuré. No era que estaba muy ansioso por regresar. A diferencia de las otras veces, la presión por hacer cosas se presentó una vez que aparecieron las ideas sobre qué hacer. Cuanto más me voy metiendo en un proyecto, más se va corporizando y más ganas me dan de hacerlo, hasta que, cuando está la cosa más o menos cocinada, aparece la ansiedad que me agarra siempre que estoy por estrenar algo nuevo.
–Contame un poco cómo es este “algo nuevo” que estrenás mañana
–Es un programa de salud que está concebido como una terapia alternativa. Está orientado a ayudar al habitante de la ciudad o al que vive en cualquier localidad del país a que su día sea mejor. A correr un poquito los problemas. No a olvidarlos, a correrlos un poco al costado. Utilizar el dramatismo, la densidad, la exageración que nos caracteriza como argentinos, pero a través del humor, de la ironía, como un catalizador de las cosas que nos pasan. La realidad siempre está ahí y hay que atravesarla, por eso es bueno procesar ese tránsito desde el humor, para que sea más llevadero.
–¿Cómo surgió el nombre: Circo Súper Pop?
Salió casi en forma natural. Pop, por la radio. Súper, porque es una palabra que se usa mucho y circo porque como país somos un circo. Somos todos equilibristas, somos todos malabaristas, somos todos magos, somos todos contorsionistas, somos todos escapistas. En la vida cotidiana nos volvimos todos artistas de circo para seguir adelante. En Buenos Aires, una ciudad grande, estamos inmersos en la locura. En un pueblo más chico, la cosa pasa más desapercibida, pero prendés la tele y ahí tenés a la locura también.
–¿Cuándo descubriste esta verdad de que el humor es sanador?
Primero, naturalmente. Mi personalidad es así, soy una persona que tiende a correr el velo del drama con risa. Me sale así. A veces hasta en forma desubicada, en momentos no oportunos y políticamente incorrectos. Hago chistes o disparo ironías que no son bienvenidas. Desde el principio de mi profesión está esa tendencia mía. En Aquí, radio Bangkok fue un poco así. Buenos Aires, una divina comedia, también. Pero se me confirmó el carácter sanador del humor con Lalo por hecho, donde tuve la audiencia más grande en toda mi carrera. Allí la palabra que más escuchaba del público era “gracias”. Me agradecían por ayudarlos a pasar la mañana, por levantarles el ánimo, por hacerlos reír aún si la estaban pasando mal. Como ahora seguimos en esta “Argentimba”, como llamo al país, porque parece que todo lo jugáramos a vida o muerte cada cinco segundos, decidí que éste fuera un programa con ese tenor. Muy nutrido de la actualidad, pero en solfa.
El equipo de Circo Súper Pop está encabezado por la locutora Jimena Vallejos que permanecerá las cuatro horas del programa junto a Lalo. “Va a ser la coconductora, es una de las patas del programa”, sostiene él. A diario estarán también los periodistas Iván Schargrodsky y Héctor Gallo. “Iván será mi informante, va a aportar aquello que le sirva a la gente para encarar su día. Los aumentos de precio, los accidentes y aquellas noticias políticas de peso que impliquen cambios estructurales en nuestra vida. Héctor, a quien conocemos como «El gallito» nos dará la data de lo que pase en deporte. Los resultados, los pases de clubes, ese tipo de cosas. No la gilada de la política de lo que pasa en la AFA o en la FIFA”, adelanta el conductor. Por otro lado también estará Pato Smink, un DJ y percusionista que estudió filosofía e historia de la música y se hizo experto en cumbia. Los lunes preparará un segmento musical especial para arrancar la semana con buen ánimo. Para completar el grupo, en distintos días de la semana participaran varios profesionales que acompañaron a Lalo en otras propuestas radiales. El primero Douglas Vinci, de la época de Aquí, radio Bangkok. Otro, Pancho Muñoz, que alguna vez fue El hombre da la bolsa del cirujeo. Y también estará el ex raportero Carlos Sturze. “Lo que no vamos a tener son columnistas fijos. Vamos a recurrir cada día a las personalidades que sean necesarias, para tratar los temas que aparezcan en agenda”, aclara taxativamente Mir.
–A alguien como vos que tiene en su trayectoria varios programas muy innovadores, ¿le pesa ese antecedente cada vez que encara un proyecto nuevo?
–En 1993, cuando regresé con Tutti Frutti por radio Del Plata, luego de un sabático, volvía con la mochila de Aquí, radio Bangkok y Buenos Aires, una divina comedia. Tutti Frutti fue como una evolución de aquellos programas. Después cuando hice Animal de radio en Rock & Pop fue diferente. Ese era un programa de guión. Estaba concebido como uno de estos programas de divulgación de los que se ven en Discovery o en Animal Planet, haciendo foco en el ser humano como especie. Por la misma época cuando hice Lalo Bla Bla, era el comienzo de esto que llamo la "Argentimba" y la idea del programa era recuperar el discurso. No decir pavadas, ni reproducirlas. Cuando llegué a La 100 entre a una radio de formato y me adapté a eso. Con Maju le pusimos algo de personalidad a un programa en una radio de formato musical. O sea que a veces la mochila pesa y otras no. Ahora vuelvo a una propuesta con personalidad, similar de aquella del principio. Aquí, radio Bangkok era una ficción en la que trasmitíamos desde el reino de Tailandia. Era de noche mientras acá era de día. Un envoltorio para cubrir un programa de radio que en esencia es un grupo de chabones hablando disparates. Ahora ese envoltorio es un circo.
–En el panorama actual de la radio ¿qué propuestas te gustan y cuáles no?
–En general no tengo problema con ninguna propuesta de las que hay. La radio es un medio de llegada muy amplia. Hace poco leí un estudio de Marina Zucchi que consigna que seis millones de personas sintonizan radio en Capital y Gran Buenos Aires, al menos unas dos horas por día. Es muchísimo. Lo que no me gusta es cuando ocupan espacio artístico en un programa con contenidos de redes sociales o de otros medios. Me parece que está muy bien usar las redes sociales como herramientas. Pero no como contenidos. El contenido debe ser propio. La radio tiene su propio contenido, no sirve usar en crudo lo que proviene de otros medios. Si para hacer radio uso el contenido de Instagram, ¿qué hago, cuento fotos? Ese uso indiscriminado de los contenidos de la redes en la radio es el que no me gusta.
Otras noticias de Lalo Mir
- 1
Claudia Villafañe: su mejor rol, por qué no volvería a participar de un reality y el llamado que le hizo Diego Maradona horas antes de morir
- 2
El mal momento que lo tocó vivir a China Suárez a pocos días de Navidad
- 3
Con qué figura de la selección argentina habría tenido un romance secreto Emilia Attias
- 4
John Goodman, el actor de Los Picapiedra, luce irreconocible tras su gran cambio físico